Nacionalistas y verdes alcanzan un pacto de gobierno en Escocia con la vista puesta en un refer¨¦ndum

Los partidos Nacional de Escocia (SNP) y el Verde escoc¨¦s alcanzaron este viernes un pacto de gobierno que reafirma el programa independentista de ambas formaciones y refuerza su objetivo de convocar un refer¨¦ndum sobre la relaci¨®n con el resto del Reino Unido en menos de cinco a?os. Los l¨ªderes de ambos partidos ¡ªNicola Sturgeon, dirigente y jefe del Ejecutivo nacionalista; y los co-dirigentes Lorna Slater y Patrick Harvie¡ª anunciaron su hist¨®rico pacto en Bute House, la residencia oficial de la ministra principal.

El pacto, que han de refrendar las respectivas formaciones, se queda corto como una coalici¨®n formal, pero cede a los Verdes la responsabilidad de dos carteras ministeriales. Ser¨ªa la primera ocasi¨®n que el movimiento ecologista est¨¦ representado en un gobierno del Reino Unido, tanto central como auton¨®mico. El SNP tambi¨¦n compartir¨ªa poder por primera vez en sus 14 a?os al frente del gobierno escoc¨¦s. En ese periodo ha gobernado con mayor¨ªa absoluta en la legislatura de 2011, cuando Alex Salmond estuvo al frente hasta su dimisi¨®n despu¨¦s de la victoria unionista en el refer¨¦ndum soberanista de septiembre de 2014.

Los Verdes han apoyado los gobiernos minoritarios del SNP, pero ahora entran en el Gabinete auton¨®mico. ¡°Es un nuevo enfoque en la pol¨ªtica. Somos dos partidos diferentes y conservaremos nuestras voces distintivas. No es una coalici¨®n en el sentido tradicional y trabajaremos en los puntos comunes¡±, se?al¨® Harvie, antes de reafirmar el compromiso electoral de convocar un refer¨¦ndum independentista cuando el pa¨ªs emerja de la pandemia del coronavirus.

Sturgeon, a su vez, garantiz¨® un programa de gobierno dirigido a una posible independencia y que ¡°ofrezca al electorado el derecho a decidir el futuro en un refer¨¦ndum¡±. El SNP se qued¨® corto por un esca?o de la mayor¨ªa en el Parlamento de Holyrood en las elecciones auton¨®micas del pasado mayo. Y el contrato sellado con los tambi¨¦n independentistas verdes podr¨ªa reforzar el frente del Ejecutivo de Edimburgo en la inevitable batalla con Westminster.

El primer ministro Boris Johnson rechaza autorizar la transferencia de poderes que permitir¨ªa celebrar un refer¨¦ndum consensuado y leg¨ªtimo, en t¨¦rminos similares al de 2014. El l¨ªder conservador reitera que no es el momento de enzarzar a las naciones brit¨¢nicas en una disputa constitucional durante la crisis de la Covid-19 de igual forma que su antecesora, Theresa May, justific¨® su negativa en la incertidumbre y tensi¨®n de las negociaciones del Brexit, que acabaron con su mandato.

Sturgeon ha retrasado el prometido plebiscito ¡ªel llamado IndyRef2¡ª para mediados de la presente legislatura, es decir, antes de finales de 2023. Su equipo baraja la opci¨®n de retar en los tribunales escoceses el derecho de Holyrood a preparar y gestionar la consulta separatista. En ese escenario, y sin un acuerdo de ¨²ltima hora entre Londres y Edimburgo, es muy probable que la causa concluya en el Supremo del Reino Unido.

Mientras, la ministra principal afronta el curso pol¨ªtico con sus aliados verdes en el gabinete. Ambas partes se han comprometido a respetar la disciplina colectiva y han aprobado un plan de gobierno con el foco en las ¨¢reas de transporte, vivienda y energ¨ªa renovable. El pacto incluye la voluntad de ¡°acelerar la transici¨®n¡± a cero emisiones de gases invernadero al tiempo que la cumbre del cambio clim¨¢tico COP26 tendr¨¢ lugar en Glasgow durante tres semanas a partir del 31 de octubre.

Los tres dirigentes esquivaron un evidente conflicto de intereses, que subrayaron los medios durante la conferencia de prensa en Bute House. El petr¨®leo del Mar del Norte fue un as en la campa?a del primer refer¨¦ndum independentista y Sturgeon mantiene una posici¨®n ambivalente sobre la exploraci¨®n de hidrocarburos en proyectos cuya licencia est¨¢ en suspense. Este es el caso del yacimiento de Cambo, pr¨®ximo a las islas Shetland, que sus propietarios quieren reactivar. ¡°No es una competencia del Gobierno auton¨®mico¡±, zanj¨® la col¨ªder Verde, pasando la contaminante pelota al Ejecutivo central y al primer ministro Boris Johnson.

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