China blinda sus sectores estrat¨¦gicos al capital europeo
El acuerdo de inversiones entre Bruselas y Pek¨ªn mejora el acceso para empresas de la UE pero impone duras restricciones en medios de comunicaci¨®n, energ¨ªa y tecnolog¨ªa
China ha accedido a levantar la barrera unos cent¨ªmetros m¨¢s a la inversi¨®n europea, aunque sigue restringiendo el paso de las empresas en actividades vinculadas a las finanzas, la tecnolog¨ªa o el transporte a¨¦reo. El acuerdo de inversiones entre ambos bloques, cuyos anexos han sido publicados recientemente por la Comisi¨®n Europea, pr¨¢cticamente veta la participaci...
China ha accedido a levantar la barrera unos cent¨ªmetros m¨¢s a la inversi¨®n europea, aunque sigue restringiendo el paso de las empresas en actividades vinculadas a las finanzas, la tecnolog¨ªa o el transporte a¨¦reo. El acuerdo de inversiones entre ambos bloques, cuyos anexos han sido publicados recientemente por la Comisi¨®n Europea, pr¨¢cticamente veta la participaci¨®n europea en medios de comunicaci¨®n, arte y cultura de China, cuya larga mano es vista por Bruselas como la responsable de buena parte de los bulos y desinformaciones sobre la covid-19 que circulan por las redes sociales.
El acuerdo de inversiones entre la UE y China, firmado el pasado mes de diciembre, empieza a enfilar un duro debate en la Euroc¨¢mara tras la publicaci¨®n de sus anexos. El pacto ha recibido las cr¨ªticas de diputados de casi todo el espectro parlamentario, que exigen que Pek¨ªn cese su represi¨®n sobre la minor¨ªa uigur o en Hong Kong antes de sellar cualquier arreglo econ¨®mico. El texto, que se cerr¨® con la luz verde de las capitales, tambi¨¦n gener¨® malestar en el equipo de Joe Biden. El presidente de Estados Unidos quer¨ªa abordar las males artes comerciales de China de forma conjunta con la UE.
Bruselas defiende su decisi¨®n al considerar que ha atado el acuerdo econ¨®mico m¨¢s ambicioso jam¨¢s firmado por China, a la que tambi¨¦n le urg¨ªa contar con el favor de Europa tras constatar que las fricciones con Estados Unidos persistir¨ªan pese a la salida de Donald Trump de la Casa Blanca. La UE ha logrado compromisos que llevaba tiempo persiguiendo, como frenar la transferencia tecnol¨®gica ¡ªlimitar la capacidad de las empresas chinas para copiar los hallazgos europeos¡ª y amarrar medidas de transparencia que pongan coto a la competencia desleal que suponen los gigantes empresariales que Pek¨ªn dopa con capital p¨²blico. En cambio, los analistas rebajan los logros alcanzados en la apertura de mercados para las empresas europeas, que en la ¨²ltima d¨¦cada han invertido 148.000 millones de euros en el pa¨ªs asi¨¢tico.
Los anexos del pacto recogen sectores que, en efecto, estar¨¢n abiertos para la inversi¨®n europea, como la industria de veh¨ªculos de pasajeros (a partir de 2022) la arquitectura, la ingenier¨ªa, los servicios m¨¦dicos y dentales o las telecomunicaciones. Sin embargo, China no se priva de poner condiciones: en el caso de las cl¨ªnicas, el personal deber¨¢ ser chino, y en el de las telecomunicaciones, la participaci¨®n for¨¢nea tendr¨¢ un tope del 50%. Gzegorz Stec, analista de Merics, considera que algunos de esos hitos son en realidad ¡°compromisos preexistentes¡±, ahora bien empaquetados. ¡°La apertura del mercado automotriz de China para 2022 ya fue anunciada por la Comisi¨®n Nacional de Desarrollo y Reforma [un ¨®rgano chino] en 2018. Bloquear tales compromisos en un pacto internacional aporta valor, pero tambi¨¦n plantea la cuesti¨®n de cu¨¢n grande es el avance del acuerdo en cuanto a la apertura del mercado¡±, escribe.
La Administraci¨®n de Xi Jinping impone en el documento todav¨ªa m¨¢s restricciones en actividades de investigaci¨®n y desarrollo en sectores tecnol¨®gicos vinculados a la medicina, el servicio de acceso a internet, la distribuci¨®n de tabaco, la energ¨ªa nuclear o el transporte a¨¦reo. En algunos casos, directamente impide la entrada de capital europeo en esas actividades.
Freno a las pymes
Alicia Garc¨ªa-Herrero, economista jefa para Asia de Natixis e investigadora del think tank Bruegel, destaca que el acuerdo blinda ¡°un n¨²mero enorme de sectores¡±, hasta el punto de que considera que el documento es una ¡°letan¨ªa del cannot [no se puede, en ingl¨¦s]¡±, empezando ¡°por un sector tan inocuo como las semillas¡±. ¡°Incluso para los sectores supuestamente abiertos como el transporte y los autom¨®viles hay todav¨ªa letra peque?a, limitando las condiciones y los montos m¨ªnimos que Europa puede invertir¡±, sostiene. Esas cuant¨ªas m¨ªnimas, seg¨²n Garc¨ªa-Herrero, limitan la entrada de muchas pymes en el mercado asi¨¢tico.
Pero si hay un sector especialmente blindado frente a la influencia europea es el de los medios de comunicaci¨®n. Precisamente, Pek¨ªn acaba de prohibir la emisi¨®n del servicio de noticias BBC World al considerar que sus informaciones sobre la covid-19 y el trato a la minor¨ªa uigur no cumplen los requisitos de ¡°imparcialidad¡± y ¡°veracidad¡±. Adem¨¢s, los corresponsales extranjeros en China han vuelto a denunciar el continuo ¡°deterioro¡± de la libertad de prensa en el pa¨ªs, que el a?o pasado expuls¨® a 18 periodistas.
El acuerdo recoge que, por regla general, los inversores extranjeros no podr¨¢n destinar su dinero a servicios de noticias, incluidos peri¨®dicos, emisoras de radio y televisiones, salvo que se trate de negocios muy concretos que se desarrollen en cooperaci¨®n con instituciones chinas y con la aprobaci¨®n de las autoridades. No hay excepciones, en cambio, para las empresas que se dediquen a divulgar informaci¨®n a trav¨¦s de internet. El acceso al negocio de impresi¨®n de otras publicaciones diferentes a las period¨ªsticas tampoco est¨¢ permitido sin control del Ejecutivo.
El mismo veto se extiende a la industria cultural. El capital extranjero no podr¨¢ entrar en proyectos de artes esc¨¦nicas, salvo en las denominadas zonas piloto de libre comercio, donde podr¨¢n hacerlo con el benepl¨¢cito gubernamental. Tampoco est¨¢ permitida la inversi¨®n en compa?¨ªas de producci¨®n y distribuci¨®n de pel¨ªculas cinematogr¨¢ficas, salvo con la autorizaci¨®n del Gobierno, por ejemplo, dentro del marco de una cooperaci¨®n entre varios pa¨ªses. En direcci¨®n inversa, 11 pa¨ªses ¡ªen especial del Este de Europa¡ª ponen l¨ªmites a la participaci¨®n china en medios de comunicaci¨®n, mientras que Francia exige ¡°reciprocidad¡± a Pek¨ªn para poder instalarse en el pa¨ªs.
Amago de sanciones por el trato a la minor¨ªa uigur
Se trata de un interrogante m¨¢s que se a?ade a todos los que plantea el acuerdo y que deriva del agitado momento por el que atraviesan las relaciones entre ambos bloques. Seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas, entre los Veintisiete hay consenso para aplicar a China la llamada ley Magnitsky europea e imponer sanciones a dirigentes chinos por la violaci¨®n de los derechos humanos contra la minor¨ªa uigur. Desde la consultora Eurasia creen que Pek¨ªn puede ver esas medidas como algo ¡°simb¨®lico¡±, aunque no descartan un escenario en el que el acuerdo de inversiones acabe descarrilando. De momento, el embajador chino ante la UE, Zhang Ming, advirti¨® a Bruselas por Twitter de que antes de aprobar las sanciones ¡°se lo piense dos veces¡±.
Los embajadores de la UE acordaron, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas, imponer tambi¨¦n sanciones contra 11 personas y cuatro entidades de Myanmar (la antigua Birmania), Rusia, Corea del Norte, Libia, Eritrea y Sud¨¢n del Sur. Estas ser¨¢n las primeras sanciones impuestas contra Myanmar desde el golpe de Estado del 1 de febrero, donde seg¨²n a ONU han fallecido 149 personas durante las protestas contra los militares.
Las sanciones se enmarcan dentro del nuevo mecanismo del que se dot¨® la UE en diciembre, que incluye la prohibici¨®n de viaje y la congelaci¨®n de bienes en la Uni¨®n para quienes cometan o se beneficien de violaciones de los derechos humanos, lo cual incluye genocidio, esclavitud o tr¨¢fico de personas.