Petro domina en las encuestas seguido por un Fico Guti¨¦rrez al alza

El d¨ªa en que Gustavo Petro perdi¨® la segunda vuelta de las presidenciales colombianas de 2018 fue el d¨ªa en que comenz¨® su carrera hasta 2022. De todos los nombres que circulaban para la actual campa?a, el de Petro era el ¨²nico que todos, gobierno y oposici¨®n, moderados y radicales, seguros e indecisos daban por fijo. Los datos de las encuestas indican que el l¨ªder del Pacto Hist¨®rico ha sabido aprovechar esa ventaja de partida para convertirla en un dominio claro: uno de cada tres colombianos dicen que votar¨¢n por ¨¦l el pr¨®ximo 29 de mayo en la primera vuelta para decidir al sustituto del conservador Iv¨¢n Duque.

Fico Guti¨¦rrez, convertido en el reemplazo ideol¨®gico natural del presidente saliente, va segundo a cierta distancia, con un 24%. Eso s¨ª, su crecimiento en las ¨²ltimas semanas es el m¨¢s notable de todos los candidatos, probablemente gracias a que est¨¢ logrando unir a las muchas derechas de Colombia a su alrededor. Suficiente, por ahora, para colocarle en una eventual segunda vuelta contra Petro.

Sergio Fajardo, el candidato del centro que se qued¨® a muy pocos votos de pasar a la segunda vuelta en 2018 en lugar de Petro, est¨¢ muy por detr¨¢s. Apenas logra un 10% de los apoyos, empatado con Rodolfo Hern¨¢ndez. El exalcalde de Bucaramanga plante¨® una campa?a de corte populista, alejada de cualquier plataforma tradicional, y con un enorme esfuerzo medi¨¢tico que le coloc¨® en buena posici¨®n hasta hace unas semanas, cuando el resto de candidaturas a¨²n no estaban definidas. Ahora, tras las consultas inter-partidistas que el 13 de marzo coronaron a Petro, Guti¨¦rrez y Fajardo como referentes, parece que Hern¨¢ndez se ha estancado su crecimiento. En ¨²ltimo lugar queda la ¨²nica candidata mujer que marca en las encuestas, Ingrid Betancourt, a la que el electorado parece no reconocerle su abrupta salida de la coalici¨®n de centro con un destino poco definido.

A casi dos meses de las urnas, esta situaci¨®n debe considerarse como un punto de partida m¨¢s que como un pron¨®stico. De especial relevancia es el porcentaje de votos indefinidos que a¨²n recogen las encuestas, pese a que estas se restringen habitualmente al universo de votantes probables. Casi un quinto de ellos permanece en el ¡°no sabe, no contesta¡±, ¡°blanco¡± o ¡°nulo¡±.

Sobre el papel, este margen de incertidumbre ser¨ªa suficiente para que Gustavo Petro ganara la presidencia en primera vuelta, una hip¨®tesis que ha circulado por los mentideros pol¨ªticos de Bogot¨¢ pero que a¨²n no cuenta con soporte emp¨ªrico. De hecho, parece bastante dif¨ªcil que un solo candidato logre embolsarse todo este caudal de indefinici¨®n, as¨ª Petro presente una plataforma de victoria m¨¢s cre¨ªble y con mayor presencia medi¨¢tica que nunca.

De hecho, si hay un candidato que ha estado absorbiendo voto nuevo por encima de los dem¨¢s en las ¨²ltimas semanas no es el de izquierda, sino Federico Guti¨¦rrez. Si se compara su media previa y posterior a las consultas interpartidistas, es con diferencia el que m¨¢s ha crecido. Ciertamente, en las encuestas anteriores al 13 de marzo hab¨ªa muchos m¨¢s candidatos en liza: todos los que compet¨ªan contra Petro, Fico y Fajardo en las respectivas consultas de izquierda, derecha y centro. El punto es que es Guti¨¦rrez quien ha logrado absorber m¨¢s voto del que qued¨® hu¨¦rfano despu¨¦s de que se decantaran los diferentes bloques.

La retirada de la candidatura de ?scar Iv¨¢n Zuluaga (del Centro Democr¨¢tico, partido del presidente Duque y, especialmente, del expresidente ?lvaro Uribe), la progresiva campa?a medi¨¢tica que ha facilitado el aumento de reconocimiento de Guti¨¦rrez (a inicios de este a?o apenas un 33% de Colombia ten¨ªa una opini¨®n formada sobre el exalcalde de Medell¨ªn), y el anclaje en el dominio de Petro como foco polarizador se cuentan entre los catalizadores de Fico.

Es esta polarizaci¨®n en torno a Petro (y a cualquier posibilidad de gobierno desde la izquierda externa al establishment), as¨ª como su reflejo en torno a la derecha colombiana expresada especialmente en la figura de Uribe, la que facilita una confrontaci¨®n dual entre ¨¦l y Guti¨¦rrez. En esta pinza impl¨ªcita Sergio Fajardo se queda sin anclaje claro. Su carta de presentaci¨®n se limita a ser la alternativa para evitar precisamente esta polarizaci¨®n. Pero, una vez el voto se coordina en torno a los polos, la tendencia resulta muy dif¨ªcil de revertir, porque el incentivo al voto estrat¨¦gico que se limita a elegir bando (tambi¨¦n para evitar que el rival gane) produce una inercia que se retroalimenta.

Una divisi¨®n ideol¨®gica tan clara, por ¨²ltimo, ayuda a funcionar a las encuestas porque clarifica las candidaturas ante el elector. No hay que obviar, en cualquier caso, que los sondeos han tenido un historial desigual en Colombia. Obtuvieron muy buenos resultados en las elecciones de 2018 y tambi¨¦n en las de la alcald¨ªa de Bogot¨¢ de 2019, pero mucho peores en el plebiscito sobre los acuerdos de paz de 2016. Esto, sumado a la cantidad de votantes indecisos, su reacci¨®n ante las olas s¨²bitas de protestas que ha visto el pa¨ªs en los ¨²ltimos a?os, la cambiante pero a¨²n netamente negativa valoraci¨®n del presidente saliente y su asociaci¨®n a¨²n por definir con los candidatos entrantes, y la presencia de candidatos m¨¢s dif¨ªciles de clasificar como el propio Rodolfo Hern¨¢ndez, aconsejan cautela en la lectura de estos sondeos. Tambi¨¦n para las campa?as que van en cabeza. La carrera no ha hecho m¨¢s que empezar.

Metodolog¨ªa y fuentes

El promedio de encuestas incluye las ¨²ltimas publicadas de cada casa encuestadora registrada ante el Consejo Nacional Electoral hasta la fecha de publicaci¨®n del art¨ªculo, desde el 14 de marzo de 2022 (el d¨ªa posterior a las consultas interpartidistas que terminaron por definir las candidaturas a la presidencia. La recopilaci¨®n se recoge desde la plataforma recetas-electorales.com, y se contrasta con la publicaci¨®n en diversos medios.

Cada encuesta tiene un peso ligeramente distinto en el promedio que depende de la valoraci¨®n num¨¦rica realizada por el Sem¨¢foro de Encuestadoras de lasillavacia.com, que valora a cada una de las casas de encuestas de acuerdo con una serie de par¨¢metros t¨¦cnicos, metodol¨®gicos y de acierto en el resultado final. Para evitar sesgar en exceso el promedio, el peso asignado solo var¨ªa en un 20%, de manera que la encuesta de la encuestadora mejor valorada recibe un 100% y la peor valorada recibe un 80% de peso sobre el promedio final. Cuando una encuestadora s¨ª est¨¢ registrada ante el CNE pero no est¨¢ valorada por lasillavacia.com, el promedio le asigna un punto intermedio entre ambos extremos.

Al igual que sucede con los datos utilizados como alimento para el promedio desde las plataformas mencionadas, el c¨®digo empleado para el presente an¨¢lisis, as¨ª como sus resultados brutos a d¨ªa de hoy que sirven de base para los gr¨¢ficos elaborados, est¨¢ a disposici¨®n de cualquiera en este repositorio abierto.

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