Pa¨ªses Bajos pide disculpas a sus cascos azules por una ¡°misi¨®n que devino imposible¡± en Srebrenica
El Gobierno holand¨¦s rehabilita a los soldados enviados en 1995 a proteger a los 8.000 musulmanes bosnios v¨ªctimas del genocidio perpetrado por las tropas serbias durante la guerra de Bosnia
El Gobierno holand¨¦s ha pedido este s¨¢bado disculpas a los soldados enviados en 1995 a la localidad bosnia de Srebrenica a una ¡°misi¨®n que devino imposible¡±, y tambi¨¦n por ¡°la falta de apoyo posterior¡±, en palabras del primer ministro, Mark Rutte. Es la primera vez que el Ejecutivo reconoce lo ocurrido con los cascos azules del batall¨®n Dutchbat III, encargado de proteger a los refugiados musulmanes bosnios cercados por las tropas serbias del entonces general Ratko Mladic. Cerca de 850 veteranos holandeses han sido se?alados durante 27 a?os por no haber sabido defender a los 8.000 varones musulmanes bosnios v¨ªctimas del genocidio de Srebrenica. La mayor masacre cometida en suelo europeo desde la Segunda Guerra Mundial.
La rehabilitaci¨®n oficial ha tenido lugar en el curso de una ceremonia con honores militares celebrada en un cuartel situado al este del pa¨ªs. Mark Rutte, ha admitido que el recuerdo de lo ocurrido en 1995 sigue tan vivo como el primer d¨ªa. ¡°El mandato de mantenimiento de la paz era de Naciones Unidas, pero el Estado holand¨¦s tiene su responsabilidad [en 2002, el Gobierno present¨® su dimisi¨®n siete a?os despu¨¦s de los hechos]. Todo y todos os dejaron solos, y recibisteis cr¨ªticas por no haber podido cumplir la tarea encargada: proteger a los civiles y defender la democracia.¡±, ha dicho. Por su parte, la ministra de Defensa, Kasja Ollongren, ha reconocido que cuando sus soldados pidieron ayuda no lleg¨®, ¡°y estabais frente al Ej¨¦rcito serbio junto con miles de refugiados a vuestro cargo¡±. Ha a?adido esto: ¡°Al regreso, tampoco hubo apoyo adecuado por parte de Defensa. Hoy reconocemos vuestro dolor y lo hacemos sin olvidar a las v¨ªctimas del genocidio, perpetrado a las ¨®rdenes de Mladic¡±. Los veteranos han recibido la Medalla de Honor de Defensa, en bronce, que reconoce una contribuci¨®n especial.
El promedio de edad de los cascos azules destacados en Srebrenica era de 18 y 19 a?os, y Freerk Meuken, uno de ellos, ha asistido al acto de este s¨¢bado. En conversaci¨®n telef¨®nica, dice que las excusas le han parecido sinceras ¡°y pueden marcar el principio de la recuperaci¨®n de la confianza con Defensa, y tambi¨¦n con las familias de las v¨ªctimas, en Srebrenica¡±. Seg¨²n afirma, ¡°durante los primeros diez o quince a?os fue imposible el di¨¢logo entre ellos y los supervivientes. Hab¨ªa demasiado dolor y reproches mutuos, pero la culpa es de los pol¨ªticos y eso es algo que tenemos en com¨²n¡±, afirma.
¡°Solos¡±
De 50 a?os hoy, licenciado en magisterio y enfermero, Meuken se ocupaba del transporte m¨¦dico entre Srebrenica y Potocari, la localidad vecina que albergaba el cuartel general del Ducthbat III. ¡°Cumpl¨ª 24 a?os all¨ª y era de los mayores. Se puede entrenar a un militar, pero lo que afrontamos fue una crisis humanitaria que deriv¨® en tragedia, y nos dejaron solos. Cuando entraron las tropas serbias con todo su arsenal, ¨¦ramos unos 330 cascos azules con pocas armas¡±, explica. Como el resto de sus colegas, sus recuerdos de la primera quincena de julio de 1995, cuando se cometi¨® el genocidio, siguen intactos. Seg¨²n cuenta, el primer d¨ªa, cuando los mandos serbios ordenaron separar a los hombres de las mujeres, ni?os y ancianos, no imaginaron lo que se avecinaba.
¡°Nos dijeron que los llevar¨ªan a Tuzla [situada a unos 100 kil¨®metros de Srebrenica] y all¨ª estar¨ªan bien. Cuando los colegas que estaban en los puestos de vigilancia vieron cad¨¢veres, insistimos en conducir nosotros los autobuses donde viajaban los refugiados, pero los soldados serbios nos lo impidieron a punta de pistola¡±. Aqu¨ª, repite una frase conocida en su batall¨®n. Dice as¨ª: ¡°Esto es como La Lista de Schindler, pero en tecnicolor¡±. Se refiere a la pel¨ªcula del mismo t¨ªtulo del director estadounidense Steven Spielberg, centrada en la Segunda Guerra Mundial y el genocidio de los jud¨ªos por los nazis. Meuken admite que todav¨ªa hoy se preguntan cu¨¢l es la verdad de lo ocurrido. ¡°Por qu¨¦ no llegaron los refuerzos pedidos repetidas veces por nuestros mandos. Por qu¨¦ la ONU dijo que habr¨ªa bombardeos, luego cancelados¡±.
En 2021, una investigaci¨®n llevada a cabo por el Centro Nacional holand¨¦s de Trauma Ps¨ªquico, constat¨® los problemas de estr¨¦s postraum¨¢tico arrastrados por la mayor¨ªa de los veteranos del Dutchbat III. Lo padec¨ªan entre un 60% y un 70%, cuando la cifra habitual despu¨¦s de una misi¨®n militar ronda el 5%. Defensa resolvi¨® entonces compensarles con 5.000 euros y prometi¨® tener un gesto especial para con ellos.
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