Pandemia y pobreza, el aterrador doble reto de ?frica
La regi¨®n busca f¨®rmulas para acelerar el mercado com¨²n con el objetivo de enfrentarse al colapso econ¨®mico mientras el coronavirus comienza a propagarse por la regi¨®n
Mientras el coronavirus comienza a propagarse por ?frica, el continente m¨¢s empobrecido se prepara tambi¨¦n para una grave crisis econ¨®mica con perfiles propios. Con una fuerte dependencia del comercio exterior, sobre todo de la venta de materias primas, y con las grandes potencias mundiales desliz¨¢ndose sin freno por la pendiente de la recesi¨®n, la Comisi¨®n Econ¨®mica de Naciones Unidas para ?frica ya ha hecho sus c¨¢lculos: unos 100.000 millones de d¨®lares en p¨¦rdidas. Los expertos lo tie...
Mientras el coronavirus comienza a propagarse por ?frica, el continente m¨¢s empobrecido se prepara tambi¨¦n para una grave crisis econ¨®mica con perfiles propios. Con una fuerte dependencia del comercio exterior, sobre todo de la venta de materias primas, y con las grandes potencias mundiales desliz¨¢ndose sin freno por la pendiente de la recesi¨®n, la Comisi¨®n Econ¨®mica de Naciones Unidas para ?frica ya ha hecho sus c¨¢lculos: unos 100.000 millones de d¨®lares en p¨¦rdidas. Los expertos lo tienen claro. En el nuevo mundo que alumbrar¨¢ el coronavirus, ?frica tendr¨¢ que ser m¨¢s autosuficiente y potenciar el comercio interior. Con las fronteras hoy cerradas, este es el reto de ma?ana.
¡°No tenemos otra opci¨®n que la solidaridad interna¡±, responde a El Pa¨ªs el comisario de Comercio de la Uni¨®n Africana, el zambiano Albert Muchanga. ¡°todos los pa¨ªses se enfrentan al riesgo de escasez, aumento del paro y subida generalizada de precios. Esta crisis ha alterado las cadenas regionales y mundiales y ?frica no est¨¢ exenta¡±. Si en los ¨²ltimos a?os varios pa¨ªses africanos hab¨ªan experimentado cifras destacadas de crecimiento econ¨®mico situ¨¢ndose incluso a la cabeza del ranking mundial, nadie duda ahora del inminente batacazo. ¡°Es pronto a¨²n para evaluar el impacto de todo esto y el tiempo que le llevar¨¢ al continente restablecer el equilibrio macroecon¨®mico¡±, matiza Muchanga.
El cierre de fronteras derivado del coronavirus genera un problema a?adido para el abastecimiento. Si bien la medida es comprensible desde la perspectiva del combate contra la pandemia, su primera consecuencia ha sido la interrupci¨®n de las cadenas de suministro y las alteraciones en los intercambios intraafricanos. Justo en el momento en que todo estaba listo para la entrada en vigor de la Zona de Libre Comercio Africana (AfCFTA, por sus siglas en ingl¨¦s), con una cumbre prevista en julio en N¨ªger sobre la que ahora pesa la amenaza de cancelaci¨®n, llega este frenazo en seco. Sin embargo, la gran paradoja es que ser¨¢ precisamente el comercio intraafricano que este acuerdo pretende favorecer quien puede amortiguar los graves efectos econ¨®micos de esta crisis.
¡°El objetivo es detener la propagaci¨®n del virus y el aumento de nuevas infecciones y sin el cierre de fronteras ser¨ªa imposible superarlo¡±, a?ade Muchanga, ¡°sin embargo, el desaf¨ªo tambi¨¦n crea algunas oportunidades para que los pa¨ªses africanos desarrollen cadenas de valor nacionales y regionales. Un gran mercado creado por el libre comercio continental ofrece oportunidades para una recuperaci¨®n m¨¢s r¨¢pida y una transformaci¨®n estructural¡±, opina. La respuesta, por tanto, es el AfCFTA, ¡°A¨²n no se ha tomado la decisi¨®n de retrasar la fecha de entrada en vigor¡±, apunta el comisario, pero dada la evoluci¨®n de una pandemia cuyo pico se alcanzar¨¢ en ?frica en mayo seg¨²n los expertos, todo indica en esa direcci¨®n.
El comercio entre los pa¨ªses del continente representa entre el 15 y el 18% del total de sus intercambios, mientras que en Europa ese porcentaje se eleva a un 69% y en Asia a un 59%. Con la entrada en vigor del AfCFTA, cuya sede est¨¢ en Ghana, y con la aceleraci¨®n de los procesos de integraci¨®n econ¨®micos regionales, se esperaba superar el 50% en 2022. Dos tercios de los pa¨ªses africanos son importadores netos de productos alimenticios.
El secretario ejecutivo de la agencia de planificaci¨®n y coordinaci¨®n de la Nueva Alianza para el Desarrollo de ?frica (NEPAD), el nigerino Ibrahim Assane Mayaki, coincide en el an¨¢lisis. ¡°En estas circunstancias, ?frica no tiene otra opci¨®n que la de depender de su propia resiliencia, fortalezas y agilidad, en lugar de esperar una salvaci¨®n externa, para mitigar el impacto de la inminente crisis y prepararse para el pr¨®ximo ciclo de globalizaci¨®n¡±. A su juicio el desmantelamiento del 90% de las barreras arancelarias previsto en el AfCFTA para los pr¨®ximos cinco a?os deber¨ªa acelerarse.
La pasada semana, el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa, en nombre del continente, plante¨® en la cumbre del G-20 que ?frica iba a necesitar la solidaridad del mundo, poniendo el foco en la suspensi¨®n temporal de la deuda externa, una medida que el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial ven con buenos ojos dada la magnitud del desastre. Los ministros de Econom¨ªa tasaron esa ayuda en 100.000 millones de d¨®lares. Sin embargo, como asegura Mayaki, la clave pasa por reducir la dependencia y activar de una vez el proyecto de industrializaci¨®n. ¡°?frica debe ser una propuesta atractiva cuando se revierta la econom¨ªa global. El continente no tiene tiempo que perder¡±.