Donald Trump Jr., el d¨ªa del asalto al Capitolio: ¡°Ha ido demasiado lejos. Se le ha ido de las manos¡±

Lo que contemplaban a trav¨¦s de los monitores de televisi¨®n que estaba sucediendo a las puertas del Capitolio de EE UU era de tal calibre que tres presentadores de la cadena Fox -Laura Ingraham, Brian Kilmeade y Sean Hannity, ardientes defensores de Donald Trump- suplicaron al entonces jefe de Gabinete del mandatario, Mark Meadows, que tratara de interceder y parar aquella locura. Incluso el hijo del presidente, Donald Trump Jr., se mostr¨® alarmado. ¡°Necesitamos que pronuncie un discurso en el Despacho Oval. Es el momento de liderar. Ha ido demasiado lejos. Se le ha ido de las manos¡±, fueron las palabras de su hijo mayor. ¡°Mark, el presidente necesita decirle a la gente del Capitolio que se vaya a casa¡±, escribi¨® en otro mensaje de texto Laura Ingraham al tel¨¦fono celular de Meadows. ¡°Esto nos perjudica a todos. Est¨¢ destruyendo su legado¡±.

Esos mensajes fueron le¨ªdos en la noche del lunes por la congresista Liz Cheney durante una audiencia del comit¨¦ que investiga los hechos del 6 de enero. La republicana tambi¨¦n hizo p¨²blicos algunos otros mensajes, como el texto de Kilmeade en el que se dec¨ªa: ¡°Por favor, ll¨¦venlo a la televisi¨®n. Est¨¢ destruyendo todo lo que ha logrado¡±. ¡°?Puede hacer una declaraci¨®n pidiendo a la gente que abandone el Capitolio?¡±, preguntaba Hannity en otro mensaje de texto.

La lectura pausada de Cheney se produc¨ªa justo antes de que el comit¨¦ votara acusar de desacato a Meadows, al negarse a comparecer y colaborar con las pesquisas para saber qu¨¦ ocurri¨® aquel fat¨ªdico d¨ªa en el que murieron cinco personas. La votaci¨®n contra Meadows fue por unanimidad, con los votos de los dos ¨²nicos congresistas republicanos que integran el comit¨¦, Cheney y Adam Kinzinger.

La declaraci¨®n de desacato por parte del comit¨¦ investigador pasa ahora al pleno de la C¨¢mara de Representantes. De ser aprobada, algo presumible dada la mayor¨ªa dem¨®crata, ser¨¢ entregada al Departamento de Justicia para que procese a Meadows. La reuni¨®n del lunes dur¨® poco m¨¢s de 45 minutos pero fue reveladora de la presi¨®n que aquel d¨ªa existi¨® por parte de Laura Ingraham, Brian Kilmeade, Sean Hannity y Donald Trump Jr. para que el presidente actuara y EE UU no contara en su historia con uno de sus cap¨ªtulos m¨¢s tristes. La cadena Fox no ofreci¨® a sus espectadores la audiencia en el Congreso del lunes por la noche.

Los mensajes de texto le¨ªdos en el Capitolio dejan al descubierto el intento del Partido Republicano de blanquear el asalto a la democracia que se vivi¨® aquel d¨ªa. ¡°Seg¨²n los registros, varios presentadores de Fox News sab¨ªan que el presidente deb¨ªa actuar de inmediato¡±, dijo Cheney. ¡°Enviaron mensajes de texto a Mark Meadows, y ¨¦l pas¨® de esos mensajes¡±, prosigui¨® la hija del exvicepresidente de George W. Bush, Dick Cheney.

Meadows entreg¨® voluntariamente al comit¨¦ 6.600 p¨¢ginas de documentaci¨®n, entre correos electr¨®nicos de cuentas personales y unos 2.000 mensajes de texto, antes de decidir no cooperar. Esos mensajes son la prueba del inmenso nivel de alarma que cre¨® en los principales generadores de opini¨®n de la Fox lo que suced¨ªa aquel d¨ªa tanto fuera como dentro del Capitolio y el impacto a largo plazo que tendr¨ªa en la reputaci¨®n de Trump.

En el discurso de apertura de la sesi¨®n del lunes, el presidente de ese comit¨¦, el dem¨®crata Bennie Thompson, dijo que su paciencia se hab¨ªa agotado ante la decisi¨®n del que fuera asesor del ahora expresidente de no cooperar. ¡°Como jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Meadows jug¨® un papel o fue un testigo clave en los eventos que condujeron al asalto del 6 de enero al Capitolio de Estados Unidos y al propio asalto¡±, sentenci¨® Thompson.

Meadows accedi¨® inicialmente a colaborar con la investigaci¨®n de los legisladores, pero despu¨¦s cambi¨® de postura con el argumento de que la mayor parte de la informaci¨®n que iba a compartir con el comit¨¦ estaba protegida por el llamado ¡°privilegio ejecutivo¡±, al que tambi¨¦n se acoge Trump. Los investigadores afirman que Meadows no puede invocar el derecho a guardar silencio puesto que este excongresista ultraconservador public¨® la semana pasada unas memorias en las que menciona hechos sucedidos el 6 de enero y unas conversaciones con Trump.

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