La UE teme una crisis migratoria de dimensiones hist¨®ricas en el Cuerno de ?frica

Bruselas teme que el conflicto armado en Etiop¨ªa degenere en 2022 y provoque una cat¨¢strofe humana y una crisis migratoria de proporciones hist¨®ricas. Fuentes comunitarias alertan del riesgo de que la guerra desestabilice todo el Cuerno de ?frica, una zona donde viven m¨¢s de 200 millones de personas y ya soporta la tensi¨®n de gigantescos desplazamientos internos de poblaci¨®n. Estados Unidos ha impuesto sanciones a algunas de las autoridades y empresas eritreas implicadas en el choque armado. Pero en la Uni¨®n Europea no ha habido unanimidad para adoptar medidas, a pesar de que se reconoce el riesgo de una espiral de violencia que desestabilice toda la zona.

¡°La situaci¨®n en varias partes de ?frica es preocupante y nos puede dar un susto en los pr¨®ximos meses¡±, apunta una fuente diplom¨¢tica europea. La misma fuente se?ala a la guerra en Etiop¨ªa, donde los rebeldes en la zona de Tigray, al norte del pa¨ªs, se enfrentan al ej¨¦rcito federal, como uno de los grandes focos de inquietud para 2022.

Bruselas teme que el conflicto et¨ªope se envenene a¨²n m¨¢s y acabe arrastrando a otros pa¨ªses de la zona como Sud¨¢n, Sud¨¢n del Sur o Somalia, adem¨¢s de Eritrea, ya claramente implicada. Fuentes comunitarias apuntan que el estallido de la zona provocar¨ªa ¡°un ¨¦xodo migratorio de proporciones hist¨®ricas comparable al de la ruptura de Yugoslavia¡±.

Aquella desmembraci¨®n a partir de 1991 provoc¨® movimientos de poblaci¨®n que afectaron a m¨¢s de tres millones de personas y casi un mill¨®n buscaron refugio en los pa¨ªses de la Uni¨®n Europea. La sacudida demogr¨¢fica fue de tal magnitud que los pa¨ªses europeos modificaron el car¨¢cter indefinido del estatuto de refugiado y lo sustituyeron por una protecci¨®n temporal considerada meramente de emergencia.

Europa se vio desbordada a pesar de que la antigua Yugoslavia solo ten¨ªa 23 millones de habitantes. Pero Etiop¨ªa, epicentro del conflicto del Cuerno de ?frica, es un gigante de 112 millones de habitantes. Y est¨¢ circundada por pa¨ªses como Sud¨¢n (45 millones), Sud¨¢n del sur (16 millones) o Somalia (16 millones), que ya sufren enormes tensiones internas.

En Sud¨¢n, 6,2 millones de personas necesitan asistencia humanitaria en la zona de Darfur, seg¨²n detalla el informe interno que la Comisi¨®n Europea elabora peri¨®dicamente sobre la situaci¨®n de alerta de movimientos migratorios. Y en Somalia hay 2,9 millones de personas desplazadas, seg¨²n el mismo informe, fechado el 15 de diciembre.

Los desplazamientos forzados de poblaci¨®n podr¨ªan desestabilizar una zona ya golpeada por otros conflictos armados, por sequ¨ªas y hambrunas. Y aunque la distancia geogr¨¢fica con la UE es mucho mayor que en el caso de Yugoslavia, Bruselas estima probable que parte de los flujos migratorios se desplacen hacia el Viejo Continente a trav¨¦s, sobre todo, de Libia.

¡°Etiop¨ªa est¨¢ viviendo una de las guerras m¨¢s cruentas que se libran en estos momentos en el planeta¡±, se?alan fuentes comunitarias. Y muestran su inquietud por la subsistencia pac¨ªfica de la zona ¡°incluso cuando acabe la guerra¡±. El conflicto, seg¨²n datos de la Comisi¨®n Europea, ya ha provocado el desplazamiento de m¨¢s de dos millones de personas y miles han buscado refugio en Sud¨¢n. Las autoridades sudanesas ya han amenazado con provocar una salida masiva de migrantes con destino hacia Europa o Estados Unidos

Puente a¨¦reo de ayuda humanitaria

Desde el comienzo de la crisis en el norte de Etiop¨ªa en noviembre de 2020, la UE ha proporcionado 70 millones de euros en ayuda humanitaria. Para 2021 ten¨ªa presupuestados hasta 85 millones m¨¢s. Y en septiembre de este a?o, la UE activ¨® un puente a¨¦reo que ha llevado hasta 15 toneladas de alimentos y suministros sanitarios hasta la zona de Tigray, la m¨¢s golpeada por el conflicto. Fuentes diplom¨¢ticas reconocen, sin embargo, las crecientes dificultades para canalizar la ayuda hasta la poblaci¨®n m¨¢s necesitada, dada la violencia y el aislamiento de importantes zonas del pa¨ªs.

¡°La hambruna afecta a m¨¢s de nueve millones de personas en el norte de Etiop¨ªa¡±, se?al¨® el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, a mediados de diciembre tras presidir una reuni¨®n de los ministros de Exteriores de la UE en la que se abord¨® la dram¨¢tica situaci¨®n en el Cuerno de ?frica. ¡°Etiop¨ªa es una de mis mayores frustraciones porque no somos capaces de reaccionar de manera adecuada a una violaci¨®n a gran escala de los derechos humanos, a violaciones masivas, al uso de la violencia sexual como arma de guerra, a asesinatos y a campos de concentraci¨®n basados en el origen ¨¦tnico¡±, asegur¨® el jefe de la diplomacia europea.

Borrell ha intentado en vano imponer sanciones contra los responsables de las mayores atrocidades, pero no ha logrado la unanimidad necesaria de los 27 pa¨ªses de la Uni¨®n para aprobarlas. La crisis et¨ªope planear¨¢ tambi¨¦n sobre la cumbre que la UE espera celebrar en febrero de 2022 con la Uni¨®n Africana. Es una cita ideada para resaltar la importancia que Bruselas concede a la relaci¨®n con el continente vecino, pero que estar¨¢ marcada por la titubeante presencia europea en las zonas m¨¢s conflictivas (como el Sahel o Rep¨²blica Centroafricana) y la voluntad de otras potencias (Rusia, sobre todo) de ocupar el vac¨ªo europeo.

El conflicto de Etiop¨ªa se encuentra en una suerte de impasse despu¨¦s de que en las ¨²ltimas semanas el ej¨¦rcito federal haya logrado frenar el avance de los rebeldes tigrayanos hacia la capital, Ad¨ªs Abeba, forzando su repliegue hacia la regi¨®n de Tigray. El d¨ªa 23 el portavoz del Gobierno et¨ªope, Legesse Tulu, asegur¨® que, por ahora, el ej¨¦rcito no ten¨ªa intenci¨®n de penetrar en Tigray y que ten¨ªa ¨®rdenes de mantenerse en las regiones vecinas de Amhara y Afar. ¡°Seg¨²n nuestra evaluaci¨®n actual, el enemigo ha sido fuertemente golpeado y ya no es capaz de ejecutar sus deseos¡±, asegur¨® Tulu. La ONU ha acusado a ambos bandos de cometer cr¨ªmenes de guerra y graves violaciones de los derechos humanos.

La guerra, que ha provocado miles de muertos, unos dos millones de desplazados de sus hogares y unos 9,4 millones de et¨ªopes necesitados de ayuda, estall¨® en noviembre de 2020 cuando el primer ministro, Abiy Ahmed, premio Nobel de la Paz en 2019, acus¨® al Frente de Liberaci¨®n del Pueblo de Tigray (TPLF), que gobierna en esta regi¨®n norte?a, de haber atacado dos bases militares et¨ªopes. Sin embargo, la tensi¨®n entre ambos bandos hab¨ªa ido en aumento desde que Ahmed lleg¨® al poder en 2018 y comenz¨® a desplazar a los miembros del TPLF de las principales instituciones. En 2020, Ahmed decidi¨® suspender las elecciones debido a la pandemia, pero los tigrayanos celebraron comicios regionales en septiembre, en un claro desaf¨ªo al poder central ejercido por Ahmed.

Las tres primeras semanas de guerra supusieron un constante avance de las tropas federales hacia el norte, logrando penetrar en la regi¨®n de Tigray tras el bombardeo de su capital, Mekele. Ahmed, quien ha contado con el apoyo de tropas eritreas, lleg¨® incluso a anunciar el fin del conflicto. Sin embargo, los rebeldes tigrayanos se reorganizaron y, tras unos meses de relativa calma, lanzaron en junio una contraofensiva que primero penetr¨® en las regiones vecinas de Amhara y Afar y posteriormente se situ¨® a apenas 200 kil¨®metros de Ad¨ªs Abeba, con el apoyo de grupos armados de otras etnias, como los oromo. Pero la reacci¨®n del ej¨¦rcito federal, con el propio Ahmed desplazado al frente durante dos semanas, logr¨® frenar este avance a finales de noviembre y forzar la retirada del TPLF hacia su feudo de Tigray.

Grave crisis institucional en Somalia

Mientras la guerra prosigue en Etiop¨ªa, la vecina Somalia se enfrenta a una grave crisis institucional. Militares fuertemente armados se instalaron este martes en sectores estrat¨¦gicos de la capital, Mogadiscio, y tropas leales al primer ministro, Mohamed Hussein Roble, acamparon cerca del palacio presidencial despu¨¦s de que el lunes el presidente, Mohamed Abdullahi Mohamed, conocido como Farmajo, destituyera al primero por un supuesto caso de corrupci¨®n. Este mi¨¦rcoles, Roble mantuvo una conversaci¨®n telef¨®nica con Molly Phee, subsecretaria de Estado estadounidense para Asuntos Africanos, en la que abord¨® la situaci¨®n pol¨ªtica en Somalia y cuestiones relativas a la seguridad y a las elecciones.

La tensi¨®n entre Farmajo y Roble hab¨ªa ido en aumento en los ¨²ltimos meses. En el origen del problema se encuentra el retraso de las elecciones generales somal¨ªes, previstas para febrero de este a?o, y que el presidente decidi¨® posponer hasta 2023 prolongando su mandato dos a?os m¨¢s de lo previsto y sumiendo al pa¨ªs en una grave crisis. Tanto la oposici¨®n como una parte de los aliados de Farmajo calificaron este aplazamiento como ¡°una amenaza para la estabilidad, la paz y la unidad¡±.

La Uni¨®n Europea y Estados Unidos amenazaron con sancionar a Somalia, un pa¨ªs profundamente dividido que vive bajo la constante amenaza de la violencia yihadista. El presidente ya retir¨® al primer ministro sus atribuciones para organizar dichos comicios antes de suspenderle de sus funciones. Roble acusa a Farmajo de intentar dar un golpe de Estado.

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