La ultraderecha alemana celebra este fin de semana un congreso presencial en plena tercera ola de la pandemia
El partido AfD encara la campa?a dividida y sin poder beneficiarse de las horas bajas de la CDU
Unos 600 delegados del partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) se reunir¨¢n este fin de semana en la ciudad de Dresde, al este de Alemania, para celebrar un congreso presencial en plena tercera ola de la pandemia en Europa. Se podr¨ªa considerar una muestra de coherencia: la formaci¨®n ha hecho de la cr¨ªtica a las mascarillas y al resto de restricciones su caballo de batalla contra el Gobierno de Angela Merkel. El objetivo declarado del encuentro es aprobar el programa con el que la AfD concurrir¨¢ a las elecciones de septiembre, pero se prev¨¦ que la cuesti¨®n dominante sea,...
Unos 600 delegados del partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) se reunir¨¢n este fin de semana en la ciudad de Dresde, al este de Alemania, para celebrar un congreso presencial en plena tercera ola de la pandemia en Europa. Se podr¨ªa considerar una muestra de coherencia: la formaci¨®n ha hecho de la cr¨ªtica a las mascarillas y al resto de restricciones su caballo de batalla contra el Gobierno de Angela Merkel. El objetivo declarado del encuentro es aprobar el programa con el que la AfD concurrir¨¢ a las elecciones de septiembre, pero se prev¨¦ que la cuesti¨®n dominante sea, una vez m¨¢s, la divisi¨®n interna que desgarra al partido.
La corriente radical y la moderada volver¨¢n a chocar ante los delegados llegados de toda Alemania. La ¨²ltima vez que se reunieron, en noviembre pasado, saltaron chispas entre J?rg Meuthen, col¨ªder de la formaci¨®n y representante del ala moderada que pretende llegar a amplias capas de la poblaci¨®n, y los seguidores de Bj?rn H?cke, que se sit¨²a en un discurso extremista, xen¨®fobo y que roza el antisemitismo. La AfD podr¨ªa beneficiarse de los esc¨¢ndalos de corrupci¨®n de los conservadores de la CDU y de su err¨¢tica gesti¨®n de la crisis del coronavirus, se?ala en Die Zeit el analista Tilman Steffen. Pero es probable que sus esfuerzos se pierdan en las luchas por el poder dentro de la formaci¨®n, a?ade.
Las encuestas parecen indicar que la AfD no se est¨¢ aprovechando de la progresiva p¨¦rdida de popularidad del partido de Merkel. El ¨²ltimo sondeo de Forschungsgruppe Wahlen para la cadena p¨²blica ZDF mostraba que la uni¨®n de CDU y su partido-hermano b¨¢varo CSU conseguir¨ªan un 28%, los Verdes un 23%, los socialdem¨®cratas del SPD un 15% y la AfD un 12%. Comparado con el sondeo previo a la pandemia, los conservadores pierden siete puntos porcentuales y la AfD gana dos. El partido de ultraderecha todav¨ªa est¨¢ digiriendo los malos resultados que obtuvo en dos elecciones regionales celebradas en marzo. Perdi¨® m¨¢s de cinco puntos porcentuales en Baden-W¨¹rttemberg y m¨¢s de cuatro en Renania-Palatinado con respecto a los comicios de 2016.
Servicio militar y controles fronterizos
El polit¨®logo Alexander H?usler, experto en movimientos de ultraderecha, cree que las pr¨®ximas elecciones podr¨ªan ¡°marcar el final de la historia de ¨¦xito¡± del partido, que entr¨® por primera vez en el Parlamento alem¨¢n en 2017 con un 12,6% de los votos, lo que le convirti¨® en la primera fuerza de la oposici¨®n. La formaci¨®n no ha podido sacar r¨¦dito de la pandemia, pese a llevar un a?o centr¨¢ndose en la covid-19 y las restricciones por la pandemia y dejando en un segundo plano los que fueron sus temas centrales: los extranjeros, los refugiados y el islam.
La AfD se ha sumado al movimiento Querdenken de protesta contra las restricciones, que aglutina a colectivos e individuos muy dispares enfadados con el Gobierno: negacionistas, antivacunas, conspiracionistas. El movimiento est¨¢ cada vez m¨¢s radicalizado por la mayor presencia de ultraderechistas, alertaban la semana pasada las autoridades de Baden-W¨¹rttemberg. Unas 10.000 personas se manifestaron sin mascarillas ni distancia la semana pasada en Stuttgart y se produjeron agresiones a periodistas.
H?usler cree que la AfD puede intentar capitalizar el miedo a las consecuencias econ¨®micas de la crisis y situarse como ¡°una alternativa patri¨®tico-social nacionalista¡±, se?al¨® este jueves en un encuentro virtual con corresponsales extranjeros. El polit¨®logo a?adi¨® que los intentos de moderar el partido no han dado resultado y que la AfD lleva a?os en ¡°un permanente proceso de radicalizaci¨®n¡±. Estar sometido a la vigilancia de la Oficina para la Protecci¨®n de la Constituci¨®n alemana (BfV), los servicios secretos internos, ha sido la culminaci¨®n. El partido al completo, y no ya un ala radical o una secci¨®n regional, se considera sospechoso de radicalismo y de ir en contra de los valores constitucionales del pa¨ªs. La AfD va a hacer campa?a con el lema ¡°Alemania, pero normal¡±, seg¨²n la televisi¨®n p¨²blica ARD. En el borrador del programa, adelanta la cadena, incluye la vuelta al servicio militar obligatorio, la vuelta al marco alem¨¢n, a los controles fronterizos y la preservaci¨®n de la energ¨ªa nuclear y del carb¨®n.