C¨¢rcel para los ni?os del califato
Cientos de menores de familias que participaron en el ISIS, entre ellos un espa?ol, han sido apartados por los kurdos y recluidos en centros de ¡°rehabilitaci¨®n¡± o prisiones en el noreste de siria, convirti¨¦ndose en blanco de los islamistas radicales
Cuenta la familia de Abdurahman, de 14 a?os ¡ªhijo de Luna Fern¨¢ndez Grande, de 35 a?os, espa?ola detenida en un campamento sirio para familias vinculadas al Estado Isl¨¢mico (ISIS, en sus siglas en ingl¨¦s)¡ª, que el chaval fue apresado por las autoridades kurdas una noche de febrero del a?o pasado, mientras orinaba fuera de la tienda. El menor hab¨ªa sorteado escondido una primera visita de uniformados un d¨ªa antes. Contaba entonces con 13 a?os y sab¨ªa, como su madre, que si preguntaban por ¨¦l era para llev¨¢rselo, como hab¨ªan hecho ya con otros chavales de 12 a?os o mayores.
Son cientos los menores encerrados por las autoridades kurdas lejos de sus familias en un pu?ado de centros del noreste sirio. Tan solo en una de las instalaciones de la c¨¢rcel de Al Sina¡¯a, en la ciudad de Hasaka, atacada por el ISIS el pasado 20 de enero, hab¨ªa alrededor de 700 menores. Cuando los yihadistas embistieron, ni?os y hombres, presos por sus lazos con el grupo terrorista, se mezclaron. El riesgo para los chavales ante una amenaza as¨ª era evidente. Human Rights Watch (HRW) y Amnist¨ªa Internacional (AI) han descrito la situaci¨®n de estos adolescentes como ¡°detenci¨®n arbitraria e ilegal¡±. Y han recordado la responsabilidad de los pa¨ªses de origen de estos reclusos al no repatriarlos y ceder su custodia a terceros en un contexto de violencia.
Seg¨²n el relato facilitado a EL PA?S por Kawtar, t¨ªa del menor espa?ol en contacto regular con Luna Fern¨¢ndez, esta intent¨® hablar con su hijo cuando empez¨® a recibir noticias del ataque en Al Sina¡¯a. Abdurahman no estaba all¨ª, sino en el centro Al Houri, a las afueras de Qamishli, tambi¨¦n en ese noreste controlado por las milicias kurdas. Pero el contacto entre madre e hijo en el ¨²ltimo a?o hab¨ªa sido escaso: una vez al mes, dos veces... Podr¨ªa haber sido trasladado. Nadie cogi¨® el tel¨¦fono en Al Houri. ¡°Tengo miedo de que mi hijo no est¨¦ en el sitio en el que estaba¡±, escribi¨® Fern¨¢ndez el 24 de enero en un mensaje a su familia en Madrid. El padre de Abdurahman, Mohamed Amin el Aabou, investigado por la Audiencia Nacional espa?ola, muri¨® en 2019 en la batalla de Baguz, el ¨²ltimo basti¨®n del ISIS.
Alrededor de 60.000 personas, con antecedentes en aquel califato del ISIS derrotado, residen ahora en los campamentos sirios de Al Roj, donde se encuentra Fern¨¢ndez, y Al Hol. M¨¢s de la mitad, menores de 12 a?os. Hay ciudadanos de 60 pa¨ªses, aunque la mayor¨ªa son de Siria o Irak. 17 ni?os y tres mujeres espa?oles (m¨¢s una marroqu¨ª, pero con hijos de padre espa?ol) est¨¢n alojados en estos campos. Fuera de ellos, las milicias kurdas custodian a cerca de 12.000 presos vinculados al ISIS, de los que en torno a 4.000 son extranjeros. Estos reos son un objetivo tradicional de grupos armados en fase de reclutamiento; de ah¨ª el riesgo de mantener a menores encarcelados junto a varones mayores de edad.
De entre los ni?os espa?oles, solo Abdurahman ha sido apartado de su progenitora y cuatro hermanos ¨DFern¨¢ndez ha acogido adem¨¢s a otros cuatro espa?oles hu¨¦rfanos¨D. Un d¨ªa despu¨¦s de ser aprehendido, los kurdos entregaron a su madre una foto para que la conservara. Ha podido visitar a su hijo una vez en los ¨²ltimos 12 meses, gracias a la presi¨®n ejercida por m¨¢s mujeres que, como ella, han visto c¨®mo las autoridades atrapaban a los cr¨ªos. ¡°Le llev¨® comida, ropa interior, cosas de aseo personal¡±, cuenta su cu?ada al tel¨¦fono. Seg¨²n lo que ha podido contar esta espa?ola a su familia desde el campamento de Al Roj, el ni?o se comporta de un modo diferente; reconoce que habla por tel¨¦fono con un uniformado a su lado, que siempre comen lo mismo, que duermen sobre las mismas s¨¢banas desde que lleg¨®... ¡°No s¨¦ c¨®mo ese ni?o va a llevar el da?o psicol¨®gico¡±, dice Kawtar. ¡°Temo que atente contra su vida¡±, a?ade.
El ¨²ltimo balance ofrecido por las Fuerzas Democr¨¢ticas Sirias (SDF, en sus siglas en ingl¨¦s) tras el ataque en la prisi¨®n de Hasaka cifra en 374 los muertos del bando yihadista, entre presos y atacantes, y 121 del kurdo, entre armados y personal del penal. Letta Tayler, responsable de la divisi¨®n de crisis y conflictos de HRW es una de las personas que mejor ha seguido el asalto. Tayler pudo contactar con j¨®venes que le relataron c¨®mo ve¨ªan morir a menores a su lado. ¡°Para empezar¡±, dice la investigadora en un intercambio de wasaps, ¡°estos ni?os nunca deber¨ªan haber sido detenidos en esta prisi¨®n¡±. ¡°Estaban recluidos en condiciones impropias para los humanos: hacinamiento, aire insuficiente, [falta de] tiempo al aire libre y cuidados, y aislados de sus familias¡±, a?ade. Seg¨²n un informe publicado el pasado viernes por HRW, que pide a las fuerzas armadas kurdas un ¡°trato humano¡± a los presos de Al Sina¡¯a, muchos de estos reos han sido trasladados ya a otras prisiones.
Existen varios centros de internamiento con menores de edad, de acuerdo a la informaci¨®n recopilada por Tayler. Adem¨¢s de la citada prisi¨®n y el centro Al Houri, en el que est¨¢n recluidos un centenar de adolescentes de una veintena de pa¨ªses como el espa?ol Abdurahman ¨D¡±es una prisi¨®n con decoraci¨®n de escaparate, un almac¨¦n de ni?os¡±, apostilla la investigadora de HRW¨D; estar¨ªa la c¨¢rcel de Alaya, tambi¨¦n junto a Qamishli, que contar¨ªa con algo m¨¢s de 30 menores, y el centro de Hela, al que se trasladan ni?os cuyas madres han sido encarceladas temporalmente por alg¨²n delito.
Organizaciones como HRW, AI o Save The Children, con una fuerte presencia en los campos, han denunciado la p¨¦rdida de la condici¨®n de v¨ªctimas de los menores reclusos. La irlandesa Fionnuala N¨ª Aol¨¢in, relatora de la ONU para derechos humanos y contra el terrorismo, lo expres¨® de este modo en un informe de mayo de 2021: ¡°[Se les considera] indignos del estatus de civil, ni?o o v¨ªctima en virtud del g¨¦nero [masculino], afiliaci¨®n religiosa [musulmana] y geograf¨ªa [Siria]¡±. Las autoridades kurdas han admitido que separan de sus familias a menores a partir de los 12 a?os, pero argumentan que su objetivo es la ¡°rehabilitaci¨®n¡±, algo rechazado por las ONG de derechos humanos por las condiciones en las que est¨¢n reclusos estos adolescentes. Diana Semaan, investigadora de AI desde L¨ªbano, se?ala en conversaci¨®n telef¨®nica que esta separaci¨®n ¡ªsin proceso judicial ni cargos o evidencias¡ª es una ¡°detenci¨®n arbitraria¡±.
Seeman denuncia tambi¨¦n la falta de informaci¨®n facilitada por los kurdos sobre el n¨²mero de ni?os recluidos, su paradero, condiciones... En efecto, las autoridades de esta regi¨®n en el noreste de Siria se han mostrado siempre esquivas a las preguntas de este diario sobre los menores. Mantienen su llamamiento a los pa¨ªses de origen a repatriar a madres e hijos nacionales. Espa?a no ha movido ficha alguna todav¨ªa.
Desde el pasado 24 de enero, d¨ªa en el que Luna Fern¨¢ndez env¨ªo una serie de mensajes, preocupada por el paradero de su hijo mayor, la comunicaci¨®n con Madrid se ha cortado. La familia no ha vuelto a saber nada.
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