Biden en la zona de los tornados: ¡°Nunca vi una destrucci¨®n igual¡±

Joe Biden ha comprobado este mi¨¦rcoles personalmente las consecuencias de la devastadora serie de tornados que el pasado viernes por la noche arras¨® pueblos y granjas de seis Estados del centro y el sur de Estados Unidos. El presidente ha volado esta ma?ana a la zona m¨¢s arrasada, en el extremo occidental de Kentucky, para transmitir a las v¨ªctimas el compromiso del Gobierno federal en la recuperaci¨®n, que se prev¨¦ larga y costosa. ¡°Nunca he visto una destrucci¨®n de esta envergadura por un tornado. Estaremos aqu¨ª el tiempo que haga falta¡±, ha dicho al llegar. Despu¨¦s, por la tarde, ha prometido que el Gobierno federal se har¨¢ cargo del ¡°100% de los costes durante los 30 primeros d¨ªas¡±. Y ha lanzado un mensaje de esperanza a los afectados: ¡°Os recuperar¨¦is y reconstruir¨¦is lo da?ado¡±. Biden ha pedido tambi¨¦n a las autoridades locales que no duden en ¡°pedir lo que necesiten¡±.

El viaje ten¨ªa dos paradas, precedidas por un sobrevuelo en helic¨®ptero por la regi¨®n: Mayfield, la zona cero de la cat¨¢strofe, donde una f¨¢brica de velas se llev¨® la peor parte, y Dawson Springs, pueblo de 2.000 habitantes que ha visto desaparecer barrios enteros al paso de las tormentas. Dos zonas especialmente pobres de uno de los Estados m¨¢s pobres del pa¨ªs. El presidente ha paseado acompa?ado de autoridades locales y del secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, por ambas localidades, separadas por 70 millas (unos 113 kil¨®metros) en las que los grandes remolinos repartieron la destrucci¨®n caprichosamente a su paso, dejando varios municipios intactos. En su recorrido, se ha parado frecuentemente para hablar con supervivientes, a los que abrazaba y cog¨ªa de las manos, en un papel, el de pol¨ªtico emp¨¢tico, en el que ha demostrado que se siente c¨®modo.

Solo en Kentucky, donde se registr¨® el m¨¢s despiadado de la treintena de tornados (que se desplaz¨® durante unos 320 kil¨®metros, una distancia in¨¦dita), se han contabilizado 74 muertos hasta el momento, aunque las autoridades esperan que esa cifra aumente; a¨²n hay un centenar de desaparecidos. Los otros estados afectados, Illinois, donde en un almac¨¦n de Amazon perdieron la vida seis trabajadores, Misisipi, Misuri, Arkansas y Tennessee, suman otros 14 fallecidos.

Biden ha subido a primera hora de la ma?ana el Air Force One rumbo al aeropuerto militar de Fort Campbell, donde le estaban esperando el gobernador dem¨®crata Andy Beshear, su esposa, Britney, y el padre de aquel, Steve Beshear, amigo personal del presidente, que, como el hijo, fue gobernador de Kentucky entre 2007 y 2015. Los Beshear proceden del pueblo de Dawson Springs, segunda parada del d¨ªa para el presidente, que avis¨® el fin de semana de sus planes de no visitar la zona afectada inmediatamente ¡°para no entorpecer las tareas de recuperaci¨®n¡±. Kentucky vot¨® ampliamente por Donald Trump en las presidenciales del a?o pasado; sus dos senadores en Washington (Rand Paul y Mitch McConnell) son republicanos.

En Dawson Springs, Biden se ha dirigido a los medios de comunicaci¨®n. ¡°En estos pueblos te conocen desde el momento en que naces, y se preocupan cuando mueres¡±, ha dicho. El gobernador Beshear, cara visible de esta cat¨¢strofe, ha ampliado este mi¨¦rcoles la informaci¨®n sobre los fallecidos, que tienen edades, ha afirmado, entre los dos meses y los 98 a?os. Biden dio permiso el s¨¢bado a la consideraci¨®n de zona catastr¨®fica, lo cual ha permitido que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) env¨ªe sus equipos, as¨ª como 61 generadores, junto con 135,000 galones (511,000 litros) de agua, 74,000 comidas y miles de colchones, mantas y kits para beb¨¦s. Hay siete refugios en funcionamiento actualmente en Kentucky.

Beshear tambi¨¦n ha anunciado el inicio de una investigaci¨®n sobre las circunstancias en las que al menos ocho trabajadores de la f¨¢brica de velas Mayfield Consumer Products hallaron la muerte, mientras se encontraban haciendo un turno extra para poder llegar a atender todos los pedidos navide?os. Varios supervivientes han explicado a los medios estadounidenses que recibieron amenazas de que podr¨ªan ser despedidos si abandonaban la f¨¢brica cuando saltaron las primeras alarmas por tornado. Uno de ellos dijo a The Washington Post que un superior le dijo que el viernes ser¨ªa un d¨ªa ¡°como otro cualquiera¡± cuando aquel le expres¨® su preocupaci¨®n por lo que los partes meteorol¨®gicos promet¨ªan para esa noche.

La propiedad de la f¨¢brica niega esos extremos y asegura que exist¨ªa un plan claro de emergencias para un caso como este, y que ese plan se observ¨®. La investigaci¨®n, calcula Beshear, podr¨ªa llevar seis meses.

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