La muerte de un hombre en custodia policial indigna a B¨¦lgica
Un v¨ªdeo muestra los excesos del arresto de Jozef Chovanec en 2018, quien entr¨® en coma y falleci¨® tras su detenci¨®n
El fantasma de una violencia policial desproporcionada recorre B¨¦lgica. La investigaci¨®n judicial sobre la muerte en el aeropuerto de Charleroi del pasajero eslovaco Jozef Chovanec, de 38 a?os, est¨¢ en curso desde su muerte el 23 de febrero de 2018. Pero la publicaci¨®n de un v¨ªdeo por parte del diario flamenco Het Laatste Nieuws amenaza con poner en apuros a los agentes que le custodiaron.
Chovanec fue arrestado por provocar un altercado antes de subir a un avi¨®n. Una vez encerrado, las c¨¢maras de seguridad lo muestran fuera de s¨ª, golpe¨¢ndose la cabeza contra una pared hasta cubrir su rostro de sangre. Un grupo de polic¨ªas entra entonces en escena. Uno de los agentes se sienta sobre el hombre 18 minutos, mientras que a su alrededor, otro aparece ri¨¦ndose, y una oficial hace el saludo nazi.
La autopsia se?al¨® que Chovanec sufri¨® un paro cardiaco durante su detenci¨®n y tras entrar en coma falleci¨® al d¨ªa siguiente. Los an¨¢lisis no mostraron que hubiera consumido alcohol y drogas, y se desconoce qu¨¦ desencaden¨® su alteraci¨®n, pero se investiga si la actuaci¨®n de los agentes tuvo algo que ver en el deceso, en lo que algunos comparan con lo sucedido recientemente en el caso del afroamericano George Floyd. Las im¨¢genes de las malas pr¨¢cticas de los polic¨ªas han indignado a la clase pol¨ªtica belga. Y la agente que alz¨® el brazo ha sido apartada del trabajo de cara al p¨²blico.
Se trata de la tercera muerte en pocos meses vinculada a la polic¨ªa belga. En abril, un joven de 19 a?os falleci¨® durante una persecuci¨®n policial en Anderlecht al chocar con un coche patrulla, lo que desencaden¨® una oleada de disturbios con graves incidentes y decenas de detenidos. Tambi¨¦n ese mes, un veh¨ªculo de la polic¨ªa atropell¨® a Mehdi, de 17 a?os, cerca de la Estaci¨®n Central de Bruselas. La investigaci¨®n determin¨® que circulaba sin la sirena activada a 98 kil¨®metros por hora.
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