La protesta contra la reforma de las pensiones en Francia da s¨ªntomas de erosi¨®n
Nueva jornada de manifestaciones en Francia mientras el Gobierno negocia con los sindicatos moderados
La oposici¨®n frontal a la reforma de las pensiones de Emmanuel Macron se erosiona levemente, aunque resiste y est¨¢ lejos de plegar velas. Tras la cuarta jornada de manifestaciones nacionales en poco m¨¢s de un mes, ayer, se prepara la quinta para ma?ana. El Gobierno franc¨¦s conf¨ªa en que la p¨¦rdida paulatina de apoyos a la protesta, la divisi¨®n de los sindicatos, la concesiones en la negociaci¨®n y la pol¨ªtica de los hechos consumados le permitan imponer una reforma central en el programa del presidente de la Rep¨²blica.
Las m¨¢s de 200 manifestaciones convocadas ayer en toda Francia sirvieron para medir la capacidad de resistencia de un movimiento que, pese a la erosi¨®n del tiempo y a su car¨¢cter num¨¦ricamente minoritario, goza a¨²n de una amplia simpat¨ªa popular. Tambi¨¦n mantiene la capacidad para perturbar la vida cotidiana de los franceses que viven en ¨¢reas metropolitanas como la de Par¨ªs y dependen del metro o el tren de cercan¨ªas para desplazarse al trabajo.
Las cifras oficiales reflejan un descenso de participantes en la manifestaci¨®n de ayer respecto de la anterior, el 17 de diciembre. Ese d¨ªa salieron a la calle, en todo Francia, 615.000 manifestantes, seg¨²n el Ministerio del Interior. En la jornada de ayer fueron 452.000. Las cifras que da el sindicato CGT suelen multiplicar por dos o por tres la oficial, pero es significativo que, respecto a la marcha en Par¨ªs, la cifra oficial coincida ¡ªincluso es superior¡ª a la del centro independiente Occurrence: 56.000 el primero; 44.000 el segundo.
M¨¢s all¨¢ de la batalla de cifras, la tendencia se?ala una bajada lenta del poder de convocatoria sindical, pero insuficiente en todo caso para desinflar el movimiento. Al mismo tiempo, la tendencia descendente indica las dificultades de la protesta para sumar nuevos apoyos y transformarse en un movimiento masivo. Macron y su primer ministro, ?douard Philippe, creen que esto les concede una ventaja clara respecto a las huelgas de 1995, que acabaron forzando al Gobierno a una retirada de una reforma similar.
Un 47% de franceses tiene una opini¨®n positiva del movimiento antirreforma y un 35%, negativa, seg¨²n un sondeo del instituto Ifop. El apoyo es considerable, pero inferior al de otras movilizaciones similares del pasado, como la de 1995 o la de 2010.
Los sindicatos est¨¢n divididos. En las manifestaciones no particip¨® el reformista CFDT, el primero de Francia. Al contrario que la CGT, principal organizaci¨®n contraria a la reforma, la CFDT no pide la retirada completa de la reforma. Apoya la idea b¨¢sica ¡ªfusionar en uno solo los 42 reg¨ªmenes de pensiones actuales e instaurar un nuevo sistema de c¨¢lculo¡ª pero discrepa de otro punto clave: los 64 a?os como edad para cobrar la jubilaci¨®n plena (la edad legal de retiro es ahora de 62 a?os).
El Gobierno ha hecho varias concesiones que permitir¨¢n a algunos sectores profesionales largos periodos de transici¨®n hacia el nuevo sistema, pero el punto donde todo encalla son los 64 a?os. A iniciativa de la CFDT, el Gobierno ha convocado para hoy una reuni¨®n con vistas a la celebraci¨®n de una conferencia sobre la financiaci¨®n de las pensiones. Esto permitir¨ªa desgajar, como desea la CFDT, las dos patas de la reforma. Por un lado, el cambio sist¨¦mico de 42 reg¨ªmenes a uno. Por el otro, la b¨²squeda del equilibrio financiero que obligar¨ªa a prolongar la edad de jubilaci¨®n, a aumentar las cotizaciones o a rebajar las pensiones.
Un acuerdo del primer ministro Philippe, con el l¨ªder de la CFDT, Laurent Berger, dejar¨ªa sin responder a la exigencia de la CGT y los sindicatos que quieren la retirada del proyecto, pero permit¨ªa desatascar el pulso. El Consejo de Ministros prev¨¦ examinar la ley el 24 de enero y presentarla a la Asamblea Nacional a partir del 17 de febrero para que se apruebe definitivamente antes del verano.
36 d¨ªas de huelga en el transporte
La movilizaci¨®n discurre en un doble carril. Por un lado, las jornadas de manifestaci¨®n: la pr¨®xima cae ma?ana en s¨¢bado, con lo que la cifra de participantes podr¨ªa aumentar. El otro carril es el de la huelga permanente e indefinida de transportes, que ha afectado sobre todo a la capital y su regi¨®n, y ya dura 36 d¨ªas: se ha mantenido desde el d¨ªa inicial de la protesta, el 5 de diciembre, aunque el seguimiento ha bajado desde entonces.
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