El Kremlin silencia el dolor de las mujeres rusas que critican la guerra de Ucrania

Muchas madres rusas exigen respuestas y ropa de invierno para sus hijos en Ucrania. Pero en la mesa donde este viernes se sentaron 17 de ellas con el presidente Vlad¨ªmir Putin no se escuch¨® ninguna protesta contra el Gobierno. El mandatario, consciente de que su futuro tambi¨¦n depende de la opini¨®n de millones de ciudadanos de a pie, escenific¨® el encuentro para mostrar su preocupaci¨®n ante las miles de mujeres que aguardan con ansiedad la vuelta de los suyos. Fue una reuni¨®n medida al detalle: emitida en diferido, con varias pol¨ªticas afines al Kremlin entre las convocadas, todas ellas madres de voluntarios y militares profesionales supuestamente encantados de ir al frente. Fuera quedaron las que han protestado en las ¨²ltimas semanas porque les han arrebatado a sus hijos con la movilizaci¨®n forzosa decretada a finales de septiembre. El l¨ªder ruso responde as¨ª al creciente descontento de muchos hombres y mujeres con familiares en el frente.

¡°Muchas gracias, Vlad¨ªmir Vlad¨ªmirovich¡±, fue el principal mensaje de todas las presentes cada vez que llegaba su turno. El clima de aquella conversaci¨®n se resume en el momento en el que una asistente se dirigi¨® al l¨ªder ruso para alabar su ofensiva. ¡°Gracias, como madre, por defender nuestra patria¡±, le dijo la mujer, vestida de uniforme con varias medallas en la solapa. ¡°Hacemos lo correcto para defender la Federaci¨®n de Rusia de los fascistas¡±, le respondi¨® Putin.

Dos d¨ªas antes, el Consejo de Madres y Esposas, un movimiento de familiares formado a ra¨ªz de la movilizaci¨®n, se hab¨ªa dirigido a Putin a trav¨¦s de las redes sociales para exigirle un encuentro con esas otras mujeres que no quer¨ªan la guerra en sus hogares. ¡°Vlad¨ªmir Vlad¨ªmirovich, ?eres un hombre o qu¨¦? Tenga el coraje de reunirse cara a cara, no con mujeres de su bolsillo con un acuerdo, sino con las mujeres reales que han venido a Mosc¨² de diferentes ciudades¡±, reclamaba a trav¨¦s de un v¨ªdeo Olga Tsukanova, impulsora del grupo. Ninguna de ellas fue invitada al acto del viernes.

Seg¨²n afirm¨® el presidente ruso, su ej¨¦rcito ¡°tiene en cuenta sus p¨¦rdidas¡± y apenas ocupa un 38% de las camas de sus hospitales militares, mientras que el ucranio ¡°es utilizado como carne de ca?¨®n¡± y ¡°dispara a quienes se retiran de sus posiciones¡±. Sin embargo, el Ministerio de Defensa solo ha ofrecido tres veces una cifra oficial de v¨ªctimas entre sus fuerzas. La ¨²ltima, el 21 de septiembre, aseguraba que apenas hab¨ªan tenido 5.937 fallecidos frente a unos 60.000 ucranios. Las cifras occidentales, sin embargo, elevan esas p¨¦rdidas varias veces y las sit¨²an a la misma altura que las ucranias. Mark Milley, jefe del Estado Mayor de EE UU, asegur¨® el pasado 10 de noviembre que estimaba que el n¨²mero de soldados rusos muertos y heridos ascend¨ªa a unos 100.000, una cifra equivalente a la del bando ucranio.

¡°La victoria es nuestra¡±, dijo otra madre que quiso mandar un mensaje ¡°a quienes dudan de Rusia¡±. Antes, el mandatario hab¨ªa recalcado que aquellas madres eran un ejemplo. ¡°Todo proviene de la familia¡±, subray¨® Putin al inicio de su intervenci¨®n, al resaltar que sus hijos ¡°eligieron defender a la patria; proteger a nuestro pueblo, en este caso Novorossiya, Donb¨¢s, gracias al ejemplo personal¡± de sus padres, ¡°no por ninguna orden o moralizaci¨®n¡±.

La reuni¨®n se celebr¨® en la residencia presidencial de Novo-Ogariovo, y pronto fueron identificadas varias pol¨ªticas del r¨¦gimen entre las asistentes: Olga B¨¦ltseva, diputada del partido de Putin, Rusia Unida; Yulia B¨¦lejova, jefa del comit¨¦ ejecutivo en Mosc¨² del Frente Popular de Toda Rusia; Marina Migunova, miembro de la C¨¢mara Social de Orejovo-Zuevo; Irina Tas-Ool, jefa del Departamento de Familia de un distrito de Tuva; y Nadezhda Uzunova, responsable del movimiento Hermandad de Combate. Adem¨¢s, junto a Putin se sent¨® una cineasta que dirige pel¨ªculas patri¨®ticas, Olesya Sh¨ªguina.

La reuni¨®n hab¨ªa sido programada en la v¨ªspera del D¨ªa de la Madre en Rusia, y a ella no fueron invitadas las representantes de muchos otros hogares afectados por la guerra. Seg¨²n un c¨¢lculo conservador, por Ucrania podr¨ªan pasar m¨¢s de 400.000 rusos: los m¨¢s de 100.000 profesionales de las Fuerzas Armadas desplegados antes de la invasi¨®n, seg¨²n las fuentes de inteligencia occidentales, y m¨¢s de 300.000 de civiles movilizados desde septiembre, seg¨²n las cifras oficiales del Kremlin.

¡°Tenga el coraje de reunirse cara a cara¡±

El tono del Consejo de Madres y Esposas era infinitamente m¨¢s duro que el de las madres de soldados reunidas por Putin. ¡°Hemos venido para conocer la verdad de nuestros maridos, hijos, hermanos. No exigimos nada sobrenatural, solo queremos saber la verdad¡±, lamentaba en el canal de Telegram de ese movimiento Daria, una de las mujeres afectadas. ¡°?D¨®nde est¨¢n? ?C¨®mo est¨¢n? Vestimos nosotros a nuestros soldados¡±, denunciaba tras llegar a la capital procedente de Lipetsk.

Este tema pas¨® de puntillas durante el encuentro. ¡°Mi hijo me escribe que necesita esto, esto y esto. En Krasnodar hay buenas tiendas y se lo env¨ªo¡±, le dijo una madre a Putin, quien apenas respondi¨® con promesas: ¡°Hablo de esto cada d¨ªa con el Ministerio de Defensa¡±.

Tampoco fue invitado al evento ning¨²n representante de una ONG muy venerada en Rusia, el Comit¨¦ de Madres de Soldados de Rusia. ¡°Si nos llaman, nos lo pensaremos. ?De qu¨¦ deber¨ªamos hablar con Putin? Somos una organizaci¨®n para la paz¡±, dijo al diario Viorstka la secretaria ejecutiva de la fundaci¨®n, Valentina Meln¨ªkova. La misi¨®n de esta ONG es aconsejar y ofrecer asistencia legal a los militares en casos de abusos dentro del ej¨¦rcito.

En su breve intervenci¨®n inicial, Putin admiti¨® que ya hab¨ªa conversado en el pasado con algunas de las mujeres presentes en la mesa y con sus hijos: ¡°A veces hablo directamente por tel¨¦fono con ellos, con los muchachos. Algunos me sorprendieron por su estado de ¨¢nimo, por c¨®mo tratan este asunto. No esperaban mis llamadas, hechas tambi¨¦n a trav¨¦s de sus madres, por cierto. Tengo razones para decir que son h¨¦roes¡±.

Una de las principales quejas ha sido el reclutamiento de minor¨ªas. Putin aprovech¨® el encuentro para decir que ¡°todas las etnias son iguales y se ayudan¡± en la guerra. Adem¨¢s, brome¨® con el recuerdo de la segunda guerra de Chechenia al hablar del alistamiento en el C¨¢ucaso. ¡°La gente de all¨ª tiene un temperamento especial, lo s¨¦ muy bien de 1999¡å, dijo el mandatario.

Las novias y madres de los movilizados han tenido un papel muy relevante en las protestas que siguieron al decreto de Putin del 21 de septiembre. En Daguest¨¢n y en Kabardino-Balkaria, dos regiones donde el reclutamiento ha sido m¨¢s intenso, cientos de ellas tomaron las calles e hicieron frente a las fuerzas de seguridad, que llegaron a disparar al aire. ¡°Env¨ªen a los suyos all¨ª¡± y ¡°¡®?No a la guerra!¡± fueron algunos de sus gritos en v¨ªdeos que se hicieron virales.

Seg¨²n inform¨® el Kremlin, algunos hijos de las invitadas han muerto o resultado heridos en Ucrania. Uno de ellos, el hijo de Irina Tas-Ool, de Tuva, ha sido declarado inv¨¢lido: pas¨® seis meses en un hospital tras ser aplastado por un veh¨ªculo que volc¨® por una explosi¨®n, y ahora contin¨²a su rehabilitaci¨®n en otra cl¨ªnica.

Al menos tres de las presentes perdieron a los suyos en Ucrania. En el caso de Galia Suj¨®vskaya perdi¨® a su ¨²nico hijo, que fue condecorado p¨®stumamente con la Orden al Valor tras morir en Bucha en marzo y dej¨® esposa y una hija. El hijo de Nina Pshen¨ªchkina muri¨® antes de la invasi¨®n total de febrero, falleci¨® en 2019 tras servir cinco a?os bajo el paraguas de la autoproclamada ¡°Rep¨²blica Popular de Lugansk¡±.

Putin, adem¨¢s, lament¨® no haberse anexionado antes Donb¨¢s. ¡°En cuanto a 2014, todos somos inteligentes en retrospectiva¡±, admiti¨® ante las madres que aplaudieron al presidente por su guerra.

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