Nancy Pelosi planea visitar Taiw¨¢n pese a las amenazas chinas

Nancy Pelosi est¨¢ decidida a visitar Taiw¨¢n. La presidenta de la C¨¢mara de Representantes de Estados Unidos inici¨® el domingo un pol¨¦mico viaje por la regi¨®n de Asia-Pac¨ªfico en cuyo itinerario oficial no figuraba la isla. Pero la escala se daba por hecha este lunes en los medios estadounidenses, despu¨¦s de que fuentes an¨®nimas de la Casa Blanca confirmaran esos planes pese a las serias amenazas chinas. Su presidente, Xi Jinping, alert¨® a Joe Biden el pasado jueves en una videollamada que ese viaje equivaldr¨ªa a ¡°jugar con fuego¡±. La tensi¨®n entre ambas potencias no deja de crecer ante la sola idea de que Pelosi ponga un pie en un territorio que Pek¨ªn considera suyo, y, por tanto, inhabilitado para mantener relaciones internacionales de manera independiente.

John Kirby, portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, se ha sumado a la conferencia de prensa diaria que de costumbre ofrece en solitario Karine Jean-Pierre para tratar de quitarle hierro a la crisis. Kirby ha asegurado que no tienen confirmaci¨®n de que Pelosi vaya a viajar. ¡°Pero si va, si decide ir, no ser¨ªa algo sin precedentes. La presidenta [de la C¨¢mara de Representantes] es libre de tomar sus decisiones e ir a Taiw¨¢n, como lo es cualquier miembro del Congreso. Nosotros nos limitamos a darle informaci¨®n sobre su seguridad. Si finalmente se produce esa visita, nada cambiar¨¢ en nuestra actitud hacia la isla. No hay ning¨²n drama¡±, ha afirmado.

El secretario de Estado, Antony Blinken, ha abundado en Nueva York, por su parte, en la idea de que la Administraci¨®n de Joe Biden no tiene constancia de que la decisi¨®n est¨¦ tomada. ¡°Conf¨ªo en que China act¨²e con responsabilidad y que no contribuya a una escalada de la tensi¨®n¡±, ha a?adido. Seg¨²n el digital Nikkei Asia, el Ej¨¦rcito estadounidense est¨¢ acercando a Taiw¨¢n fuerzas militares, incluidos portaaviones.

Desde Pek¨ªn, la respuesta ha dejado poco espacio a la imaginaci¨®n: China ha reiterado este lunes que si Pelosi pone un pie en la isla, habr¨¢ ¡°medidas contundentes¡±. Su ministerio de Exteriores ha reiterado este lunes que el Ej¨¦rcito Popular de Liberaci¨®n ¨C¨Dque celebraba ese d¨ªa su 95? aniversario¨D no se quedar¨¢ de ¡°brazos cruzados¡± y ¡°adoptar¨¢ medidas contundentes¡± si ¡°la n¨²mero tres del Gobierno estadounidense¡± viaja a Taiw¨¢n. A la pregunta de qu¨¦ tipo de r¨¦plica se podr¨ªa esperar por parte del Ej¨¦rcito chino, el portavoz de la Canciller¨ªa Zhao Lijian ha respondido: ¡°Si se atreve a ir, entonces esperemos y veamos¡±.

Un encuentro de tan alto nivel ¨Del primero en 25 a?os desde la visita del republicano Newt Gingrich, con Bill Clinton en la Casa Blanca¡ª ser¨ªa considerado una aut¨¦ntica provocaci¨®n por parte de China. Pek¨ªn se opone firmemente a cualquier muestra de apoyo a la independencia de Taiw¨¢n por parte de Estados Unidos y ha prometido que no titubear¨¢ en caso de que eso ocurra. El propio Xi Jinping advirti¨® el pasado jueves a su hom¨®logo durante la llamada telef¨®nica entre ambos que EE UU no deber¨ªa ¡°cuestionar la firme voluntad de los 1.400 millones de chinos¡±. La cuesti¨®n de Taiw¨¢n, uno de los temas que genera m¨¢s desencuentros y tensiones entre los dos gobiernos, ocup¨® gran parte de las dos horas y 17 minutos de conversaci¨®n entre los dos mandatarios.

La jornada comenz¨® con el mensaje de un reportero de la televisi¨®n taiwanesa TVBS en su cuenta de Twitter, en el que informaba que se espera que la legisladora dem¨®crata aterrice el martes por la noche en la isla. La cadena CNN confirm¨® ese extremo citando ¡°a un alto funcionario del Gobierno taiwan¨¦s y a un funcionario estadounidense¡±. Biden comparti¨® la semana pasada la preocupaci¨®n del Pent¨¢gono por un viaje que plantea serias cuestiones de seguridad. Funcionarios en Washington han atribuido a esas preocupaciones el hecho de que la escala no figurara en el plan inicial del viaje. Lo contrario habr¨ªa dado pistas a Pek¨ªn sobre los movimientos de Pelosi. Biden, que ejerci¨® como senador durante 36 a?os, es un firme creyente en la independencia del poder Legislativo frente al Ejecutivo, de ah¨ª que, seg¨²n varios analistas, no haya presionado m¨¢s a Pelosi para hacerle cambiar de idea. Kirby ha asegurado a los medios que durante la llamada de la semana pasada, el l¨ªder estadounidense ¡°se lo dej¨® claro¡± a Xi.

Pelosi y su delegaci¨®n de congresistas estaban este lunes en Singapur, la primera parada de su pol¨¦mica gira asi¨¢tica. Se baraja que el martes lleguen a Taip¨¦i, donde la veterana pol¨ªtica se reunir¨¢ el mi¨¦rcoles, si los planes se cumplen, con la presidenta taiwanesa Tsai Ing-wen. Ni la Oficina Presidencial ni el Ministerio de Exteriores taiwan¨¦s han hecho comentarios al respecto.

¡°Creemos que Estados Unidos ha entendido el mensaje fuerte y claro que China envi¨® [el jueves]. Si Pelosi visita Taiw¨¢n ser¨¢ una intromisi¨®n atroz en los asuntos internos de China, que socavar¨¢ gravemente la soberan¨ªa e integridad territorial, pisotear¨¢ de forma gratuita el principio de Una Sola China, amenazar¨¢ seriamente la paz y estabilidad en el estrecho de Taiw¨¢n y da?ar¨¢ profundamente las relaciones sino-estadounidenses¡±, ha avisado el portavoz del Gobierno chino. ¡°La parte estadounidense deber¨ªa honrar la promesa del presidente Biden de que no apoyar¨¢ la independencia de Taiw¨¢n¡±, ha a?adido Zhao.

La fuente gubernamental estadounidense citada por CNN afirma que en el Departamento de Defensa est¨¢n trabajando a contrarreloj para monitorear cualquier movimiento del Ej¨¦rcito chino en la regi¨®n. Al tratarse Pelosi de la segunda personalidad en la l¨ªnea de sucesi¨®n presidencial (tras la vicepresidenta, Kamala Harris), su avi¨®n vuela bajo los m¨¢s estrictos protocolos de seguridad.

Para Pek¨ªn, que altos funcionarios estadounidenses visiten la isla autogobernada env¨ªa un mensaje de apoyo a la campa?a de independencia taiwanesa. Desde que restablecieron sus relaciones bilaterales en 1979, los lazos de las dos mayores econom¨ªas del planeta se basan en el principio de Una Sola China, que implica precisamente eso: China no hay m¨¢s que una, y esta incluye a Taiw¨¢n, donde se refugiaron en 1949 las tropas nacionalistas derrotadas por el ej¨¦rcito comunista en la guerra civil. No obstante, para Washington la expresi¨®n significa solo que reconoce el Gobierno de Pek¨ªn como representante de China y que el estatus de Taiw¨¢n no est¨¢ determinado. Con Taip¨¦i mantiene una ¡°ambig¨¹edad estrat¨¦gica¡±: le vende armamento para su autodefensa y el propio Biden se ha declarado dispuesto en un par de ocasiones a prestarle asistencia militar en caso de ataque.

Desde que Tsai Ing Weng, partidaria de un alejamiento de Pek¨ªn, fue elegida presidenta de Taiw¨¢n en 2016, la ret¨®rica de las autoridades chinas es cada vez m¨¢s asertiva sobre una futura unificaci¨®n, que consideran ¡°inevitable¡±. El viaje de Pelosi ha llevado al Gobierno de Xi Jinping a elevar el tono. El l¨ªder chino puede permitirse menos flaquezas que nunca, a las puertas de la celebraci¨®n del 20? Congreso del Partido Comunista, en el que se espera sea reelegido para un tercer mandato sin precedentes desde Mao Zedong.

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