Biden acusa a Trump de atacar la democracia tejiendo una ¡°red de mentiras¡±

Joe Biden se lanz¨® en tromba contra Donald Trump en el primer aniversario de la invasi¨®n del Capitolio. En un discurso demoledor, desde el mismo edificio y el mismo sal¨®n donde un a?o atr¨¢s los asaltantes camparon a sus anchas, el presidente de Estados Unidos acus¨® este jueves a su predecesor de haber incitado la revuelta con ¡°una red mentiras¡± y puesto en jaque la paz y la democracia del pa¨ªs por una cuesti¨®n de ¡°ego herido¡±. ¡°No es solo un expresidente, es un expresidente derrotado¡±, recalc¨® el dem¨®crata, golpeando donde m¨¢s puede doler al republicano, el orgullo de un hombre cuyo insulto predilecto es ¡°perdedor¡±.

El 6 de enero de 2021, una marabunta de seguidores del entonces presidente Trump, derrotado en las elecciones, invadi¨® el Congreso para tratar de boicotear la confirmaci¨®n de la victoria de Biden. Actuaban agitados por un bulo de fraude electoral que el republicano mantiene a d¨ªa de hoy y que un 70% de sus votantes sigue creyendo, de ah¨ª el tono de gravedad y de urgencia en el discurso del actual gobernante, quien advirti¨® de que la democracia estadounidense vive ¡°un punto de inflexi¨®n¡±.

¡°El expresidente ha creado un entramado de mentiras sobre las elecciones de 2020 y lo ha hecho porque pone el poder por encima de los principios, porque cree m¨¢s importante su inter¨¦s que el de su pa¨ªs y porque su ego herido le importa m¨¢s que nuestra democracia o nuestra Constituci¨®n¡±, dijo el dem¨®crata este jueves. ¡°?Vamos a ser una naci¨®n que acepta la violencia pol¨ªtica como norma? ?Una donde permitimos a cargos electorales partidistas anular la voluntad legalmente expresada de los ciudadanos? ?Una que no se gu¨ªa por la luz de la verdad, sino a la sombra de mentiras?¡±, apel¨® a los ciudadanos.

No pronunci¨® el nombre del republicano en ning¨²n momento, pero s¨ª utiliz¨® la palabra expresidente hasta 16 veces, en su discurso m¨¢s feroz desde que lleg¨® al Gobierno. Ha pasado un a?o tratamdo de ignorar su figura, hablando lo menos posible de ¨¦l, pero esta vez se lanz¨® a la yugular. Acus¨® a Trump no solo de haber arengado a las masas ese d¨ªa, sino de ¡°no hacer nada durante horas¡± mientras atacaban a la polic¨ªa. Murieron cinco personas en la refriega, resultaron heridos 140 polic¨ªas, el mundo contempl¨® estupefacto al pa¨ªs m¨¢s poderoso del mundo impotente, durante horas, ante hordas de seguidores de Trump que amenazaban a los pol¨ªticos con gritos incluso de: ¡°?Hay que colgar a Mike Pence!¡±, el entonces vicepresidente, que se neg¨® a bloquear la certificaci¨®n de Biden.

La fractura pol¨ªtica que sufre Estados Unidos ha supurado incluso sobre la propia conmemoraci¨®n del 6 de enero. Los dem¨®cratas han querido te?ir la jornada de solemnidad, de gravedad. El Congreso ten¨ªa previsto acoger discursos de los parlamentarios, oraciones y momentos de silencio durante todo el d¨ªa, pero la mayor parte de republicanos se han ausentado, la mayor¨ªa ha evitado los reproches a Trump y algunos, como los senadores Mitch McConnell o Lindsey Graham, han acusado a Biden de usar la efem¨¦ride de forma partidista. En un momento, en la C¨¢mara de Representantes, solo estaban presentes la congresista Liz Cheney y su padre, Dick Cheney, vicepresidente de Bush hijo y otrora bestia negra de los dem¨®cratas.

A Trump no se lo se?ala solo por su larga campa?a de descr¨¦dito hacia el sistema electoral estadounidense, sino porque ese mismo d¨ªa maldito tard¨® horas en pedir a sus seguidores que abandonasen el Capitolio y porque, hasta el ¨²ltimo momento, justific¨® la violencia. ¡°Estas son las cosas y acontecimientos que ocurren cuando una victoria sagrada y abrumadora es arrebatada de forma agresiva a grandes patriotas que han sido tratados mal e injustamente durante mucho tiempo. Id a casa en paz y amor. ?Recordad este d¨ªa para siempre!¡±, escribi¨® en su cuenta de Twitter. Ser¨ªa uno de sus ¨²ltimos mensajes, antes de ser expulsado de la red social.

Este jueves, Biden recalc¨®: ¡°Por primera vez en la nuestra historia, un presidente que perdi¨® la elecci¨®n trat¨® de evitar la transferencia pac¨ªfica del poder mientras una turba violenta irrump¨ªa en el Capitolio. Pero fracasaron. Fracasaron¡±. Advirti¨® de que ¡°los que invadieron¡± el Congreso y quienes ¡°los incitaron¡± ¡°pusieron un pu?al en la garganta de Estados Unidos y de la democracia¡±. ¡°No vinieron aqu¨ª por patriotismo o principios, vinieron con furia, no en servicio de Am¨¦rica, sino al servicio de un hombre¡±, a?adi¨®. ¡°Yo no busqu¨¦ esta pelea¡±, continu¨®, ¡°pero defender¨¦ esta naci¨®n y no dejar¨¦ que nadie ponga un pu?al en la garganta de esta democracia¡±.

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Biden pide a los estadounidenses que se gu¨ªen por "la luz de la verdad"

Sobre esa advertencia planea una batalla trascendental de republicanos y dem¨®cratas en cuanto al modo en el que deben celebrarse las elecciones en Estados Unidos. Tras la derrota de noviembre, varios Estados tradicionalmente conservadores como Georgia y Arizona, que fueron claves en el resultado, han impulsado leyes que endurecen los requisitos para votar y, en la pr¨¢ctica, entorpecen el sufragio de minor¨ªas y personas desfavorecidas, m¨¢s proclives al voto progresista. Adem¨¢s, han reforzado el poder de las C¨¢maras legislativas sobre el procedimiento y, por tanto, sobre la anulaci¨®n de papeletas. Por su parte, los dem¨®cratas promueven una ley de ¨¢mbito nacional que ampl¨ªe y facilite el sufragio.

¡°El expresidente y sus seguidores han decidido que la ¨²nica manera de ganar es suprimir vuestro voto y anular las elecciones. Est¨¢ mal. Es antidemocr¨¢tico y, francamente, es antiamericano¡±, se?al¨® Biden. La vicepresidenta, Kamala Harris, se pronunci¨® en un discurso previo, en el que inst¨® a los senadores y congresistas a aprobar la iniciativa legislativa en marcha. ¡°Debemos defender nuestra democracia¡±, dijo.

Por la tarde estaba previsto que tomasen la palabra los historiadores Doris Kearns Goodwin y Jon Meacham para ¡°establecer y preservar el relato del 6 de enero¡±, seg¨²n se?al¨® hace unos d¨ªas la presidenta de la C¨¢mara de Representantes, la dem¨®crata Nancy Pelosi. No todos tienen el mismo relato. Republicanos y dem¨®cratas contemplan la revuelta del 6 de enero y sus consecuencias con diferentes ojos. Un 92% de los adultos dem¨®cratas cree que Trump tiene culpa de lo ocurrido, frente al 27% de los republicanos, seg¨²n una encuesta reciente de The Washington Post y la Universidad de Maryland. Y un 40% de los republicanos creen que la acci¨®n violenta contra el Gobierno puede estar justificada en ocasiones, frente al 34% dem¨®crata.

Biden se dirigi¨® a la naci¨®n desde el Statuary Hall, el noble vest¨ªbulo por el que aquel mismo d¨ªa desfilaron hombres y mujeres con banderas y gorras de Trump, algunos de ellos disfrazados, como el popular Jacob Chansley, tocado con cuernos de bisonte y apodado el Cham¨¢n de Qanon, un famoso movimiento de teor¨ªas conspirativas.

El presidente hizo un repaso de las auditor¨ªas y los recuentos a los que fue sometida la elecci¨®n presidencial de noviembre de 2020 sin que se encontrase ninguna irregularidad que alterase el resultado, es decir, su victoria, y se?al¨® alguna incongruencia del republicano, como el hecho de que discute el rigor de su escrutinio, pero no el del resto de elecciones de ese mismo d¨ªa en las que se eleg¨ªan gobernadores y miembros de C¨¢maras legislativas. ¡°No es capaz de aceptar que ha perdido¡±, concluy¨®.

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