Hungr¨ªa se enroca en Bruselas y bloquea las negociaciones sobre el embargo al petr¨®leo ruso
La UE reconoce ¡°avances¡± en las discusiones, mientras los pa¨ªses m¨¢s dependientes de los oleoductos de Mosc¨² exigen mayores ¡°garant¨ªas¡± para asegurar el abastecimiento
Hungr¨ªa sigue con su veto a la prohibici¨®n de importar crudo ruso. Las negociaciones del sexto paquete de sanciones de la UE, que incluye un embargo gradual al petr¨®leo de Rusia, han vuelto a encallar este domingo en Bruselas tras un nuevo encuentro infructuoso de los embajadores comunitarios en el Consejo (el ¨®rgano que representa a los gobiernos de los Veintisiete). Las capitales m¨¢s dependientes del oro negro de Mosc¨², capitaneadas por Budapest, siguen mostrando su rechazo y reclaman m¨¢s tiempo para desconectarse del hidrocarburo, adem¨¢s de inversiones en infraestructuras.
El embargo energ¨¦tico a la mayor partida comercial entre el bloque comunitario y Mosc¨² comienza a transformarse en un verdadero quebradero de cabeza para la UE, que ha de adoptar la medida por unanimidad. Pero los Veintisiete han querido, sin embargo, suavizar las aparentes fricciones de una negociaci¨®n ¡°dura¡± (en palabras de una fuente diplom¨¢tica de alto rango) que comenz¨® el mi¨¦rcoles pasado y ya ha dejado al aire las grietas entre los Estados miembros. Fuentes comunitarias conf¨ªan en sacar las medidas adelante en el arranque de una semana de elevada carga simb¨®lica: ma?ana lunes se celebra el d¨ªa de la UE en territorio comunitario y a la vez la gran fiesta nacional de Rusia, el D¨ªa de la Victoria.
¡°El Consejo est¨¢ unido en cuanto a la necesidad de adoptar un sexto paquete de sanciones¡±, han asegurado el Consejo y la Comisi¨®n Europea en un texto conjunto redactado tras la reuni¨®n de este domingo. Sobre la cita de los embajadores en Bruselas ha sobrevolado adem¨¢s la larga sombra del encuentro telem¨¢tico de los l¨ªderes del G-7 celebrado tambi¨¦n este domingo, y del que se esperaban posibles soluciones para desatascar las discusiones.
¡°Se han celebrado intensos debates en los ¨²ltimos d¨ªas y se ha avanzado mucho en el grueso de las medidas¡±, prosigue el texto conjunto del Consejo y la Comisi¨®n. ¡°Todav¨ªa tenemos que trabajar para ultimar, con esp¨ªritu de solidaridad, las garant¨ªas necesarias para las condiciones de abastecimiento de petr¨®leo de los Estados miembros que actualmente se encuentran en una situaci¨®n muy espec¨ªfica en lo que respecta al suministro de oleoductos desde Rusia¡±. Los contactos, a?ade, van a proseguir ¡°a todos los niveles¡± para lograr un ¡°acuerdo completo¡± a la mayor brevedad.
¡°Todo depende de un hombre en Budapest¡±, traduce a lenguaje corriente una fuente diplom¨¢tica, metida en el fragor de la discusi¨®n. ¡°Desafortunadamente, no ha habido un acuerdo hoy debido a que las conversaciones contin¨²an con Hungr¨ªa¡±, a?ade. ¡°Hay unidad pol¨ªtica de todos en las sanciones, incluida la prohibici¨®n del petr¨®leo¡±, explica otra fuente diplom¨¢tica. ¡°De eso no hay duda. Pero hace falta m¨¢s tiempo para solventar las dificultades pr¨¢cticas del desenganche y asegurar la seguridad de suministro para todos los socios comunitarios¡±.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, ya ha ido preparando el terreno para la hip¨®tesis de un escenario enquistado. El alto representante para la Pol¨ªtica Exterior de la UE asegur¨® el viernes que dar¨ªa a los embajadores que negocian en Bruselas hasta el lunes para sellar un pacto. Si el cerrojo persist¨ªa, como as¨ª ha sido, propondr¨ªa un encuentro del Consejo de Ministros de Exteriores, dijo en una entrevista al Financial Times.
La Comisi¨®n Europea ha tratado de engrasar las discusiones poniendo sobre la mesa ofertas con plazos de desconexi¨®n ampliados para Hungr¨ªa, Eslovaquia y Rep¨²blica Checa, los tres socios m¨¢s reticentes. La ¨²ltima propuesta de la que ha tenido conocimiento este diario, circulada el viernes entre los Estados miembros, concede a Budapest y Bratislava hasta final de 2024 para ejecutar el embargo al petr¨®leo ruso, y a Praga hasta junio de 2024; el resto de socios seguir¨ªan con el plan inicial del Ejecutivo comunitario de desenchufarse del crudo ruso de forma gradual en los pr¨®ximos seis meses y del suministro de productos refinados al final de este a?o.
Budapest, cuyo Gobierno lleva a?os en sinton¨ªa con Mosc¨², no tiene previsto ponerlo f¨¢cil. Viktor Orb¨¢n, el primer ministro de Hungr¨ªa, reclam¨® el viernes un per¨ªodo de transici¨®n de cinco a?os y asegur¨® que una desconexi¨®n en los t¨¦rminos que se estaban barajando ser¨ªa como lanzar ¡°una bomba at¨®mica¡± sobre la econom¨ªa de su pa¨ªs.
¡°No sabemos realmente los detalles de lo que la Comisi¨®n est¨¢ discutiendo con Hungr¨ªa. Solo que no se han puesto de acuerdo y que las conversaciones contin¨²an¡±, asevera una fuente diplom¨¢tica.
El embargo energ¨¦tico es la gran prueba de fuego de la unidad europea frente a Rusia, un bloque casi monol¨ªtico hasta que las primeras grietas comenzaron a asomar con la negociaci¨®n del veto al carb¨®n ruso, a principios de abril. Pero se trataba de una partida comercial peque?a, de 4.200 millones de euros, que logr¨® salir adelante tras varios d¨ªas de negociaciones. A su lado, el volumen del petr¨®leo es proporcional al atasco en las discusiones: se trata de la gran fuente de ingresos del Kremlin, cuyo volumen de intercambio con la UE ronda los 75.000 millones de euros, si se incluyen el crudo y los productos derivados del petr¨®leo, seg¨²n Eurostat.
La propuesta del veto al petr¨®leo ruso supone adem¨¢s un punto de tensi¨®n a?adido en la escalada de guerra energ¨¦tica entre Mosc¨² y Bruselas, un fuego cruzado en el que uno y otro amagan sus apuestas para cortar los lazos de suministro: desde la UE mediante las sanciones, desde Rusia manejando la manija de los conductos. Y cada uno juega con sus cartas. ¡°A Rusia le duele el petr¨®leo, a la UE le duele el gas¡±, asegura una fuente del Ejecutivo comunitario.
El sexto paquete de sanciones se puso en marcha despu¨¦s de que el gigante Gazprom decidiera cortar el flujo de gas a Polonia y Bulgaria por negarse a pagarlo en rublos, tal y como exige Mosc¨² desde finales de marzo de forma unilateral. La Comisi¨®n Europea teme que el esquema se pueda repetir con los vencimientos de pago de otros Estados miembros que se esperan a mediados y finales de mayo, y prepara a la carrera planes de emergencia para hacer frente a eventuales cortes totales y parciales de suministro, con medidas de racionamiento incluidas.
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