Las ONG vuelven a patrullar en el Mediterr¨¢neo para rescatar a migrantes en pleno repunte de llegadas a Italia
M¨¦dicos Sin Fronteras y Sea-Watch regresar¨¢n al mar en los pr¨®ximos d¨ªas a bordo de un nuevo barco, el 'Sea-Watch 4'
Las misiones de salvamento de las ONG van a volver al Mediterr¨¢neo central en los pr¨®ximos d¨ªas tras meses de par¨®n por la pandemia y el bloqueo del Gobierno italiano a sus barcos. Se trata de M¨¦dicos Sin Fronteras y Sea-Watch. La situaci¨®n humanitaria en la zona sigue siendo cr¨ªtica. La pandemia ha propiciado que se incrementen las salidas desde las costas africanas, una de las rutas m¨¢s mort¨ªferas, a causa de las crisis econ¨®micas que atraviesan distintos pa¨ªses y de la guerra civil que est¨¢ devastando Libia.
En los pr¨®ximos d¨ªas, M¨¦dicos Sin Fronteras y Sea-Watch volver¨¢n al mar a bordo de un nuevo barco, el Sea-Watch 4. ¡°Se trata de una colaboraci¨®n de urgencia, ya que los Estados miembros de la Uni¨®n Europea est¨¢n explotando descaradamente la covid-19 como una excusa para restringir a¨²n m¨¢s las actividades de b¨²squeda y rescate, mientras perpet¨²an los ciclos de abuso en Libia y condenan deliberadamente a las personas a ahogarse en el mar a trav¨¦s de pol¨ªticas dirigidas a no prestarles asistencia¡±, ha se?alado Oliver Behn, director de Operaciones de MSF.
El Sea Watch 4 ser¨¢, por el momento, el ¨²nico gran barco de rescate patrullando en el Mediterr¨¢neo central. El pasado junio, varias ONG trataron de activar sus misiones de salvamento en el mar. Pero se toparon con el bloqueo del Ejecutivo italiano. Todas las naves que han realizado alg¨²n rescate en este tiempo, adem¨¢s de pasar una cuarentena obligatoria de dos semanas en los puertos italianos, han sido objeto de inspecciones t¨¦cnicas por parte de las autoridades italianas. Los inspectores han encontrado irregularidades en la mayor¨ªa de los barcos y los han hecho permanecer en puerto para realizar los arreglos pertinentes, que los Estados de bandera de cada embarcaci¨®n deben aprobar despu¨¦s.
Es el caso de la espa?ola Aita Mari, de Salvamento Mar¨ªtimo Humanitario. Desde la organizaci¨®n explican a este diario que el barco, despu¨¦s de 50 d¨ªas inmovilizado en Palermo, consigui¨® un permiso para trasladarse a Espa?a, al puerto de Pasajes. All¨ª sigue bloqueado, a la espera de completar las reparaciones que ha exigido Italia. ¡°Se han hecho unas inspecciones que no corresponden, al Aita Mari se le han aplicado criterios de una categor¨ªa superior de barco. Ya hemos solventado parte de las deficiencias que nos hab¨ªan indicado pero quedan otras dos muy complicadas de arreglar que estamos estudiando¡±, se?alan fuentes de la organizaci¨®n. Y a?aden: ¡°El Gobierno espa?ol deber¨ªa tomar cartas en el asunto y decir que el barco est¨¢ certificado para la navegaci¨®n y cumple la legislaci¨®n nacional¡±.
El mismo procedimiento se ha repetido durante junio y julio con otros barcos, como el Ocean Viking, de SOS Mediterran¨¦e o el Alan Kurdi, de la alemana Sea Eye. Las organizaciones sospechan que el Ejecutivo transalpino recurre a este mecanismo con la intenci¨®n de dejar fuera de juego a los barcos humanitarios para impedir que realicen nuevos rescates, dif¨ªciles de gestionar en tiempos de covid-19. ¡°A pesar de todos los esfuerzos de la UE por obstaculizarnos y de su pol¨ªtica racista de preferir dejar que la gente se ahogue antes que permitirles llegar a las costas europeas, no dejaremos de rescatar¡±, dice Philipp Hahn, jefe de misi¨®n del Sea-Watch 4.
La situaci¨®n coincide con un incremento de las salidas de las costas de ?frica. Seg¨²n los datos del Ministerio de Interior italiano, desde inicio del a?o han llegado a Italia casi 15.000 personas a trav¨¦s del mar ¡ªun tercio en los ¨²ltimos dos meses¡ª frente a las 4.100 que llegaron en el mismo periodo del a?o pasado. En concreto, se han disparado las llegadas desde T¨²nez. Hasta este martes arribaron al pa¨ªs transalpino 6.100 migrantes de nacionalidad tunecina, frente a los 2.600 de todo el a?o 2019.
A finales de julio, en apenas dos semanas llegaron a Lampedusa 6.000 personas, tantas como habitantes tiene la isla, en cerca de 250 barcazas que desembarcaron de manera aut¨®noma. Las cifras est¨¢n muy lejos de las que se alcanzaron en 2011, a?o de la Primavera ?rabe en el que en pocos meses llegaron a Lampedusa cerca de 15.000 personas procedentes de T¨²nez y Libia. Pero han bastado para colapsar el sistema de acogida de esta localidad tur¨ªstica, la m¨¢s meridional del pa¨ªs. El centro de primera acogida de la isla, que cuenta con unas 190 camas, qued¨® desbordado.
El alcalde, Salvatore Martello, lleg¨® a pedir al Gobierno nacional que declarara el estado de emergencia en la localidad. ¡°Nadie se esperaba tantos desembarcos en tan poco tiempo¡±, se?ala y lamenta ¡°el da?o a la imagen¡± que ha causado la situaci¨®n, que ha vuelto a colocar a la isla, a su pesar, en el centro del debate pol¨ªtico y migratorio.
Muchos de los migrantes fueron trasladados d¨ªas despu¨¦s a otras localidades y a los ferri de pasajeros que el Gobierno ha dispuesto para que los migrantes que desembarquen en Italia pasen las dos semanas de cuarentena obligatoria.
Esta semana Italia ha vuelto a poner en marcha su sistema de vuelos de repatriaci¨®n con T¨²nez, suspendido desde marzo. ¡°Los migrantes econ¨®micos deben saber que no hay ninguna posibilidad de regularizaci¨®n para quien haya llegado a Italia despu¨¦s del 8 de marzo de 2020¡±, ha se?alado la ministra de Interior, Luciana Lamorgese.
Tambi¨¦n han aumentado las devoluciones en caliente a Libia, un pa¨ªs considerado no seguro por Naciones Unidas, sumido en una guerra civil y en el que se han constatado todo tipo de violencia y torturas en los campos de retenci¨®n de migrantes. Seg¨²n la Organizaci¨®n Internacional para las Migraciones, este a?o se han interceptado en el mar y devuelto al pa¨ªs norteafricano a casi 7.000 personas. ¡°La mayor parte de estos migrantes termina detenido. Urge que la UE act¨²e para acabar con estas repatriaciones¡±, ha se?alado la organizaci¨®n.
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