Boris Johnson busca un portavoz con tono presidencial

Boris Johnson, un pol¨ªtico aficionado a la gestualidad, ha dado un paso m¨¢s para conferir a su Administraci¨®n un tono al estilo presidencialista estadounidense. Y, a decir de sus detractores, pasando por encima de la condici¨®n de monarqu¨ªa parlamentaria del Reino Unido. El primer ministro brit¨¢nico ha lanzado la b¨²squeda de un portavoz que emule al de la Casa Blanca, protagonista de una comparecencia televisiva diaria, para mostrar ¡°un compromiso m¨¢s directo¡± del Gobierno con el p¨²blico.

El dirigente conservador ya sugiri¨® esa intenci¨®n a principios de julio, pero s¨®lo esta semana, y despu¨¦s de que la prensa brit¨¢nica identificara en la plataforma LinkedIn un anuncio para el nuevo puesto, ha podido conocerse el perfil que se espera del candidato y las funciones que este asumir¨¢. El elegido ser¨¢ un profesional experimentado en el trato con los medios de comunicaci¨®n ¡°que se sienta seguro ante las c¨¢maras¡±, pero tambi¨¦n a la hora de trabajar con los ministros y asesores pol¨ªticos, puesto que tendr¨¢ el cargo de consejero especial. Fuentes pr¨®ximas al proceso de selecci¨®n han revelado la preferencia de Downing Street de que el cargo lo desempe?e una mujer.

La maniobra ha sido acogida con enorme recelo por parte del funcionariado de Whitehall (los llamados civil servants), un cuerpo que asesora al Gabinete y sus ministerios desde la m¨¢s estricta imparcialidad. El sindicato que les representa, FDA (en sus siglas en ingl¨¦s) lleva tiempo alertando sobre las maniobras de Dominic Cummings, ide¨®logo del Brexit y mano derecha de Johnson, para recortar las atribuciones de los funcionarios que desde cada departamento tratan con la prensa, en favor de una estrategia de comunicaciones centralizada y controlada por el gur¨² del primer ministro. La maniobra encaja en la creciente politizaci¨®n de los altos funcionarios, como ocurre tambi¨¦n en Estados Unidos. La reciente dimisi¨®n forzada del consejero de Seguridad y jefe del cuerpo de civil servants, Mark Sedwill, fue interpretada en esa l¨ªnea: a partir de septiembre le sustituir¨¢ el negociador brit¨¢nico para el Brexit, David Frost, un eur¨®fobo cuya lealtad a Johnson es su principal m¨¦rito, al igual que ocurre con varios ministros del Gobierno.

El plazo para que los candidatos al flamante cargo de portavoz presenten sus curr¨ªculos (que no deben exceder las 500 palabras) se cerrar¨¢ el 21 de agosto, porque Downing Street prev¨¦ que el elegido se estrene en sus funciones con la llegada del oto?o. El aliciente ser¨¢ un sueldo anual superior a las 100.000 libras (111.000 euros, seg¨²n estimaci¨®n de The Daily Telegraph) y ¡°la oportunidad de comunicarse con la naci¨®n en nombre del primer ministro¡±. Su principal misi¨®n ser¨¢ ¡°representar al Gobierno ante una audiencia de millones de personas, a trav¨¦s de los principales canales de televisi¨®n y de las redes sociales, con la oportunidad de influir y dar forma a la opini¨®n p¨²blica¡±.

Tradicionalmente, la Administraci¨®n mantiene a diario dos sesiones informativas con los periodistas acreditados, a cargo de un funcionario que responde a las preguntas de los medios a puerta cerrada. Sus comentarios son atribuidos en la prensa a ¡°fuentes de Downing Street¡±. Tras el verano, la cita matinal a puerta cerrada se mantendr¨¢, pero el nuevo formato contempla que el futuro portavoz tome las riendas de la segunda ante las c¨¢maras de televisi¨®n. La rueda de prensa diaria se realizar¨¢ en el n¨²mero 9 de Downing Street, colindante con la residencia oficial del primer ministro.

Los planes han sido criticados por el l¨ªder de la oposici¨®n laborista, Keir Starmer, porque considera que el escaparate televisivo de la Administraci¨®n amenaza con ¡°desequilibrar el discurso pol¨ªtico¡±. Chris Bryant, diputado de su partido, ha advertido sobre el riesgo de que la atenci¨®n medi¨¢tica se desv¨ªe del Parlamento, el ¨®rgano legislativo ante el que los ministros y su jefe deben rendir cuentas.

La pandemia del coronavirus propici¨® comparecencias diarias y retransmitidas por televisi¨®n de diferentes responsables del Gabinete brit¨¢nico, asesores cient¨ªficos y, en ocasiones el propio Johnson, a lo largo de m¨¢s de tres meses. ¡°A la gente le ha gustado esa forma directa y detallada de informar al p¨²blico, y yo creo que nos sigue reclamando una forma de comunicaci¨®n m¨¢s estrecha¡±, ha declarado recientemente el mandatario sobre aquellas emisiones que comenzaron el 16 de marzo, tras las cr¨ªticas recibidas por la falta de transparencia en la gesti¨®n de la crisis. Quedaron finiquitadas el 23 de junio, al margen de sesiones puntuales desde entonces para hacer alg¨²n anuncio oficial. Regresar¨¢n en septiembre u octubre, pero esta vez redise?adas a la medida y ambici¨®n del ocupante del 10 de Downing Street, quien ha llegado a ser descrito en la prensa como un populista posmoderno.