La pelea entre Alberto Fern¨¢ndez y Cristina Kirchner paraliza al Gobierno argentino

La pelea abierta entre Alberto Fern¨¢ndez y Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner tiene paralizada a Argentina. Un d¨ªa despu¨¦s de la renuncia de todos los ministros y altos cargos que representan a la vicepresidenta en el Gabinete, el presidente public¨® este jueves un largo hilo en Twitter donde advierte de que es ¨¦l quien toma las decisiones. ¡°La gesti¨®n seguir¨¢ desarroll¨¢ndose como yo estime conveniente¡±, escribi¨®, y ¡°no es tiempo de plantear disputas¡±. Cristina Kirchner le record¨® m¨¢s tarde en una carta p¨²blica que fue ella quien lo postul¨® para presidente en 2019. ¡°S¨®lo le pido que honre aquella decisi¨®n¡±, le dijo.

La debacle electoral en las primarias del domingo, en la que los precandidatos del peronismo unido perdieron en 18 de los 24 distritos del pa¨ªs, termin¨® por catalizar una crisis soterrada de palacio que condiciona la marcha del Gobierno, agrava la crisis econ¨®mica, espanta a los votantes y da alas a la oposici¨®n conservadora. Cristina Kirchner exigi¨® el lunes tras la derrota cambios en el Gabinete como primera medida para recuperar al electorado perdido. La crisis escal¨® cuando el Fern¨¢ndez se neg¨®.

Nunca hasta ahora las cabezas del Ejecutivo argentino se hab¨ªan enfrentado tan abiertamente. Alberto Fern¨¢ndez se refiri¨® a la ¡°altisonancia y la prepotencia¡± de algunos dirigentes, sin nombrar a su rival, e hizo una defensa de su Gobierno. ¡°Seguir¨¦ garantizando la unidad del Frente de Todos a partir del respeto que nos debemos¡±, dijo. Kirchner se tom¨® apenas unas horas para responderle.

¡°Al d¨ªa siguiente de semejante cat¨¢strofe pol¨ªtica [por las elecciones del domingo], uno escuchaba a algunos funcionarios y parec¨ªa que en este pa¨ªs no hab¨ªa pasado nada, fingiendo normalidad y, sobre todo, atornill¨¢ndose a los sillones. ?En serio creen que no es necesario, despu¨¦s de semejante derrota, presentar p¨²blicamente las renuncias y facilitarle al Presidente la reorganizaci¨®n de su Gobierno?¡±, escribi¨® Cristina Kirchner. ¡°No soy yo la que jaquea al presidente, es el resultado electoral¡±, agreg¨®.

Argentina es espectadora ahora del pulso de las dos fuerzas en pugna. El origen de las tensiones hay que buscarlo en la decisi¨®n de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner de promover a su exjefe de gabinete Alberto Fern¨¢ndez como candidato a presidente en 2019, con ella como vice. Se sum¨® a aquel binomio Sergio Massa, un dirigente que hab¨ªa vencido al kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires y que ahora completaba la unidad total del peronismo. La estrategia result¨®, y Alberto Fern¨¢ndez impidi¨® en las urnas la reelecci¨®n de Mauricio Macri. Pero la tensi¨®n entre un presidente sin votos pero con el poder formal y una vicepresidenta sin poder formal pero con votos lastraron los dos primeros a?os de Gobierno. Hasta que todo estall¨® por los aires con la debacle en las primarias del 12 de septiembre, una elecci¨®n que elige a los candidatos que disputar¨¢n una banca en el Congreso el 14 de noviembre pr¨®ximo.

La derrota termin¨® con el mito de que ¡°el peronismo unido jam¨¢s ser¨¢ vencido¡± y potenci¨® los reclamos de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner para que su delf¨ªn cambiase a algunos colaboradores. Pero Fern¨¢ndez prefiri¨® esperar a las Legislativas, con el argumento de que un cambio de nombres en plena campa?a electoral solo complicar¨ªa las cosas. El mi¨¦rcoles, seis ministros kirchneristas y otros tantos altos cargos anunciaron que se iban del Gobierno. La fractura estaba consumada, aunque Argentina siempre tiene matices.

Al frente de la lista de renunciados est¨¢ Eduardo ¡®Wado¡¯ de Pedro, ministro de Interior, hombre del grupo m¨¢s ¨ªntimo de la vicepresidenta. De Pedro present¨® una carta de renuncia que sus voceros repartieron r¨¢pidamente entre periodistas y redes sociales, pero que nunca ingres¨® oficialmente a la Casa Rosada. Sin esa formalidad, la estampida kirchnerista pas¨® a ser un gesto pol¨ªtico destinado a presionar a Fern¨¢ndez para que saque a los ministros que la expresidenta no quiere en el Gobierno: el jefe de ministros, Santiago Cafiero, y el ministro de Econom¨ªa, Mart¨ªn Guzm¨¢n.

El entorno de la vicepresidenta dijo entonces que el mi¨¦rcoles por la tarde hubo un llamado al ministro Guzm¨¢n para decirle que no era cierto que ella estuviese pidiendo su renuncia. La comunicaci¨®n telef¨®nica fue confirmado por el ministerio de Econom¨ªa. La movida, estrat¨¦gica, dice al presidente que el kirchnerismo no se conformar¨¢ solo con el ministro de Econom¨ªa.

Cuando la tensi¨®n escalaba al m¨¢ximo en los pasillos del poder, una radio difundi¨® el audio de una diputada ultrakirchnerista despotricando contra el presidente. Fernanda Vallejos, miembro ilustre de La C¨¢mpora, la agrupaci¨®n que controla M¨¢ximo Kirchner, el hijo de Cristina Kirchner, tilda a Fern¨¢ndez de ¡°okupa y mequetrefe¡± y lo considera un ¡°inquilino¡± de la Casa Rosada que ha dilapidado en dos a?os los votos de la expresidenta. ¡°Todos esper¨¢bamos que el enfermo de Alberto Fern¨¢ndez, el okupa de Alberto Fern¨¢ndez, el lunes a las ocho de la ma?ana [tras la derrota electoral] estuviera haciendo una conferencia de prensa en el escritorio con todas las renuncias sobre la mesa (¡­) No solamente no lo hizo, no lo quiere hacer¡±, dice Vallejos.

Vallejos pidi¨® disculpas por sus palabras, a las que consider¨® ¡°impropias¡± y fruto del fervor de una charla privada. Sin embargo, fueron evidencia brutal de c¨®mo piensa uno de los bandos que hoy tiene a Argentina sumida en la incertidumbre. La pelea, a¨²n abierta, solo puede tener soluciones negativas. Si Alberto Fern¨¢ndez cede a la presi¨®n, queda muy debilitado pero mantiene viva la coalici¨®n. Si no cede, se fortalece como l¨ªder pero rompe la unidad del peronismo a menos de dos meses de las elecciones legislativas. El apoyo que recibi¨® de gobernadores, sindicatos y movimientos sociales no parece por ahora suficiente para mantener la gobernabilidad de un pa¨ªs que lleva tres a?os de recesi¨®n, agravada por la pandemia.

Inflaci¨®n y negociaciones con el FMI

En medio de la inestabilidad pol¨ªtica, merodea el fantasma de la crisis y, sobre todo, del endeudamiento externo. El Ministerio de Econom¨ªa envi¨® a ¨²ltima hora del mi¨¦rcoles un proyecto de Presupuesto para 2022 que prev¨¦ un crecimiento del 4% y una inflaci¨®n del 33%, 15 puntos porcentuales menos de los esperado para este a?o. Lo m¨¢s relevante de la ley de Presupuesto, que debe ser aprobada por las dos C¨¢maras legislativas, es que no contempla pagos de capital al Fondo Monetario Internacional (FMI) por la deuda de 44.000 millones de d¨®lares contra¨ªda por Macri en 2018 y que est¨¢ en proceso de renegociaci¨®n. Los economistas temen que las disputas compliquen ese di¨¢logo, que est¨¢ en manos del ministro Mart¨ªn Guzm¨¢n.

Argentina debe pagar este a?o al FMI dos vencimientos de capital que ascienden a 3.800 millones de d¨®lares. El primero, a finales de este mes, podr¨ªa ser pagado con parte de los derechos especiales de giro que recibi¨® del organismo a finales de agosto.

La cartera de Guzm¨¢n prev¨¦ adem¨¢s un d¨¦ficit primario ¡ªsin pago de vencimientos¡ª del 3,3% del PIB para 2022 y una depreciaci¨®n del peso del 30%. Cada d¨®lar estadounidense se cambiar¨¢ por 131,10 pesos, seg¨²n el Gobierno, frente a los casi 103 pesos que se pagan hoy en el mercado oficial (vedado a los ahorristas) y los 180 pesos del mercado paralelo. El proyecto de ley de Presupuesto 2022 es optimista respecto a la recuperaci¨®n de otros factores clave para el crecimiento econ¨®mico, como el consumo privado y la inversi¨®n, con alzas proyectadas del 4,6% y del 3,1% respectivamente.

Los n¨²meros reales de la econom¨ªa argentina hace a?os que no coinciden con los presupuestados por las autoridades nacionales. Para este 2021, el Gobierno estimaba una inflaci¨®n del 29%, cifra que se alcanz¨® en los primeros siete meses. El ¨²ltimo a?o del Gobierno de Mauricio Macri, el aumento de precios m¨¢s que duplic¨® las previsiones. Fue del 53% frente al 23% estimado en las cuentas oficiales.

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