Las presidenciales polacas examinan el dominio ultraconservador y la tensa relaci¨®n con la UE

Polonia vota este domingo a su presidente en los comicios m¨¢s re?idos de los ¨²ltimos a?os. La elecci¨®n entre el mandatario ultraconservador Andrzej Duda, quien ha servido como aliado al gobernante Ley y Justicia (PiS) desde 2015, y el centroderechista Rafal Trzaskowski, alcalde de Varsovia y candidato de Coalici¨®n C¨ªvica (KO), puede tener consecuencias sobre la agenda reformista del Ejecutivo, criticada por socavar el Estado de derecho. La victoria del aspirante opositor, con capacidad para vetar leyes en el Parlamento, cambiar¨ªa tambi¨¦n el rumbo en la tensa relaci¨®n con la UE.

Las elecciones se celebran en un contexto excepcional. La pandemia de la covid-19 (que deja 37.000 contagiados y 1.562 muertos) oblig¨® a la cancelaci¨®n de los comicios en mayo y llev¨® a la sustituci¨®n del candidato de KO. La irrupci¨®n tard¨ªa de Trzaskowski (48 a?os), un europe¨ªsta autoproclamado el aspirante del cambio, alter¨® el curso de las encuestas, que hace tres meses daban como ganador indiscutible a Duda (de la misma edad). El liberal logr¨® el 30,5% de los apoyos en los comicios del 28 de junio, frente al 43,5% del mandatario. Aunque el ¨²ltimo sondeo de IBRIS concede la victoria al primero (47,4% frente al 45,7%), el porcentaje de indecisos y el margen de error del estudio hacen imprevisibles los resultados.

Las dificultades econ¨®micas a las que se enfrenta el pa¨ªs tras la epidemia han servido de argumento a ambos durante la campa?a. Mientras Andrzej Duda insiste en la necesaria colaboraci¨®n entre el Gobierno y la jefatura del Estado, Trzaskowski defiende que el PiS no est¨¢ preparado para dirigir Polonia en circunstancias adversas. No obstante, aunque la Comisi¨®n Europea, en sus previsiones de verano, vaticina una contracci¨®n econ¨®mica del 4,6% para este a?o, el dato supone el menor descenso dentro de la UE, abocada a una ca¨ªda sin precedentes desde la Segunda Guerra Mundial.

La movilizaci¨®n del electorado es clave. ¡°En el caso de Duda, ser¨¢n las personas mayores. El Gobierno ha minimizado los riesgos relacionados con la pandemia para alentar a los votantes de m¨¢s de 60 a?os a acudir a las urnas. Adem¨¢s, en un esfuerzo por consolidar y dinamizar su base de votantes conservadores, el presidente se ha embarcado en una cruzada anti-LGTB, llegando a anunciar un cambio constitucional para prohibir expresamente la adopci¨®n a las parejas del mismo sexo¡±, se?ala Adam Traczyk, analista pol¨ªtico del think tank Global.Lab. ¡°Trzaskowski, por su parte, necesita el apoyo del electorado m¨¢s joven y de quienes votaron por otros candidatos en la primera vuelta, desde la extrema derecha hasta la izquierda. En un intento por desmovilizar a los votantes de PiS busca reducir la polarizaci¨®n que ha envenenado a Polonia durante los ¨²ltimos 15 a?os, desde que Lech Kaczynski [exmandatario fallecido en 2010, hermano gemelo del l¨ªder del PiS, Jaroslaw Kaczynski] y [el ex primer ministro] Donald Tusk compitieron por la presidencia en 2005¡±, a?ade.

¡°En t¨¦rminos de pol¨ªtica exterior, una victoria de Trzaskowski cambiar¨ªa la imagen de Polonia¡±, se?ala Malgorzata Kaczorowska, doctora en Ciencia Pol¨ªtica de la Universidad de Varsovia. ¡°Es un candidato que aporta comunicaci¨®n, apertura, que quiere fortalecer la posici¨®n del pa¨ªs dentro de la UE y reforzar la cooperaci¨®n con los socios comunitarios, al contrario de lo ocurrido en los ¨²ltimos cinco a?os¡±, afirma la acad¨¦mica. ¡°En este periodo Polonia se ha convertido en un enfant terrible de la pol¨ªtica europea, un pa¨ªs que niega el Estado de derecho y que no es merecedor de la confianza del resto¡±, se?ala en referencia a las reformas judiciales, denunciadas en Bruselas por poner en peligro la separaci¨®n de poderes, o a la visi¨®n enfrentada en materia medioambiental, pol¨ªtica migratoria y de derechos humanos. Con la llegada del PiS al Gobierno, Polonia ha experimentado una crisis institucional que ha puesto en peligro los cambios introducidos en 30 a?os de democracia, una transici¨®n que llev¨® a la entrada del pa¨ªs en la OTAN (1999) y culmin¨® con su ingreso en la Uni¨®n Europea (2004), hasta convertirlo en la sexta econom¨ªa de la Uni¨®n.

Pero el ciudadano de a pie no siempre comparte este an¨¢lisis. ¡°Polonia tiene que ser Polonia, no un pa¨ªs sirviente de alemanes o franceses¡±, exclama Joanna, de 60 a?os, en la localidad de Kobylka, a menos de 30 kil¨®metros de Varsovia. Esta instructora de fitness, defensora de Duda, considera que el PiS ha sabido defender los intereses del pa¨ªs y aplaude las ayudas econ¨®micas a las familias otorgadas por el Gobierno. Es en plazas peque?as como esta donde el mandatario goza de mayor popularidad, frente a la fortaleza de Trzaskowski en las grandes ciudades.

La victoria el candidato de KO, adem¨¢s, pondr¨ªa en aprietos la agenda de reformas de Ley y Justicia, que carece de los tres quintos necesarios para revocar el veto presidencial en el Parlamento. ¡°A diferencia de Hungr¨ªa, donde el partido de Viktor Orb¨¢n, Fidesz, tiene una mayor¨ªa constitucional, la alianza gobernante en Polonia [el PiS y otras formaciones menores] no es monol¨ªtica. Con Trzaskowski desafiando el modelo de gobierno de Kaczynski, no se puede descartar que el Ejecutivo caiga y Polonia deba celebrar unas elecciones generales anticipadas¡±, concluye Traczyk.