?Qui¨¦n representa a Myanmar en La Haya? El dilema legal que deja un golpe de Estado
El debate en torno a la legitimaci¨®n de la junta militar que derroc¨® hace un a?o a Aung San Suu Kyi marca el inicio de la fase procesal en la denuncia por genocidio de los rohiny¨¢s
?Qui¨¦n representa a Myanmar ante la comunidad internacional: la junta militar, que gobierna tras dar un golpe de Estado el 1 febrero de 2021, o los miembros del Ejecutivo de unidad nacional, creado tres meses despu¨¦s en el exilio para luchar por el restablecimiento de la democracia? De momento, ninguno ha sido reconocido oficialmente por parte de la Asamblea General de Naciones Unidas. Ello crea una situaci¨®n compleja para el Tribunal Internacional de Justicia (TIJ) en la fase procesal de objeciones preliminares en la denuncia presentada en 2019 por Gambia contra la antigua Birmania por genocidio de la minor¨ªa musulmana rohiny¨¢, que sus jueces han comenzado a abordar este lunes.
Al inicio de la sesi¨®n, Joan Donoghue, presidenta del tribunal, record¨® que ¡°son los Estados, y no los Gobiernos, los que elevan casos ante estos jueces¡±. Acto seguido Ko Ko Hlaing, ministro de Cooperaci¨®n Internacional de la junta birmana y sancionado por Estados Unidos por el golpe militar, ha asegurado buscar ¡°que se imparta justicia de manera apropiada¡±. Las audiencias se prolongar¨¢n hasta la pr¨®xima semana.
Ko Ko Hlaing es uno de los miembros de la junta golpista que forma parte de la delegaci¨®n de Myanmar desplazada a La Haya, sede del TIJ. El Gabinete civil de unidad nacional teme que la m¨¢xima instancia judicial de la propia ONU siente un precedente si los acepta en representaci¨®n de Myanmar. Ning¨²n ¨®rgano de Naciones Unidas, como la Asamblea General o el Consejo de Seguridad, ha reconocido a la junta.
El caso es muy delicado en t¨¦rminos jur¨ªdicos, pol¨ªticos y diplom¨¢ticos. ¡°Es un problema que recibe el tribunal, puesto que dos entidades ¨Dllam¨¦moslas as¨ª¨D reclaman representar a Myanmar. De modo que los jueces podr¨ªan tener que mencionar la cuesti¨®n en su sentencia¡±, dice Asier Garrido Mu?oz, profesor de Derecho Internacional P¨²blico en la Universidad de La Haya para las Ciencias Aplicadas. El tribunal no reconoce gobiernos, pero una eventual decisi¨®n en esta materia podr¨ªa tener consecuencias para el reconocimiento por otros Estados del Gobierno golpista de Myanmar.
Seg¨²n este experto, ¡°si la corte asumiera que, a efectos procesales, el agente nombrado por la junta militar birmana es el ¨²nico autorizado para representar a Myanmar, ser¨ªa acusada de avalar el golpe de Estado¡±. Pero si hiciera lo contrario, se le reprochar¨ªa ¡°no tener en cuenta la realidad de la situaci¨®n efectiva en Myanmar y la pr¨¢ctica internacional¡±. Ambia Perveen, miembro del Consejo Rohiny¨¢ Europeo, ha se?alado a las puertas de la corte que si bien la junta militar ¡°no representa al pueblo de Myanmar, es importante que los responsables del genocidio sean juzgados¡±.
La suerte corrida por Aung San Suu Kyi, premio Nobel de la Paz en 1991 y exconsejera de Estado de Myanmar, ilustra tambi¨¦n la situaci¨®n actual. En 2019, era la l¨ªder de facto de su pa¨ªs y lo represent¨® ante el tribunal, donde rechaz¨® la acusaci¨®n de genocidio contra los rohiny¨¢ y asegur¨® que se trataba ¡°de un conflicto interno de lucha contra el terrorismo¡±.
Un a?o m¨¢s tarde, el tribunal impuso medidas cautelares para proteger a esta minor¨ªa de un posible genocidio. El Gobierno que ella representaba deb¨ªa ampararlos, pero fue depuesto por los militares en febrero de 2021. Ahora se encuentra en arresto domiciliario, condenada a dos penas de c¨¢rcel: dos a?os por incitaci¨®n a la violencia, y a otros cuatro por posesi¨®n ilegal de dispositivos de telecomunicaciones y por vulnerar las medidas contra la pandemia. A pesar de su situaci¨®n, en la p¨¢gina web oficial del Gobierno de unidad nacional aparece como parte del mismo.
¡°Soluci¨®n intermedia¡±
Garrido Mu?oz considera que, ¡°a fin de evitar males mayores, una posible soluci¨®n intermedia ser¨ªa aceptar al agente propuesto por la junta militar, pero indicando que ello se hace a efectos del litigio entre Gambia y Myanmar, y excluyendo cualquier toma de posici¨®n sobre qui¨¦n es el leg¨ªtimo Gobierno birmano¡±. A?ade que suena a tecnicismo, ¡°pero, al menos visto desde fuera, el tribunal parece encontrarse en una situaci¨®n inc¨®moda¡±.
Myamnar ha cuestionado adem¨¢s la legitimidad de Gambia porque no tiene nacionales afectados fuera de su territorio. El pa¨ªs africano pod¨ªa litigar alegando que los cr¨ªmenes contra los rohiny¨¢s violan la Convenci¨®n para la Prevenci¨®n y Sanci¨®n del Genocidio (1948), firmada por ambos pa¨ªses. Aduce, por lo tanto, que Myanmar la vulner¨® en 2017 cuando m¨¢s de 750.000 rohiny¨¢s se desplazaron desde all¨ª hacia la vecina Banglad¨¦s, huyendo de lo que la ONU calific¨® en 2020 de ¡°intento de genocidio¡±.
Christopher Staker, uno de los abogados nombrados por Myanmar, ha alegado a su vez que Gambia act¨²a ¡°por delegaci¨®n y no en nombre propio, ya que est¨¢ apoyada por los pa¨ªses de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n Isl¨¢mica¡±. Con sede en Arabia Saud¨ª, la misma agrupa a los Estados de confesi¨®n musulmana. ¡°Una organizaci¨®n internacional no puede presentar un caso a trav¨¦s de un Estado¡±, ha dicho. Su colega, Stefan Talmon, ha a?adido que el TIJ ¡°no es una instancia supervisora de la convenci¨®n contra el genocidio¡±. La decisi¨®n de los jueces puede tardar varios meses en llegar.
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