EE UU saca de L¨ªbano a un antiguo acusado de cr¨ªmenes de guerra que ten¨ªa prohibido salir del pa¨ªs

En plena crisis del coronavirus y a las puertas de un colapso financiero, otra rocambolesca historia de fugitivos sacude L¨ªbano. El a?o empez¨® con la sorprendente huida a Beirut del magnate del automovilismo Carlos Ghosn, lo que enfri¨® las relaciones entre L¨ªbano y la justicia de Jap¨®n. Esta semana, la ins¨®lita salida del pa¨ªs de Amer al Fakhoury, un ciudadano con doble nacionalidad libanesa y estadounidense que en su momento fue juzgado en ausencia en L¨ªbano por cr¨ªmenes de guerra 20 a?os atr¨¢s, ha tensado las relaciones entre Beirut y Washington. Al Fakhoury abandon¨® la capital libanesa este pasado jueves en un helic¨®ptero militar desde la embajada de EE UU. Lo hizo a la luz del d¨ªa, en medio del bloqueo a¨¦reo impuesto por el Gobierno liban¨¦s como medida para frenar la propagaci¨®n de la Covid-19 y a pesar de la prohibici¨®n de viajar de la justicia del pa¨ªs.

Al Fakhoury regres¨® tras 20 a?os de exilio a L¨ªbano en septiembre pasado porque, seg¨²n sus hijas, hab¨ªa garant¨ªas de que no se le perseguir¨ªa al haber prescrito supuestamente los delitos por los que fue sentenciado. Sin embargo, fue encarcelado, lo que provoc¨® que varios senadores estadounidenses reclamaran su liberaci¨®n bajo advertencia de que, en caso contrario, pedir¨ªan sanciones econ¨®micas a aquellos jueces y oficiales libaneses que se opusieran. Al final, la justicia libanesa puso en libertad a Al Fakhoury este pasado lunes tras dictaminar que su condena por cr¨ªmenes de guerra hab¨ªa quedado prescrita, y dando por nulo el juicio previsto para el pr¨®ximo 16 de abril.

Pero el embrollo no acaba ah¨ª, porque 24 horas despu¨¦s, el comisionado de Estado para el Tribunal Militar, Ghassan Khoury, apel¨® la decisi¨®n con el argumento de que los delitos de los que se le acusa entran en la categor¨ªa de cr¨ªmenes contra la humanidad sin prescripci¨®n temporal. Adem¨¢s, tras las quejas interpuestas por antiguos presos de la c¨¢rcel de Jiam, donde se acusa a Al Fakhoury de haber cometido torturas, otro juez emiti¨® una prohibici¨®n de viaje que qued¨® anulada por la v¨ªa de los hechos al sacarlo del pa¨ªs Estados Unidos.

Conocido como El carnicero del Jiam, a Al Fakhoury, de 57 a?os y padre de cuatro hijas, se le imputa el secuestro y tortura de miles de libaneses, as¨ª como de la muerte de al menos 10 de ellos, en los a?os en que sirvi¨® en la c¨¢rcel del Jiam -en el sur- durante la ocupaci¨®n israel¨ª (1982-2000)-. C¨¦lebre centro de torturas, se estima que hasta 5.000 personas pasaron por las celdas de Jiam, muchos de ellos milicianos de Hezbol¨¢ y guerrilleros palestinos.

Con la retirada unilateral del Ej¨¦rcito israel¨ª en 2000, y tras 18 a?os de ocupaci¨®n, los ¨²ltimos 144 presos del Jiam fueron liberados por vecinos que asaltaron el recinto. En el repliegue de los soldados israel¨ªes huyeron docenas de oficiales del Ej¨¦rcito Liban¨¦s del Sur, la milicia colaboracionista de la que Al Fakhoury form¨® parte cuando serv¨ªa en la prisi¨®n.

Una vez en Israel, el entonces pr¨®fugo viaj¨® a EE UU, donde abri¨® un restaurante en el Estado de New Hampshire. En 1996, y un a?o antes de que Washington catalogara a Hezbol¨¢ como grupo terrorista, Al Fakhoury fue condenado en Beirut e in absentia a 15 a?os de prisi¨®n ¡°por colaboraci¨®n con el enemigo israel¨ª¡±. Entonces, el pa¨ªs estaba partido en dos. Hoy, el Partido de Dios es parte integrante del fr¨¢gil Gobierno de L¨ªbano, reci¨¦n formado a principios de a?o.

La defensa de Al Fakhoury ha negado las acusaciones y arguye que su cliente trabaj¨® en la citada prisi¨®n ¡°entre 1989 y 1996 y se hizo cargo del papeleo, la limpieza y alimento de los reos", seg¨²n declaraciones de la abogada Celia Atallah a la cadena norteamericana Fox.

¡°Los americanos intentaron sacar a Al Fakhoury desde el aeropuerto de Beirut, pero las fuerzas de seguridad relevantes lo impidieron¡±, ha asegurado el l¨ªder de Hezbol¨¢, Has¨¢n Nasral¨¢, quien acusa a EE UU de socavar la justicia y violar la soberan¨ªa de L¨ªbano al llevarse al fugitivo del pa¨ªs.

¡°La absoluci¨®n de Amer al Fakhoury supone una burla del sistema judicial de L¨ªbano y subraya la necesidad de reformar la ley sobre la tortura de 2017. Hay evidencias cre¨ªbles que apuntan a la participaci¨®n de Al Fakhoury en la tortura de miles de personas¡±, ha escrito, por su parte, en su cuenta de Twitter Aya Majzoub, investigadora de Human Rights Watch.

El presidente estadounidense, Donald Trump, tambi¨¦n se ha pronunciado al respecto. ¡°No hay mayor prioridad para Estados Unidos que la seguridad y el bienestar de nuestros ciudadanos¡±, dijo este jueves tras asegurar que Al Fakhoury se encontraba "por fin a salvo con su familia¡±.

¡°Estoy muy agradecido al Gobierno liban¨¦s que ha colaborado con nosotros¡±, seg¨²n el mandatario. Sus declaraciones han desatado tanto la indignaci¨®n popular en las redes sociales como turbulencias pol¨ªticas en L¨ªbano. ¡°El crimen de colaboraci¨®n con el enemigo israel¨ª no puede ser olvidado¡±, ha dado por respuesta en su cuenta oficial de Twitter el primer ministro liban¨¦s, Hasan Diab. Acto seguido, el responsable de Exteriores, Nasif Hitti, llam¨® a consultas a la jefa de la delegaci¨®n diplom¨¢tica estadounidense, Dorothy Shea, para pedir explicaciones sobre tan inusitada operaci¨®n. A la controversia se ha sumado el jefe del Tribunal Militar liban¨¦s, el general Husein Abdal¨¢, quien ha presentado su dimisi¨®n en protesta por la apresurada liberaci¨®n de Al Fakhoury.

Presiones

¡°EE UU ha ejercido presiones sobre los jueces para liberar al agente de Israel, y algunos de ellos han cedido¡±, ha lamentado este viernes y durante un discurso televisado Hasan Nasral¨¢, l¨ªder de Hezbol¨¢. Por presiones hace referencia a las amenazas vertidas por varios senadores estadounidenses y, en particular, a las de la dem¨®crata Jeanne Shaheen, de New Hampshire y amiga personal de la familia Al Fakhoury.

Shaheen amenaz¨® con respaldar en el Senado una propuesta de reducci¨®n de la ayuda de EE UU a L¨ªbano -que suma 2.790 millones de euros desde 2006 con m¨¢s de la mitad destinada al Ej¨¦rcito liban¨¦s-, e imponer sanciones econ¨®micas por la detenci¨®n en septiembre de Al Fakhoury.

Hezbol¨¢ ha desmentido, por su parte, que la liberaci¨®n responda a un acuerdo bajo la mesa con EE UU ante la amenaza de sanciones.

L¨ªbano e Israel siguen t¨¦cnicamente en estado de guerra y todo ciudadano liban¨¦s tiene vetado viajar al Estado hebreo o comunicarse con ciudadanos israel¨ªes bajo pena de c¨¢rcel. La milicia de Hezbol¨¢ y el Ej¨¦rcito israel¨ª libraron su ¨²ltima guerra en julio de 2006; se sald¨® con un balance de 1.200 libaneses muertos, la gran mayor¨ªa civiles, y 156 bajas israel¨ªes, mayoritariamente militares.