Washington DC vuelve a intentar convertirse en un Estado de la Uni¨®n
La C¨¢mara de Representantes vota este viernes el nuevo estatus de la capital de Estados Unidos
¡°?Quiere usted decir que el Distrito de Columbia sea un Estado? ?Por qu¨¦? ?Para que puedan los dem¨®cratas tener dos senadores m¨¢s y cinco congresistas? No, gracias. Nunca pasar¨¢¡±. La cita es del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al peri¨®dico de su ciudad, The New York Post, el pasado mes de mayo, cuando se le pregunt¨® su opini¨®n sobre que la capital de Estados Unidos dejar¨¢ de tener el estatus de Distrito para convertirse en el Estado 51 de la Uni¨®n. La C¨¢mara de Representantes del Congreso de Estados Unidos, de mayor¨ªa dem¨®crata, vivir¨¢ una jornada hist¨®rica este viernes cuando apruebe la legislaci¨®n que dar¨ªa la posibilidad de que los m¨¢s de 700.000 habitantes del Distrito de Columbia tengan representaci¨®n y voto en el Capitolio. El ¨²nico problema de esa victoria es que ese ser¨¢ todo su recorrido.
Desde la Casa Blanca, que dejaba saber el pasado mi¨¦rcoles que de llegar a haber una ley sobre la mesa del presidente para ser firmada que otorgase la categor¨ªa de Estado al Distrito de Columbia la vetar¨ªa, hasta los necesarios 60 votos para evitar el filibusterismo en el Senado, todos los pasos siguientes al dado en la C¨¢mara est¨¢n condenados al fracaso.
The rule before us for the D.C. statehood bill is no ordinary rule. It is the prelude to passage of a historic bill, and I use these words advisedly. #DCStatehood #Rule #LastStep pic.twitter.com/oEnFmEDJ0v
— Eleanor #DCStatehood Holmes Norton (@EleanorNorton) June 25, 2020
El l¨ªder de la mayor¨ªa republicana en el Senado, Mitch McConnell, se ha mostrado claro al respecto: de llegar el proyecto de ley a la C¨¢mara Alta no lo considerar¨ªa para votaci¨®n. El senador republicano por Carolina del Sur, Mike Rounds, expresaba el mismo sentir al declarar que ¡°los Padres Fundadores ten¨ªan raz¨®n y fueron muy claros a la hora de dejar fuera al Distrito de Columbia¡±. ¡°No veo un voto en el Senado¡±, recalc¨® Rounds.
La ¨²ltima vez que se vot¨® en la C¨¢mara la propuesta para que D.C. (abreviatura en siglas por las que se conoce al Distrito de Columbia) se convirtiera en un Estado fue en 1993 y fracas¨® por 277 votos frente a 153 (tan solo tuvo un voto republicano a favor). Por aquel entonces, el Distrito sufr¨ªa de un alto ¨ªndice de criminalidad y se encontraba al borde de la bancarrota.
El escenario para lograr la ansiada categor¨ªa de Estado y que el lema que lucen las matr¨ªculas de los coches sea cosa del pasado (¡±Taxation Without Representation¡±, ¡°Impuestos sin representaci¨®n¡± en espa?ol, porque se pagan impuestos federales pero no hay representantes en el Congreso con derecho a voto) es ahora muy distinto. Los dem¨®cratas de la C¨¢mara y otras personalidades de la pol¨ªtica, como la alcaldesa de la ciudad, Muriel Bowser, renovaron una lucha que parec¨ªa anestesiada despu¨¦s de que Trump decidiera desplegar a la Guardia Nacional para aplastar la protesta civil tras la muerte en custodia policial del afroamericano George Floyd.
Con helic¨®pteros militares sobrevolando las calles de la ciudad durante el pasado mes de mayo, la alcaldesa de la ciudad decidi¨® que hab¨ªa llegado el momento de dar un nuevo empuj¨®n a la estatalidad. ¡°Lo que ha hecho este presidente es algo que nunca hab¨ªa sucedido antes, tropas federales, FBI [la polic¨ªa federal], Guardia Nacional tra¨ªda desde otros puntos del pa¨ªs patrullando las calles de Washington¡±, dijo Bowser, quien asegur¨® que fue en ese momento cuando fue consciente de que hab¨ªa que intentar un nuevo asalto para abandonar el estatus de Distrito.
El hecho de que el Distrito de Columbia no sea un Estado se traduce en que no tiene un gobernador, carece de representaci¨®n en el Senado y tan solo tiene una figura -sin voto- en la C¨¢mara. Esta figura es la representante Eleanor Holmes Norton, quien defiende la estatalidad de la capital de la naci¨®n desde que lleg¨® al cargo en 1991. La ley que ella misma ha impulsado -la H.R. 51- cuenta con 226 apoyos en la C¨¢mara -m¨¢s que suficientes para pasar la votaci¨®n- y 40 en el Senado. ¡°Mi bisabuelo Richard Holmes escap¨® de la esclavitud de una plantaci¨®n en Virginia y lleg¨® hasta D.C., todo un camino hacia la libertad pero no a la igualdad de derechos¡±, declar¨® Norton. ¡°Durante tres generaciones a mi familia se le ha denegado los derechos que otros americanos dan por hecho¡±, finaliz¨® la representante.
La presidenta de la C¨¢mara, la dem¨®crata Nancy Pelosi, declar¨® esta semana que era una injusticia que los ciudadanos del Distrito ¡°pagaran impuestos, sirvieran a su pa¨ªs en el Ej¨¦rcitos y contribuyeran a la econom¨ªa del pa¨ªs¡± mientras se les denegaba derechos b¨¢sicos, como el voto en el Capitolio. Para los republicanos, la creaci¨®n de un nuevo Estado violar¨ªa la enmienda 23 de la Constituci¨®n, que en 1961 establec¨ªa que el Distrito de Columbia constitu¨ªa la sede del Gobierno. En su opini¨®n, adem¨¢s, D.C. no est¨¢ preparado para asumir las responsabilidades que conlleva detentar el estatus de Estado.
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