El jefe de homicidios de Minneapolis critica en el juicio el ¡°innecesario¡± uso de la fuerza policial contra Floyd
El teniente Richard Zimmerman afirma que nunca ha recibido entrenamiento para colocar la rodilla en el cuello de un sospechoso esposado
Cinco d¨ªas de emociones en el juicio contra el expolic¨ªa Derek Chauvin concluyeron este viernes con el testimonio del teniente Richard Zimmerman, el m¨¢s veterano del Departamento de Polic¨ªa de Minneapolis, que rechaz¨® el uso de la fuerza por parte del exagente durante el arresto del afroamericano George Floyd, que acab¨® con su vida el pasado 25 de mayo.
¡°Arrojarlo en el suelo boca abajo y poner la rodilla en su cuello durante todo ese tiempo era simplemente innecesario¡±, asegur¨® el veterano detective, que afirm¨® que en 40 a?os de carrera nunca recibi¨® entrenamiento para una t¨¦cnica que describi¨® como letal. ¡°Si tu rodilla est¨¢ en el cuello de una persona, eso puede matarla¡±.
Citando el protocolo policial, Zimmerman, que se uni¨® al cuerpo en 1985 y dirige la unidad de homicidios, sostuvo ante el jurado que, una vez inmovilizado el detenido, su seguridad est¨¢ en manos de la polic¨ªa y hay que conseguir que se siente o se recueste de lado. ¡°Si est¨¢ acostado sobre su pecho, eso restringe su respiraci¨®n a¨²n m¨¢s¡±, afirm¨®.
Aunque reconoci¨® que un sospechoso esposado a¨²n puede pelear, aclar¨® que el grado de amenaza ¡°baja por completo¡±. ¡°Est¨¢n esposados; ?c¨®mo pueden realmente lastimarte?¡±, pregunt¨® al jurado. Zimmerman es una de las voces m¨¢s respetadas dentro de la comunidad policial de Minneapolis, la segunda ciudad m¨¢s poblada de Minnesota. Hace 10 meses lleg¨® a la hoy denominada plaza de George Floyd cuando la ambulancia ya se hab¨ªa llevado el cuerpo inconsciente del afroamericano, que estuvo desarmado y esposado durante los m¨¢s de nueve minutos que Chauvin le clav¨® la rodilla en el cuello, una t¨¦cnica permitida en el Estado en ese momento.
Chauvin, como se ha visto en las im¨¢genes que captaron las c¨¢maras que los polic¨ªas llevaban adosadas al cuerpo y que se exhibieron por primera vez el mi¨¦rcoles en el juzgado del condado de Hennepin, jurisdicci¨®n en la que se produjeron los hechos, no apart¨® la rodilla del cuello de Floyd ni siquiera cuando la ambulancia lleg¨® a la escena del crimen.
El testimonio de Zimmerman puede ser demoledor para Chauvin, acusado de asesinato en segundo y tercer grado y homicidio involuntario, y llega despu¨¦s de que David Pleoger, un sargento reci¨¦n jubilado del departamento de polic¨ªa, sostuviera que el protocolo de las fuerzas de seguridad establece que los agentes deben quitar la rodilla del cuello de un sospechoso cuando este deja de resistirse. ¡°Cuando el se?or Floyd ya no ofrec¨ªa ninguna resistencia a los agentes, estos deber¨ªan haber terminado¡± la inmovilizaci¨®n.
Pleoger llam¨® a Chauvin cuando se enter¨® de lo sucedido. El agente no le coment¨® entonces que hab¨ªa usado su rodilla para inmovilizar a Floyd ni en esa conversaci¨®n ni m¨¢s tarde, cuando se encontraron en la escena del crimen. El acusado explic¨® al sargento que Floyd hab¨ªa sufrido ¡°una emergencia m¨¦dica¡± mientras lo inmovilizaban. La noche del 25 de mayo, en el hospital donde certificaron la muerte del detenido por pagar con un billete falso de 20 d¨®lares, Chauvin se sincer¨® con Pleoger. ¡°Dijo que se arrodill¨® sobre Floyd o que se arrodill¨® sobre su cuello, algo por el estilo¡±, testific¨® el sargento, quien aclar¨® que el expolic¨ªa no le dijo cu¨¢nto tiempo hab¨ªa estado sobre el afroamericano.
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