Activistas del Rif alzan su voz en las c¨¢rceles de Marruecos

Ahmed Zafzafi, jubilado rife?o de 77 a?os, ten¨ªa listo en su casa de Alhucemas un sudario de cinco metros y medio de tela blanca para envolver el cad¨¢ver de su hijo Nasser Zafzafi, de 40 a?os. Y otro para amortajar a Nabil Ahamjik, compa?ero de huelga de hambre de su hijo. Ambos se encuentran en la c¨¢rcel de Fez. Ahmed contaba los d¨ªas que llevan ambos sin comer: 21 cumplieron el jueves, cuando este diario contact¨® con el padre del preso. Y, 25 d¨ªas este lunes, cuando, a media tarde, el padre reconoc¨ªa sentirse muy mal: ¡°Los lunes es cuando hablamos con Nasser. Pero hoy no he podido contactar con mi hijo. No s¨¦ si se lo han llevado a un hospital fuera de la c¨¢rcel o s¨ª ha muerto¡±. Horas despu¨¦s, Ahmed Zafzafi, se enter¨® de que su hijo y sus compa?eros hab¨ªan desconvocado la huelga. ¡°Ped¨ªan que los reagrupen en la c¨¢rcel de Selu¨¢n, en Nador, que est¨¢ a solo hora y media de Alhucemas. Y, al parecer, les han prometido que lo har¨¢n¡±, se?al¨® m¨¢s tarde Ahmed Zafzafi.

Los siete presos rife?os que han puesto fin a la huelga de hambre est¨¢n condenados a entre 15 y 20 a?os. A los dos de Fez, Zafzafi y Ahamjik, se sumaron tres en Guercif y dos en Nador.

Las protestas del Rif, iniciadas a finales de 2016, fueron aplastadas en 2017. Cientos de activistas fueron encarcelados y otros tantos j¨®venes rife?os optaron por emigrar a Europa. Pero la herida continu¨® abierta. El rey Mohamed VI ha ido concediendo desde julio de 2017 cuatro oleadas de indultos a los presos del Rif, que llegaron a sumar m¨¢s de medio millar en las c¨¢rceles marroqu¨ªes. El ¨²ltimo de ellos lo otorg¨® el pasado 29 de julio, con motivo de la Fiesta del Trono, que conmemora su llegada a la jefatura de Estado en 1999. Ese d¨ªa, 22 activistas recuperaron la libertad. Pero a¨²n quedaron otros 23 encarcelados. Estos son los que sufrieron las condenas m¨¢s duras; entre ellos se encuentra Nasser Zafzafi y seis presos con penas de hasta 20 a?os de c¨¢rcel.

¡°Mi hijo¡±, indic¨® Ahmed Zafzafi a este diario el jueves, ¡°prefiere morir antes que salir de la c¨¢rcel como un cobarde. Nasser y el resto de los seis compa?eros piden que los reagrupen en la c¨¢rcel de Nador. Y tambi¨¦n piden que los pongan en libertad, porque no han cometido ning¨²n crimen. Pero para que los indulten las autoridades marroqu¨ªes ellos tienen que pedir perd¨®n antes y asumir que son culpables. ?Culpable de qu¨¦? ?De las torturas que ha sufrido mi hijo? ?De haber estado 15 meses aislado en una celda de la c¨¢rcel de Casablanca?¡±.

Mohamed Majjaoui, de 49 a?os, fue uno de los 22 activistas rife?os indultados por el rey Mohamed VI el 29 de julio. Majjaoui hab¨ªa sido condenado a cinco a?os, de los cuales pas¨® en prisi¨®n tres a?os, dos meses y dos d¨ªas. Se encontraba en una c¨¢rcel de T¨¢nger junto a otros 14 presos del Hirak y fueron indultados todos menos uno: Mohamed Yelul.

¡°En T¨¢nger se ha quedado solo nuestro compa?ero Mohamed Yelul. Cuando hablo con su madre¡­ qu¨¦ pena. Durante tres a?os y tres meses, ella ven¨ªa y volv¨ªa junto al resto de mujeres que nos visitaba. Ahora tendr¨¢ que ir sola a T¨¢nger. Me dijo: ¡®no tengo las piernas para irme a T¨¢nger sola otra vez¡±, se?ala Majjaoui.

Las protestas del Rif surgieron en noviembre de 2016, tras la muerte del vendedor ambulante Mouhcine Fikri, quien falleci¨® triturado dentro de un cami¨®n de la basura cuando intent¨® recuperar la mercanc¨ªa que le acaba de confiscar la polic¨ªa. Aquella muerte abri¨® viejas heridas en Alhucemas, el municipio de 60.000 habitantes que se convirti¨® en el coraz¨®n de las protestas rife?as.

Cientos de j¨®venes comenzaron a reclamar mejores condiciones de vida. En las protestas naci¨® un l¨ªder que no ten¨ªa ni estudios universitarios ni experiencia pol¨ªtica, pero cuando cog¨ªa el micr¨®fono arrancaba los aplausos m¨¢s fuertes. En mayo de 2017 Zafzafi fue detenido. Y detr¨¢s de ¨¦l acabaron en la c¨¢rcel otros cientos. Varios presos, como Zafzafi, fueron condenados a 20 a?os por atentar contra ¡°la seguridad interior del Estado¡±. Desde entonces ha iniciado al menos cinco huelgas de hambre.

Apoyo en Alhucemas

Mohamed Majjaoui dice que conoce a cada uno de los 23 que a¨²n quedan en la c¨¢rcel. ¡°Todos ellos merecen la libertad. De momento es preciso que los acerquen a Alhucemas. Sabemos que en la c¨¢rcel de Nador hay sitio, porque tenemos all¨ª a dos chavales de nuestro grupo. Eran cr¨ªos cuando los detuvieron. Uno ten¨ªa 18 a?os y el otro 19. Y han sido condenados a 10 y 15 a?os. Entre los siete que fueron condenados a 20 a?os la mayor¨ªa son chavales de 19 a?os. ?Qu¨¦ cosa tan grave han hecho para merecer 20 a?os de condena? Uno que est¨¢ en Alhucemas se llama Hassan Barba y es un cr¨ªo, apenas pesa 55 kilos¡±.

Despu¨¦s de tres a?os, dos meses y dos d¨ªas en la c¨¢rcel, Mohamed Majjaoui dice que encuentra Alhucemas casi igual que antes. ¡°Se han hecho algunas mejoras de infraestructura. Pero lo que necesita esta ciudad es trabajo y eso est¨¢ igual que siempre, no se ha hecho nada. Y muchos de ellos se han ido. El que pudo cruz¨® hacia Espa?a. Y otros se han ido a ciudades como Tetu¨¢n o T¨¢nger¡±.

Majjaoui asegura que, a pesar de la pandemia, ha notado el apoyo de la gente en Alhucemas. ¡°Est¨¢ todo el mundo con nosotros, con los presos del Hirak. Todos. Podr¨ªa llamar a todas las puertas de una en una. Desde los ni?os, la gente de cinco o seis a?os, que vienen para abrazarte. Todos han cre¨ªdo en un futuro mejor que los pod¨ªa llevar el Hirak. Han cre¨ªdo en nosotros. La reconciliaci¨®n entre el Estado y esta zona tiene que llegar despu¨¦s de la libertad de nuestros presos pol¨ªticos. Que sintamos que ya estamos hablando en el buen camino¡±.

Khadija Ryadi, activista fundadora de la Asociaci¨®n Marroqu¨ª de Derechos Humanos (AMDH), cree que las autoridades practican una ¡°pol¨ªtica de venganza¡±. ¡°Los presos pol¨ªticos del Rif han demostrado un alto nivel de resiliencia. El poder quiere degradarlos y romper su resistencia. Nosotros, como AMDH, reivindicamos la liberaci¨®n inmediata sin condiciones de los detenidos del Hirak del Rif y de todos los detenidos de opini¨®n en Marruecos¡±, concluye.