El crecimiento econ¨®mico en ?frica no frena la emigraci¨®n de sus j¨®venes

Con un aeropuerto renovado, la destrucci¨®n de comercios y barriadas informales que escoltaban las calles principales y media ciudad bajo apisonadora, Abiy¨¢n, la capital econ¨®mica de Costa de Marfil?¡ª que acoge este 29 y 30 de noviembre la 5? Cumbre Uni¨®n Europea-Uni¨®n Africana¡ª?navega a velocidad de crucero para recuperar su gloria de anta?o, cuando era considerada la gran joya del ?frica Occidental. Pero el despertar de la ciudad contrasta con el aumento de las personas que viven con menos de un euro al d¨ªa en todo el pa¨ªs: un mill¨®n de personas m¨¢s que hace diez a?os¡ª cuando Costa de Marfil estaba en conflicto¡ª, seg¨²n datos del Banco Mundial. El pa¨ªs es el reflejo de lo que pasa, a gran escala, en el continente Africano.?

El rostro de Abiy¨¢n, esculpido por la laguna, ha cambiado radicalmente desde 2011, cuando acab¨® la guerra y el nuevo gobierno de Alassane Ouattara se propuso relanzar la econom¨ªa mirando al exterior. Efectivamente, los grandes inversores han vuelto a Costa de Marfil y la naci¨®n oeste africana goza de un flamante 9% de crecimiento econ¨®mico de media desde el a?o 2012. Est¨¢ reeditando su fama de ¡°milagro econ¨®mico¡± y algunos ya le llaman ¡°el tigre africano¡±. Los grandes capitales exteriores han permitido construir infraestructuras fundamentales para descongestionar el pulm¨®n econ¨®mico del pa¨ªs, maquillar de elegancia la bochornosa e hiperactiva ciudad, y generar beneficios, pero han pisado en su despegue al imprescindible sector informal, y han dejado fuera de juego a una parte de la poblaci¨®n que antes sobreviv¨ªa por su cuenta y ahora se ha quedado sin empleo.

Mientras la clase media se enriquece y disfruta el sabor del boom en restaurantes y hoteles como el Hotel Ivoire, donde 83 jefes de Estado y de gobierno de la Uni¨®n Africana y la Uni¨®n Europea discuten esta semana los grandes retos comunes entre las dos regiones, miles de marfile?os emprenden el peligroso viaje hacia Europa. ¡°El dinero no circula como antes¡±, se dice en las calles de Abiy¨¢n. Las oportunidades, se buscan fuera.

Parad¨®jicamente, el milagro econ¨®mico marfile?o est¨¢ expulsando a cientos de j¨®venes: es la cuarta nacionalidad de llegada por mar a la Uni¨®n Europea, seg¨²n Naciones Unidas. De los casi 170.000 inmigrantes que han llegado a Europa por el Mediterr¨¢neo este 2017, el 7,9% son marfile?os, seg¨²n datos de la organizaci¨®n internacional.

Con un despertar a doble velocidad y una poblaci¨®n joven y activa cada vez m¨¢s numerosa y sin empleo, el caso marfile?o es el reflejo de lo que pasa, a gran escala, en el continente africano. Con un 60% de la poblaci¨®n menor de 25 a?os, ?frica es la regi¨®n m¨¢s joven del mundo, en contraste con una Europa cada vez m¨¢s anciana.

¡°Tenemos que poder buscar el futuro en nuestro pa¨ªs¡±, ha reclamado vehemente la presidenta de la Uni¨®n de la Juventud Panafricana, la congole?a Francine Furaha Muyumba, en la sesi¨®n inaugural de la Cumbre de Abidy¨¢n, apuntando que, para ello ¡°necesitamos que se apoye a los emprendedores¡±.

Esa juventud cada vez m¨¢s numerosa es el gran potencial pero tambi¨¦n el gran riesgo para ?frica y para Europa. El 31% de desempleo a nivel continental empuja a miles a iniciar la peligrosa traves¨ªa hacia el norte, y el problema podr¨ªa ser pronto mucho mayor. ¡°El 70% de los empleos actuales est¨¢ en riesgo de desaparecer en los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo por las mutaciones en el mercado de trabajo, sobre todo debido a la automatizaci¨®n del sector industrial¡±, advierte el Banco Mundial

Bajo el t¨ªtulo ¡°Invertir en la Juventud para un Desarrollo Sostenible¡±, la Cumbre de Abiy¨¢n ha colocado justamente a los j¨®venes en el centro de la agenda. Los retos sobre inmigraci¨®n y seguridad, los dos pilares de las discusiones, no tendr¨¢n soluci¨®n si no se cuenta con los 200 millones de africanos que ahora tienen entre 15 y 24 a?os.