Peri¨®dicos, munici¨®n y un pu?ado de monedas bajo la estatua del general Robert Lee
Los expertos hallan una c¨¢psula del tiempo bajo el pedestal del pol¨¦mico monumento en Richmond del l¨ªder confederado
Cuando las autoridades de Virginia decidieron retirar el pasado septiembre la ic¨®nica estatua del general Robert Lee del centro de Richmond ¡ªcapital de la Confederaci¨®n durante la guerra, entre 1861 y 1865¡ª, los expertos en conservaci¨®n hist¨®rica sab¨ªan que ten¨ªan trabajo que hacer. Bajo uno de los monumentos confederados m¨¢s grandes de Estados Unidos estaba enterrada hace 134 a?os una c¨¢psula del tiempo. A mediados de diciembre, cuando los trabajadores quitaron el pedestal, apareci¨® una caja con una serie de objetos, pero no eran los que describ¨ªa un peri¨®dico de la ¨¦poca. Este martes lograron dar con esa caja. En su interior, han hallado cubiertos de agua, peri¨®dicos, una revista de 1865 con la imagen de alguien llorando sobre el ata¨²d de Lincoln, una biblia, balas y objetos relacionados con los masones y la confederaci¨®n, entre otras reliquias.
La estatua del general Lee fue objeto de debate durante a?os, pero no fue hasta las manifestaciones antirracistas por la muerte de George Floyd, que derivaron en una revisi¨®n del pasado y el sentido de los monumentos en Estados Unidos, que el gobierno local de Virginia decidi¨® retirarla. Los historiadores estaban al tanto de que bajo la estatua de 6,4 metros de altura, erigida en 1890 sobre un pedestal de granito de casi el doble de alto, hab¨ªa una c¨¢psula del tiempo, seg¨²n un art¨ªculo de un peri¨®dico de esos a?os, en los que detallaba docenas de objetos colocados en la caja enterrada. ¡°Encontramos bastantes de ellos¡± dijo Sue Donovan, conservadora de colecciones especiales en la Biblioteca de la Universidad de Virginia.
Muchos de los artefactos encontrados en la caja de cobre estaban h¨²medos y fr¨¢giles, por lo que los conservadores del Departamento de Recursos Hist¨®ricos de Virginia (DHR, por sus siglas en ingl¨¦s) realizaron un meticuloso trabajo al momento de sacarlos y preservarlos de la mejor manera antes de que los historiadores puedan examinarlos y catalogarlos. ¡°Honestamente, todav¨ªa no estamos seguros de lo que tenemos¡±, reconoci¨® Kate Ridgway, conservadora arqueol¨®gica estatal del DHR, quien describi¨® que los objetos ¡°estaban m¨¢s h¨²medos¡± de lo que esperaban, ¡°pero no tan mal como podr¨ªan haber estado¡±. Tambi¨¦n aclar¨® que las cajas no son oficialmente ¡°c¨¢psulas del tiempo¡± ya que no hab¨ªa una fecha oficial para abrirlas, y que lo apropiado ser¨ªa llamarlas ¡°cajas de piedra angular¡±.
Entre los artilugios hallados hab¨ªa seis balas de fusil Mini¨¦ de plomo blando, que se usaban en el siglo XIX; un ejemplar del 29 de abril de 1865 de la revista pol¨ªtica Harper¡¯s Weekly con la imagen impresa de una persona llorando sobre el ata¨²d del presidente Abraham Lincoln; un libro titulado Minucias detalladas de la vida de un soldado en el ej¨¦rcito del norte de Virginia; una gu¨ªa para los comerciantes y fabricantes de Richmond y dos vol¨²menes de informes anuales de la C¨¢mara de Comercio local de 1886 y 1887. Tambi¨¦n aparecieron unas copias del peri¨®dico local Daily Dispatch -uno del 2 de diciembre de 1868-; una Biblia con una moneda de diez centavos de 1883 pegada a la tapa; y un almanaque de 1887. Adem¨¢s encontraron objetos de madera relacionados con los masones, monedas, y una cinta conmemorativa de 1884 con un dibujo de Robert E. Lee.
Anterior a este descubrimiento, los trabajadores que desmantelaron el pedestal de la estatua encontraron una caja de plomo, seg¨²n un comunicado de prensa de la oficina del gobernador de Virginia, Ralph Northam. Entre los art¨ªculos encontrados en el interior hab¨ªa un almanaque de 1875, dos libros deteriorados, una moneda y un sobre de tela. Los historiadores creen que dicha c¨¢psula del tiempo se coloc¨® el 27 de octubre de 1887 e inclu¨ªa alrededor de 60 objetos donados por 37 residentes de Richmond, muchos relacionados con la Confederaci¨®n, seg¨²n la oficina del gobernador. Los conservadores se han comprometido a publicar pr¨®ximamente un sumario detallado de todos los artefactos recuperados.
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