Alberto Fern¨¢ndez nombra a Mart¨ªn Soria, un pol¨ªtico cercano a Cristina Kirchner, como ministro de Justicia
El presidente de Argentina atraviesa una crisis de popularidad
Alberto Fern¨¢ndez es presidente de Argentina porque Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner le uni¨® a su candidatura. De ese hecho sigue emanando la sospecha de que es la vicepresidenta quien en realidad controla el poder. El relevo al frente del Ministerio de Justicia, con la renuncia ¡°por agobio¡± de la albertista Marcela Losardo y el nombramiento del cristinista Mart¨ªn Soria, puede interpretarse como una confirmaci¨®n de esa hegemon¨ªa. El cambio en uno de los cargos m¨¢s relevantes del Gobierno, por las causas judiciales contra la vicepresidenta, coincide con una seria crisis de popularidad de Alberto Fern¨¢ndez.
El presidente argentino se aline¨® el 1 de marzo, en su discurso de apertura del a?o parlamentario, con las tesis de la vicepresidenta: carg¨® contra la eficacia y honestidad de la judicatura y acus¨® a los tribunales de hacer pol¨ªtica opositora. En algunos pasajes result¨® algo incoherente. ¡°Que nunca m¨¢s haya una justicia que persiga los vientos pol¨ªticos de turno¡±, proclam¨®, para acto seguido anunciar una querella contra Mauricio Macri por endeudar al pa¨ªs. La imagen de Alberto Fern¨¢ndez hab¨ªa sufrido el impacto de las ¡°vacunaciones VIP¡±, un esc¨¢ndalo que demostr¨® la existencia de privilegios. A finales de febrero su popularidad cay¨® al 30%, desde el 64% de un a?o antes.
Tras el aparente desplazamiento desde el centrismo hacia el kirchnerismo que reflej¨® el discurso presidencial, la ministra de Justicia, Marcela Losardo, le anunci¨® a su viejo amigo Alberto Fern¨¢ndez que se sent¨ªa ¡°agobiada y cansada¡± y quer¨ªa renunciar. Losardo, cuyo equipo de colaboradores le hab¨ªa sido impuesto y respond¨ªa directamente a la vicepresidenta, no deseaba una guerra con los tribunales.
Mart¨ªn Soria, el nuevo ministro, se muestra mucho m¨¢s belicoso. Suele hablar de ¡°Comodoro Pro¡±, por el nombre del partido pol¨ªtico del expresidente Mauricio Macri, para referirse a Comodoro Py, la avenida bonaerense donde se encuentran los tribunales federales. Este martes, en sus primeras declaraciones tras el nombramiento, dijo sentirse ¡°preocupado¡± por la actuaci¨®n de la Corte Suprema y se fij¨® como objetivo ¡°terminar con el lawfare¡± (ataques pol¨ªticos mediante procedimientos legales) que, seg¨²n ¨¦l, sufr¨ªa Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner.
Soria explic¨® que ¡°en ninguno de los proyectos [de reforma judicial] presentados hasta ahora existe la m¨¢s m¨ªnima posibilidad de cambiar jueces; adem¨¢s, conociendo a la vicepresidenta, es lo que menos querr¨ªa. Ella, que no tuvo nada que ver, que es inocente, que fue acusada medi¨¢tica, judicial y pol¨ªticamente porque eso es el lawfare, quiere que sea la misma justicia la que la libere de culpa y cargo, que es lo que corresponde cuando uno no hizo nada¡±. Algunas de las ocho grandes causas contra Cristina Fern¨¢ndez parecen ciertamente montajes judiciales. Otras, relacionadas con la formidable acumulaci¨®n de riqueza por parte de la familia Kirchner, sostienen acusaciones m¨¢s s¨®lidas.
Los 10 largos d¨ªas durante los que Alberto Fern¨¢ndez busc¨® un nuevo ministro de Justicia (para acabar eligiendo, seg¨²n reconoci¨® el lunes, al primer candidato) fueron interpretados por la oposici¨®n y por una parte del oficialismo como una muestra de la indecisi¨®n presidencial. Un asesor muy relacionado con la coalici¨®n gubernamental opin¨® que la presunta indecisi¨®n reflejaba en realidad la falta de base electoral del presidente, obligado a apoyarse en la vicepresidenta (cuya base de fieles es gran¨ªtica) en los momentos dif¨ªciles.
El nombramiento de Soria fue inmediatamente jaleado por el entorno de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner. ¡°Es un excelente nombre, una gran elecci¨®n¡±, dijo Graciana Pe?afort, directora de Asuntos Jur¨ªdicos en el Senado y una de las abogadas de confianza de la vicepresidenta.
Mart¨ªn Soria, de 45 a?os, abogado, fallido aspirante a la gobernaci¨®n de R¨ªo Negro y actual diputado por esa provincia, no siempre fue cercano a Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner. La aproximaci¨®n es cosa de los ¨²ltimos tiempos, en especial desde su incorporaci¨®n a la C¨¢mara de Diputados y su ingreso en la Comisi¨®n de Justicia. Durante el debate sobre la jubilaci¨®n de los jueces que se negaban a abandonar el cargo pese a tener ya la edad, pronunci¨® palabras muy duras: ¡°Hay un Poder Judicial rancio, corrupto y sin independencia¡±, dijo.
El padre del nuevo ministro, Carlos Soria, que fue gobernador de R¨ªo Negro y jefe de los servicios de espionaje en 2002, cuando la hoy vicepresidenta era senadora y su marido, N¨¦stor Kirchner, maduraba su campa?a presidencial, sufri¨® duros ataques por parte de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner. Carlos Soria muri¨® durante la fiesta de a?o nuevo de 2012: su esposa le mat¨® de un disparo en la cara.
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