Velia Vidal: ¡°El racismo nos supera porque nos habita¡±
La escritora y promotora cultural del Choc¨® usa la literatura para coser las profundas brechas de desigualdad en el Pac¨ªfico colombiano
Velia Vidal lleg¨® a donde no se esperaba que llegara cuando naci¨® hace 39 a?os en Bah¨ªa Solano, en Choc¨®, el departamento m¨¢s pobre de Colombia. Un lugar que suele abandonar todo el que sue?a con prosperar. Ella tambi¨¦n lo hizo cuando solo era una ni?a. A?os despu¨¦s, y en medio de una carrera de ¨¦xito como comunicadora en Medell¨ªn, decidi¨® regresar sin saber muy bien a qu¨¦ dedicar¨ªa su vida. Entonces empez¨® a contarle los miedos, las dudas y los aciertos de un regreso que pocos entendieron en largas cartas a un amigo. Unos textos que en 2020 se convirtieron en la novela Aguas de Estuario. Vidal asegura ahora desde Cartagena, en el marco del Hay Festival, que en su tierra encontr¨® su lugar en el mundo. Desde Choc¨® lidera un proyecto cultural llamado Motete que ayuda a unas 1.500 familias, promueve la lectura entre los ni?os y organiza anualmente la Fiesta de la Lectura y Escritura del Choc¨® (FLECHO). Tambi¨¦n alza la voz contra un racismo que considera sist¨¦mico: ¡°La literatura es indiscutiblemente un acto pol¨ªtico de una gran responsabilidad social¡±.
Pregunta. ?C¨®mo se vive siendo ni?a el tener que abandonar tu casa?
Respuesta. Ahora me doy cuenta de que es muy fuerte que nosotros crecemos con la idea de salir para poder estar mejor. No recuerdo haber tenido una idea distinta, desde que tengo uso de raz¨®n dese¨¢bamos salir y ten¨ªamos conciencia de que la ¨²nica forma de acceder a una mejor educaci¨®n, a otras oportunidades, era saliendo del Choc¨®. Cuando lleg¨® el momento en que mi mam¨¢ y yo finalmente nos fuimos a Cali era lo m¨¢s esperado. Yo deseaba irme de Quibd¨® porque lo pas¨¢bamos muy mal. Una cosa tan simple como tener el agua a la mano, mientras en mi casa ten¨ªamos que ir todo el tiempo a un pozo.
P. A?os despu¨¦s lo deseable fue volver.
R. Cuando llega el momento de querer volver ya ten¨ªa buena parte de lo que sal¨ª a buscar. Ya era profesional, ten¨ªa un primer posgrado, si bien no daba mi vida por realizada, s¨ª hab¨ªa logrado muchas cosas que para una persona como yo parec¨ªan poco probables. Llegu¨¦ a ser comunicadora en la alcald¨ªa de Medell¨ªn, presentadora de televisi¨®n, pude desarrollar una carrera profesional exitosa. En ese momento de la vida yo buscaba m¨¢s el sentido profundo, como un prop¨®sito m¨¢s esencial. Esa b¨²squeda me llevaba al Choc¨®.
P. ?Es m¨¢s f¨¢cil irse o volver?
R. Creo que es m¨¢s dif¨ªcil volver porque vuelves y te das cuenta que muchas cosas no han cambiado. Encuentro familias que hoy viven mucho peor de lo que nos toc¨® a nosotros, voy a barrios donde las personas no tienen inodoros. En estos a?os que yo estuve por fuera las cifras de desplazamiento forzado en el Choc¨® fueron aterradoras, en Quibd¨® en los ¨²ltimos 10 a?os se ha triplicado la cifra de asesinatos. Es muy doloroso ese contraste. Ayer [este jueves] en Bah¨ªa Solana me despert¨® una granada. Hoy llam¨¦ a mi abuela y me dijo que amanecieron con la noticia de un muerto desmembrado. Yo eleg¨ª vivir all¨¢, no estoy all¨¢ porque me toque, y sin embargo, es muy dif¨ªcil estar all¨¢.
P. ?Entendieron los dem¨¢s que quisiera regresar?
R. A todos les parec¨ªa absurdo. La ¨²nica que no me dijo eso fue mi abuela. Le dije: abuela, vine a contarle que me vengo a vivir ac¨¢. Y me dijo: est¨¢ bien, usted naci¨® aqu¨ª y si todos los dem¨¢s vivimos aqu¨ª, usted tambi¨¦n puede. Para m¨ª fue reveladora esa mirada tan serena, tan contundente.
P. Lleg¨® y tampoco ten¨ªa un plan.
R. No hab¨ªa ning¨²n plan y mont¨¦ un trampol¨ªn. Un brinca brinca en el que los ni?os se sub¨ªan 15 minutos y me pagaban mil pesos. Era muy loco, la presentadora de televisi¨®n ahora montaba ni?os a un trampol¨ªn. Ese trabajo me hizo conectarme y descubrir la vocaci¨®n. Tambi¨¦n le¨ª, entre ellos a Federico Garc¨ªa Lorca, que vino como a ser el sello para decirme: tienes que dedicarte a esto del arte y de la cultura y en particular de la promoci¨®n de la lectura.
P. Gan¨® la primera beca del Ministerio de Cultura para la publicaci¨®n de obras de autoras afrocolombianas. ?Hacen falta ese tipo de iniciativas?
R. Quienes consideran que las acciones afirmativas no son necesarias regularmente desconocen la historia del pueblo negro. Venimos de una historia de esclavizaci¨®n, solo son 170 a?os desde la abolici¨®n. Si no conoces eso no entiendes que se necesitan unas acciones afirmativas para cerrar estas brechas. No deber¨ªan durar toda la vida, pero en este momento hist¨®rico las necesitamos. En el Choc¨® no hay editoriales, hasta hace muy poco no hab¨ªa librer¨ªas, no hay una carrera de literatura, no hay un solo curso de escritura creativa. ?C¨®mo se cierra una brecha tan profunda? ?Hasta que llegas por azar? La acci¨®n afirmativa te acerca a un derecho, no te hace un regalo.
P. ?Existe lo que llamamos un boom literario del Pac¨ªfico?
R. Hay un asunto complejo con esto. De un lado creo que ya sabemos que hist¨®ricamente no nos han dado la posibilidad de narrarnos a nosotros mismos y hay una necesidad fuerte de que nosotros podamos contar nuestras propias historias. Que yo me gane la beca, adem¨¢s de que [la editorial] Laguna hab¨ªa decidido publicarme antes de eso, que apuesten por este libro es muy significativo por esa urgencia de que las personas afro y del Pac¨ªfico circulen en el universo del libro con equidad. Ahora, hay un inter¨¦s en el mundo de la cultura por el Pac¨ªfico y eso creo que proviene de la necesidad de contar historias diferentes, pero eso es muy distinto. Eso ha dado como resultado que muchas de esas cosas que se pueden considerar como parte del boom est¨¢n contadas por personas blanco mestizas que nos miran a trav¨¦s del lente del racismo. No es el caso de Pilar Quintana o Tom¨¢s Gonz¨¢lez. Yo no me opongo a que personas blanco mestizas narren historias que ocurren en el Pac¨ªfico, todos podemos escribir de todo. Pero s¨ª es muy importante que si una persona que no es del Pac¨ªfico, que no es afro o ind¨ªgena, se siente interesada en narrar algo que tiene que ver con esta regi¨®n, revise el racismo que lo habita.
P. En agosto del a?o pasado hizo un art¨ªculo en el que calificaba de racista la novela Esta herida llena de peces. ?Por qu¨¦ decidi¨® escribirlo?
R. Me cost¨® mucho, lo pens¨¦ mucho, pero varias personas me ayudaron a convencerme de que deb¨ªa hacerlo. Fue dif¨ªcil porque debo aceptar que me doli¨® un mont¨®n la novela, fue dif¨ªcil leerla, llor¨¦ muchas veces por el modo en el que est¨¢bamos narrados ah¨ª, tambi¨¦n me dio rabia. Cuando decid¨ª escribir el art¨ªculo sab¨ªa que ten¨ªa que hacer un trabajo profesional, respetuoso y serio, ten¨ªa que despojarme de mi dolor y mi rabia. Adem¨¢s no es una rabia y un dolor contra la autora, para nada, es el dolor por el racismo, que es sist¨¦mico, es el dolor de c¨®mo nos ven los otros. Quer¨ªa que se enfocara en el prop¨®sito profundo de hacer un llamado a la revisi¨®n individual, a los autores, a los editores, a los medios, sobre el modo en el que se est¨¢ narrando al otro.
P. ?Cree que fue un racismo involuntario?
R. Yo no he tenido una conversaci¨®n con ella, pero sospecho que nunca quiso ser racista, podr¨ªa asegurarlo. El racismo nos supera porque nos habita, crecimos en un sistema racista y replicamos esas pr¨¢cticas, es un sistema de creencias. Del modo en el que t¨² ves al otro ni siquiera es consciente, pero la persona racializada s¨ª tiene emociones y sentimientos frente a eso. Creo que el libro fue una gran oportunidad para que yo escribiera el art¨ªculo y pudiera explicar de manera tan precisa c¨®mo se configura el racismo en un texto literario.
P. ?Hay menos racismo en Colombia hoy que cuando usted naci¨®?
R. En el debate de los precandidatos presidenciales sobre los pueblos afro se vio que no nos conocen, no conocen nuestra historia, no saben nuestras particularidades y no saben lo ¨ªntimamente que est¨¢ ligado el racismo con la realidad social que vive el Pac¨ªfico colombiano. En estos 39 a?os que tengo de vida no me atrever¨ªa a decir que Colombia sea un pa¨ªs menos racista. S¨ª ha contado con la suerte de que muchas personas afro estamos hablando de esto y lo estamos poniendo sobre la mesa. Estamos caminando, pero falta much¨ªsimo por construir.
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