Costa Rica busca ox¨ªgeno econ¨®mico en sus pol¨ªticas ambientalistas

¡°La descarbonizaci¨®n es una gran oportunidad, m¨¢s que una responsabilidad con las pr¨®ximas generaciones. Es la manera de entrar competitivamente en el siglo XXI; nadie puede querer competir en estos tiempos usando las m¨¢quinas de fax¡±. Lo dec¨ªa el martes pasado Christiana Figueres Olsen, una de las mayores voces mundiales contra el cambio clim¨¢tico, en las monta?as de su pa¨ªs Costa Rica, durante la inauguraci¨®n del museo en honor de su padre, Jos¨¦ Figueres Ferrer, ejecutor de la abolici¨®n del Ej¨¦rcito de este pa¨ªs centroamericano hace 72 a?os.

Costa Rica, que ha calculado que aquella decisi¨®n hist¨®rica de Figueres en 1948 adicion¨® un punto al crecimiento anual promedio de la econom¨ªa en la segunda mitad del siglo XX, intenta ahora poner en valor financiero actual y futuro otro de sus rasgos identitarios: el ambientalismo.

Lo ve, como indica Christiana Figueres, como un camino certero para afrontar el bache al que la covid-19 ha empujado a la econom¨ªa, con un golpe especialmente duro a su ic¨®nica industria tur¨ªstica. ¡°Ser¨ªa un crimen desaprovechar esa ventaja que ya llevamos como pa¨ªs. Hemos pensado que descarbonizar es algo costoso, pero no, es una inversi¨®n que da utilidades a corto, mediano y largo plazo, que crea empleos y ayuda a la econom¨ªa a crecer¡±, dijo a EL PA?S Figueres, consciente de que las autoridades de su pa¨ªs comulgan con ella.

As¨ª se plantea el Gobierno costarricense ante un terreno complicado con unas finanzas p¨²blicas que pasan su peor d¨¦ficit en 40 a?os y un endeudamiento que superar¨ªa el 70% del PIB al acabar este diciembre, adem¨¢s de un desempleo que se duplic¨® en el ¨²ltimo a?o y una pobreza que subi¨® a 26%.

Es variada la cartera de opciones ligadas a las pol¨ªticas ambientales en la mira del pa¨ªs que ha debido dejar en m¨ªnimo su motor del ecoturismo en este 2020. En los planes de acci¨®n est¨¢ la atracci¨®n de fondos internacionales por los ¡°servicios forestales¡± de los bosques conservados y ofrecerse como un destino de inversiones que ayuda a las grandes empresas a cumplir sus metas de sostenibilidad y satisfacer las exigencias de los consumidores.

Adem¨¢s, la puesta en camino de un ¡°plan de descarbonizaci¨®n¡± anunciado por el Gobierno de Carlos Alvarado en febrero de 2019 para las pr¨®ximas tres d¨¦cadas y que ahora, con la publicaci¨®n de un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), va m¨¢s all¨¢ de las rom¨¢nticas metas ambientales para ofrecer n¨²meros tentadores: generar¨ªa r¨¦ditos para el 2050 por $41.000 millones (62% del PIB actual), seg¨²n los c¨¢lculos hechos por los especialistas.

El estudio se divulg¨® este mes, d¨ªas despu¨¦s de que el Ministerio de Ambiente y Energ¨ªa celebr¨® el otorgamiento de $54 millones no reembolsables del Fondo Verde para el Clima (una unidad en el marco de Naciones Unidas) como ¡°pago por resultados¡± por la reducci¨®n de emisiones de efecto invernadero debido a la deforestaci¨®n evitada entre los a?os 2014 y 2015; es decir, por preservar bosques. Los recursos llegan en un momento cr¨ªtico, pues los aprietos fiscales y pol¨ªticos dejaron a esa cartera con una fuerte reducci¨®n del dinero que utiliza para los programas de conservaci¨®n de bosques en fincas privadas y para la prevenci¨®n de incendios forestales en 2021.

En paralelo, el Ministerio de Comercio Exterior est¨¢ decidido a cazar los flujos de inversi¨®n con el se?uelo de la matriz de energ¨ªa renovable (m¨¢s de 98% de la generaci¨®n propia proviene de fuentes limpias) y otros factores de sostenibilidad que pueden facilitar a las grandes empresas los objetivos de reducci¨®n de la huella de carbono impuestos por las tendencias del consumo global, dijo a El PA?S el nuevo ministro de la cartera, Andr¨¦s Valenciano. ¡°La pandemia es una oportunidad para girar a modelos de producci¨®n m¨¢s sostenibles y sabemos que estos pueden ayudar a la reactivaci¨®n de la econom¨ªa. Tenemos una ventana de oportunidad grande por ser un pa¨ªs verde¡±, afirm¨®.

Lo de ¡°pa¨ªs verde¡± tiene sus excepciones. La precariedad del transporte p¨²blico y la abundancia de movilidad en veh¨ªculo privado, as¨ª como el uso del suelo en las ¨²ltimas d¨¦cadas son dos de las tareas pendientes del modelo sostenible que Costa Rica ha logrado posicionar. Estas, sin embargo, son las dos ¨¢reas que m¨¢s rentabilidad generar¨ªan si se materializan las propuestas del ¡°plan de descarbonizaci¨®n¡± del presidente Alvarado. Con metas como electrificar la flota p¨²blica y privada, desarrollar un tren metropolitano, reordenar las rutas de autobuses se obtendr¨ªan $19.000 millones netos bajo los supuestos del estudio del BID, mientras las mejoras en el manejo de suelos (agricultura, ganader¨ªa, bosques, protecci¨®n de r¨ªos) podr¨ªan deparar $22.000 millones en los pr¨®ximos 30 a?os.

¡°En este momento de necesidad de reactivaci¨®n econ¨®mica hay que ver las orientaciones de las grandes econom¨ªas. Nosotros siendo tan peque?os tenemos la ventaja del trabajo hecho por d¨¦cadas y la imagen que tenemos ante el mundo, pero hay que acelerar las decisiones, enviar las se?ales correctas e incentivar ciertas actividades porque otros pa¨ªses nos pueden ¡®robar el mandado¡¯ (ganar la ventaja)¡±, dijo la ministra de Ambiente, Andrea Meza, en probable alusi¨®n a pa¨ªses como Chile, Uruguay y Colombia, o Nueva Zelanda m¨¢s all¨¢.

Meza dice que espera en semanas pr¨®ximas se ratifique otro paquete de ayudas con recursos no reembolsables. Sostiene que tambi¨¦n otros organismos financieros han incorporado ese factor en sus decisiones de colocaci¨®n de fondos, como el pr¨¦stamo blando por $380 millones aprobado por el BID y la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD) en mayo para las tareas de descarbonizaci¨®n de Costa Rica.

Consultado el ministro de Hacienda, Elian Villegas, con un enfoque m¨¢s monetario que ambiental, reconoce que la recuperaci¨®n econ¨®mica recae sobre medidas mayoritariamente tradicionales, pero no duda de que la consideraci¨®n ambiental es un potenciador y ser¨¢ determinante en el futuro cercano. ¡°No por casualidad vemos esa tendencia en las grandes empresas del mundo, cada vez m¨¢s entienden que no hay otro camino que el de la sostenibilidad ambiental¡±, advirti¨®.

El pa¨ªs enfrenta a¨²n una discusi¨®n interna. Ciertos sectores empresariales y pol¨ªticos abogan todav¨ªa por la explotaci¨®n de recursos naturales e incluso por la exploraci¨®n de posibles yacimientos de petr¨®leo, lo que ser¨ªa como invertir en telefon¨ªa de cables en estos tiempos, compara Christiana Figueres. ¡°Esa es una industria a la que se le est¨¢ poniendo en sol, los grandes entes financieros est¨¢n quitando los recursos de ah¨ª¡±, sostiene.

Hay, sin embargo, una inclinaci¨®n mayoritaria a las pr¨¢cticas ambientalistas, como se demostr¨® en un reciente intento del Congreso por habilitar m¨¦todos de pesca destructivos del fondo marino, proyecto que fue vetado en octubre por el presidente Alvarado en medio de un fuerte rechazo de distintos sectores. ¡°Hay que entender que es un momento de transici¨®n, estamos ante la ca¨ªda de un imperio hacia nuevas econom¨ªas y eso abre oportunidades ante las que tenemos fortalezas para generar empleos, como lo hemos demostrado con el ecoturismo, con la energ¨ªas renovables y otras actividades que ahora adquieren un peso distinto en la econom¨ªa global¡±.