El r¨¦gimen de Myanmar acusa de corrupci¨®n a Aung San Suu Kyi, en v¨ªsperas de su juicio

Los militares que se hicieron con el poder en Myanmar (antigua Birmania) el pasado febrero no quieren dejar ning¨²n cabo suelto en su persecuci¨®n a la l¨ªder de facto del Gobierno civil depuesto, Aung San Suu Kyi. A cuatro d¨ªas de que sea juzgada, el pr¨®ximo 14 de junio, el r¨¦gimen castrense ha presentado este jueves una nueva acusaci¨®n contra la Nobel de la Paz de 1991, esta vez por corrupci¨®n. Se trata de la s¨¦ptima y la m¨¢s grave de las imputaciones en su contra ¡ªque lleva aparejada una condena de hasta 15 a?os de c¨¢rcel¡ª de una letan¨ªa de cargos que sus abogados consideran fabricados pol¨ªticamente para apartarla del poder.

Seg¨²n un comunicado de la Comisi¨®n Anticorrupci¨®n birmana, controlada por los uniformados, Suu Kyi acept¨® de forma ilegal 600.000 d¨®lares (unos 493.000 euros) y una cantidad indeterminada de oro por parte del gobernador de Yang¨®n, la mayor ciudad del pa¨ªs. Tambi¨¦n la acusa de utilizar su autoridad para facilitar el alquiler de una propiedad en esa misma urbe a una organizaci¨®n de caridad que ella fund¨® en 2012, y que habr¨ªa supuesto p¨¦rdidas a esta municipalidad por valor de 3,15 millones de d¨®lares.

¡°La Comisi¨®n Anticorrupci¨®n ha investigado los casos de corrupci¨®n contra la exconsejera de Estado Aung San Suu Kyi. Ha sido hallada culpable de incurrir en actos de corrupci¨®n aprovech¨¢ndose de su t¨ªtulo¡±, se lee en el comunicado. Los altos cargos del Gobierno pueden enfrentarse a un m¨¢ximo de 15 a?os de prisi¨®n si son hallados culpables de este delito. Suu Kyi fue consejera de Estado de Myanmar desde 2015, cuando su partido, la Liga Nacional para la Democracia (NLD, por sus siglas en ingl¨¦s), gan¨® los comicios. Al no poder ser investida presidenta porque la Constituci¨®n ¡ªredactada por los militares en 2008¡ª proh¨ªbe que lo sea alguien con c¨®nyuge o hijos extranjeros ¡ªuna cl¨¢usula pensada contra Suu Kyi, viuda de un acad¨¦mico brit¨¢nico¡ª, se cre¨® el t¨ªtulo de consejera de Estado, bajo el que gobern¨® de hecho.

La hija del general Aung San, considerado el h¨¦roe de la independencia birmana, se encuentra detenida desde el 1 de febrero, cuando los militares dieron un golpe de Estado, alegando sin pruebas un supuesto fraude electoral en los comicios del pasado noviembre, ganados holgadamente por la NLD. Desde entonces, ha sido acusada de distintos delitos, siendo hasta ahora el m¨¢s grave el de violar la ley de Secretos Oficiales, que puede suponer un m¨¢ximo de 14 a?os de c¨¢rcel. Tambi¨¦n ha sido acusada de importar ilegalmente unos walkie-talkies y de vulnerar las normativas impuestas para frenar la propagaci¨®n de la covid-19 durante la campa?a electoral, entre otras supuestas infracciones.

Unas acusaciones que sus abogados consideran infundadas y perge?adas para apartarla de unas posibles elecciones en el futuro, que los militares prometieron convocar en los pr¨®ximos dos a?os. Khin Maung Zaw, uno de sus letrados, ha tildado los cargos de corrupci¨®n de ¡°absurdos¡± y ha denunciado que su objetivo es ¡°mantenerla fuera de la escena pol¨ªtica¡±, seg¨²n dijo a la agencia AFP.

La pol¨ªtica birmana, que pas¨® 15 a?os bajo arresto domiciliario durante el medio siglo de poder del antiguo r¨¦gimen militar (1962-2011), solo ha sido vista una vez desde su detenci¨®n, durante una vista judicial el 24 de mayo en la capital, Naypyid¨®. Aunque en principio la junta la mantuvo recluida en su vivienda en esta ciudad, la pasada semana el autonombrado Gobierno civil clandestino birmano ¡ªformado por aliados de Suu Kyi que se oponen a los militares¡ª asegur¨® que hab¨ªa sido trasladada y se hallaba en paradero desconocido.

El juicio comienza el pr¨®ximo lunes y se espera que concluya el 26 de julio. Pese a los intentos de los militares por hacerse con el poder y apartar a Suu Kyi, la pol¨ªtica sigue siendo muy aclamada por la poblaci¨®n, que ha pedido en masa su liberaci¨®n en manifestaciones multitudinarias casi diarias desde la asonada. Unas protestas aplacadas con violencia por las fuerzas de seguridad, responsables de la muerte de al menos 849 civiles y la detenci¨®n de casi 5.000 personas ¡ªentre ellas, Suu Kyi y otros miembros de su Gobierno¡ª, seg¨²n la Asociaci¨®n para la Protecci¨®n de los Presos Pol¨ªticos birmana.