Los retos de Lula para desafiar a Bolsonaro
El expresidente emplea un discurso que antagoniza con las posturas radicales del actual mandatario
El expresidente de Brasil,?Lula da Silva,?est¨¢ de vuelta en el tablero pol¨ªtico. Ha despertado a sus bases al tiempo que ha provocado las primeras reacciones de sus adversarios. Durante su discurso en S?o Bernardo do Campo endulz¨® el coraz¨®n de sus seguidores con palabras de esperanza de un pa¨ªs mejor, incluido el aviso de que la izquierda vencer¨¢ a la extrema derecha en 2022. Tambi¨¦n trajo consigo de nuevo los fantasmas que alimentan la narrativa del Gobierno de Jair Bolsonaro y a los detractores del Partido de los Trabajadores (PT). Despu¨¦s de acusar a Bolsonaro de gobernar para los ¡°milicianos de Rio de Janeiro¡± y de llamar al ministro Sergio Moro ¡°canalla¡±, Lula mencion¨® las protestas callejeras que se est¨¢n produciendo en Chile desde hace dos semanas, y cit¨® a los chilenos como ejemplo para ¡°resistir¡± y ¡°luchar¡±.?
Esa fue la excusa para acusar al expresidente de promover la violencia. ¡°Lula, en su discurso, muestra qui¨¦n es y qu¨¦ desea para el pa¨ªs. Incita a la violencia (cita al pueblo de Chile como ejemplo), ataca a varias instituciones, ofende al presidente de la rep¨²blica y muestra su total desconocimiento sobre la carrera militar¡±, escribi¨® en las redes sociales el general Augusto Heleno, ministro de Seguridad Institucional.?
Claudio Couto, polit¨®logo y profesor de la Fundaci¨®n Get¨²lio Vargas, considera que el discurso encendido de Lula hacia su p¨²blico es estrat¨¦gico para polarizar con Bolsonaro y erigirse en su principal opositor. ¡°No ha sido radical, fue un discurso fuerte que marca las distancias con la extrema derecha [de Bolsonaro]¡±, completa. Lo que definir¨¢ el juego electoral no son las palabras ¨¢cidas o dulces del discurso. ¡°Es saber si va a buscar a Ciro Gomes o no, si establecer¨¢ contactos o si se va a aislar¡±, concluye el profesor.?
La izquierda en Brasil se fragment¨® tras las elecciones de 2018 con la fractura expuesta con el Partido Democr¨¢tico Laborista, hoy dominado por el excandidato presidencial Ciro Gomes,?quien nunca visit¨® a Lula en la c¨¢rcel y al que critica siempre que puede. Bajar la guardia es un desaf¨ªo ante una derecha que tambi¨¦n se dividi¨® tras una alianza que permiti¨® a Bolsonaro ganar las elecciones.
¡°La izquierda nunca ha estado muy unida¡±, subraya la polit¨®loga Maria Herm¨ªnia Tavares, que no cree en una radicalizaci¨®n de Lula ni del PT. ¡°Ni en los discursos m¨¢s virulentos Lula fue radical. Es un pol¨ªtico de negociaci¨®n, y eso puede crear un amplio campo de oposici¨®n si se estira hasta el conjunto de los partidos de centro, hasta el MDB (Movimiento Democr¨¢tico Brasile?o, de Michel Temer), porque ya gobern¨® con ellos¡±, opina. Ahora, el PT necesita unir fuerzas primero. ¡°El partido estaba encerrado en Curitiba y ahora lo han soltado¡±.?
Couto coincide. ¡°Hoy tiene m¨¢s simpatizantes que detractores, aunque tambi¨¦n tendremos una fuerte movilizaci¨®n de los bolsonaristas¡±. El profesor entiende que si Lula act¨²a como principal mediador de la oposici¨®n, el discurso de la izquierda se fortalece. ¡°Lula solo lograr¨¢ capitalizar esa ventaja si ¡°se pelea menos y dialoga m¨¢s¡±.??
El l¨ªder del PT tiene en su contra la pesada etiqueta de haber estado en prisi¨®n, aunque su caso est¨¦ discuti¨¦ndose en el sistema judicial, con un recurso de recusaci¨®n del exjuez Sergio Moro que podr¨ªa resolverse este mes y anular el proceso.
¡°Lula fue condenado y gran parte de la poblaci¨®n entiende que es un delincuente. La mayor¨ªa de los brasile?os no ha celebrado su salida y ya no tiene ese poder de llevar tanta gente a la calle, a pesar de su oratoria¡±, opina Sergio Denicoli, director de Big Data de AP Exata. Es un flanco que Bolsonaro y Moro explotaron el s¨¢bado. El presidente se refiri¨® a Lula como un ¡°canalla, moment¨¢neamente libre, pero lleno de culpa¡±. Moro escribi¨® en Twitter que no contestar¨ªa a ¡°delincuentes, encarcelados o en libertad¡±, en respuesta a los ataques de Lula.?
Si el Supremo estima el recurso de recusaci¨®n cambiar¨ªa el estatus de Lula, analiza el jurista Marco Aur¨¦lio de Carvalho. El experto ve posibilidades de que el expresidente salga victorioso del fallo que puede producirse este mes en la Segunda Sala. ¡°Puede rehabilitarse pol¨ªticamente y todos los dem¨¢s procesos a los que se enfrenta estar¨ªan contaminados por la recusaci¨®n de Moro¡±, afirma. En ese caso, Lula tendr¨ªa una capacidad de regeneraci¨®n pol¨ªtica mucho m¨¢s grande, pondera Couto. ¡°Si se anula el juicio, cambian totalmente las tornas¡±.?
Distracci¨®n provocada?
El antagonismo entre Lula y Bolsonaro beneficia m¨¢s al segundo. ¡°El presidente opera todo el tiempo siendo anti-PT. El hecho de que Lula est¨¦ fuera de la c¨¢rcel hace que su discurso sea m¨¢s efectivo. Ahora puede decir que la corrupci¨®n est¨¢ ganando y que el Supremo est¨¢ cediendo a la presi¨®n de los condenados¡±, analiza el acad¨¦mico. Los movimientos de la derecha en las calles explotaron precisamente eso el s¨¢bado, incentivando el apoyo a la Propuesta de Enmienda a la Constituci¨®n para revertir la decisi¨®n del Supremo que abri¨® el paso a la liberaci¨®n de Lula y a otros enemigos suyos, como el exministro Jos¨¦ Dirceu.?
Para Bolsonaro, el regreso de Lula al escenario nacional ayuda a reorientar el debate hacia el nivel ideol¨®gico. ¡°Quita el foco a las dificultades diarias que su Gobierno tiene¡±, expresa el analista Thiago de Arag?o. ¡°Eso tambi¨¦n es lo que Lula quiere, quitarle el foco a Bolsonaro mientras busca apoyos? de los partidos del centro para inhibir la capacidad del presidente de formar una alianza fuerte¡±, a?ade.?
La baza del presidente es limitada. Bolsonaro tambi¨¦n tiene esqueletos en el armario jur¨ªdico. Su hijo, el senador Flavio Bolsonaro, est¨¢ siendo investigado por unas transacciones financieras sospechosas de un exfuncionario de su despacho. Ser¨¢ un juego de resistencia para los dos frentes de aqu¨ª a 2022.
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