La factura del divorcio del Brexit abre otro enfrentamiento entre Londres y Bruselas
El Gobierno de Johnson rechaza el c¨¢lculo de la Uni¨®n Europea, que supera en 6.000 millones de euros la cifra prevista por las autoridades brit¨¢nicas
El Brexit nunca fue un punto y final. Como no lo es ninguna sentencia de divorcio. Cuarenta a?os de uni¨®n dejan atr¨¢s un caudal de obligaciones y compromisos que no caducan, y sobre los que, a menudo, las partes discrepan y deben llegar a un acuerdo. Bruselas ha calculado la cantidad final que Londres adeuda: 47.500 millones de euros. Y Londres, que estim¨® la deuda en unos 41.400 millones, seg¨²n su Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR, en sus siglas en ingl¨¦s), no est¨¢ dispuest...
El Brexit nunca fue un punto y final. Como no lo es ninguna sentencia de divorcio. Cuarenta a?os de uni¨®n dejan atr¨¢s un caudal de obligaciones y compromisos que no caducan, y sobre los que, a menudo, las partes discrepan y deben llegar a un acuerdo. Bruselas ha calculado la cantidad final que Londres adeuda: 47.500 millones de euros. Y Londres, que estim¨® la deuda en unos 41.400 millones, seg¨²n su Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR, en sus siglas en ingl¨¦s), no est¨¢ dispuesto a aceptar esa cifra como definitiva. Junto a los derechos de los ciudadanos residentes, y la cuesti¨®n de Irlanda del Norte, la factura de la separaci¨®n fue uno de los asuntos m¨¢s espinosos durante las negociaciones del Acuerdo de Retirada. Y como los otros dos, resurge con la amenaza de enturbiar todav¨ªa m¨¢s las relaciones entre los dos bloques.
La mayor¨ªa de los compromisos pendientes corresponden a las aportaciones que el Reino Unido deb¨ªa hacer al presupuesto plurianual (7 a?os) de la UE. El refer¨¦ndum del Brexit se celebr¨® en 2016, pero las obligaciones se prolongaron hasta el 31 de enero de 2020, cuando concluy¨® el periodo de transici¨®n. Pr¨¢cticamente la mitad de los pagos, que obedec¨ªan a proyectos de infraestructura y programas sociales de la UE, se han realizado durante ese periodo de transici¨®n. Quedan, sin embargo, responsabilidades referentes al pago de pensiones o seguros sanitarios de los funcionarios comunitarios o pr¨¦stamos a terceros pa¨ªses (a Ucrania, por ejemplo) que prolongar¨¢n las obligaciones del Reino Unido hasta 2064, seg¨²n los c¨¢lculos de la propia OBR.
En 2021, el Reino Unido debe saldar una primera cuenta de 6.800 millones de euros, que fue comunicada a Londres en abril. ¡°Y no tenemos ninguna indicaci¨®n hasta ahora de que haya ninguna disputa sobre la cifra¡±, ha afirmado el portavoz oficial de la Comisi¨®n Europea. De hecho, seg¨²n esa misma fuente, el Reino Unido ha pagado en junio el primer plazo y tiene por delante otras tres entregas (en julio, agosto y septiembre). ¡°No esperamos que se plantee ning¨²n problema¡±, ha afirmado el portavoz. ¡°Hasta ahora, todo lo que deb¨ªa hacerse se ha hecho y no tenemos ninguna se?al de que las cifras vayan a ser cuestionadas¡±, ha a?adido. Informa Bernardo de Miguel.
Aunque la cifra que se ha dado a conocer no cuenta todav¨ªa con la firma final de los auditores de la UE, el Gobierno de Johnson ha emitido ya una primera respuesta en la que cuestiona la firmeza del c¨¢lculo. ¡°Se trata simplemente de una estimaci¨®n contable, y no se corresponde con la cantidad exacta que el Reino Unido tiene previsto pagar a la UE este a?o¡±, ha dicho un portavoz de Downing Street. ¡°A finales de a?o, publicaremos los detalles de los pagos y cobros que quedaron establecidos en el acuerdo financiero¡±. El Reino Unido tambi¨¦n conf¨ªa en recuperar algo de dinero. Principalmente, sus participaciones de capital en el Banco Europeo de Inversi¨®n, pero tambi¨¦n la parte proporcional correspondiente de las multas pagadas por grandes empresas, despu¨¦s de haber sido sancionadas por las autoridades comunitarias reguladoras de la competencia.
Johnson lleg¨® a prometer, durante la campa?a de primarias para el liderazgo del Partido Conservador y en pleno proceso negociador con la UE, que no pagar¨ªa la deuda pendiente si finalmente el Brexit se cerraba sin acuerdo. ¡°No es una amenaza, simplemente una realidad¡±, dijo en una entrevista a la cadena ITV en agosto de 2019. Los ¨®rdagos quedaron en nada cuando finalmente Londres y Bruselas cerraron un pacto, pero la factura pendiente fue siempre garant¨ªa segura para agitar los ¨¢nimos de los tories m¨¢s euroesc¨¦pticos, y una revisi¨®n al alza como la conocida este viernes puede plantear nuevos problemas al primer ministro brit¨¢nico.
Aunque los t¨¦rminos del acuerdo, como reconoci¨® la misma OBR, suponen mucho menos dinero de lo que hubiera supuesto al Reino Unido permanecer como miembro de la UE, el tiempo transcurrido desde la firma de la separaci¨®n ha demostrado que el Brexit no supon¨ªa la ganancia prometida por los euroesc¨¦pticos. Muchas de las ayudas y proyectos proporcionados por Bruselas, tanto por la pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n, como en fondos estructurales o ayudas a la investigaci¨®n cient¨ªfica, han tenido que ser suplidos por el presupuesto brit¨¢nico.
La fr¨¢gil situaci¨®n de Irlanda del Norte
Londres y Bruselas han convenido en los ¨²ltimos d¨ªas una tregua en torno a su disputa sobre Irlanda del Norte y la aplicaci¨®n del Protocolo sobre esa regi¨®n que ambos firmaron para salvar el Brexit. La UE ha concedido una nueva pr¨®rroga de tres meses al Gobierno de Johnson para que ponga en marcha los controles aduaneros a los que se comprometi¨®, a pesar de la resistencia interna de los principales partidos unionistas norirlandeses. El l¨ªder laborista, Keir Starmer, ha realizado una visita de tres d¨ªas al territorio brit¨¢nico, donde se ha reunido con l¨ªderes pol¨ªticos y sociales. ¡°He quedado impresionado por la fragilidad de la situaci¨®n que existe¡±, ha dicho Starmer. ¡°Esa es la palabra que todo el mundo me ha transmitido¡±. El l¨ªder de la oposici¨®n ha acusado a Johnson de haber negociado el protocolo a sabiendas de que su cumplimiento era complejo, y de haber ocultado la verdad a los ciudadanos norirlandeses. ¡°Y ahora se intenta quitar de encima la responsabilidad de su aplicaci¨®n¡±, ha acusado Starmer.