Xi Jinping quiere convertir el Ej¨¦rcito chino en una ¡°gran muralla de acero¡±
El presidente defiende en la clausura de la Asamblea Nacional la ¡°autosuficiencia tecnol¨®gica¡± en plena carrera con Estados Unidos
Los actuales tiempos convulsos, de creciente tensi¨®n militar, competici¨®n tecnol¨®gica, desconfianza mutua y malentendidos al acecho entre las dos grandes potencias planetarias, parecen exigir un nuevo paradigma de seguridad y defensa por parte de Pek¨ªn. El presidente de China, Xi Jinping, ha asegurado este lunes que pretende modernizar el Ej¨¦rcito Popular de Liberaci¨®n para convertirlo en ¡°una gran muralla de acero¡± capaz de gar...
Los actuales tiempos convulsos, de creciente tensi¨®n militar, competici¨®n tecnol¨®gica, desconfianza mutua y malentendidos al acecho entre las dos grandes potencias planetarias, parecen exigir un nuevo paradigma de seguridad y defensa por parte de Pek¨ªn. El presidente de China, Xi Jinping, ha asegurado este lunes que pretende modernizar el Ej¨¦rcito Popular de Liberaci¨®n para convertirlo en ¡°una gran muralla de acero¡± capaz de garantizar la soberan¨ªa nacional y el desarrollo del pa¨ªs, seg¨²n ha afirmado durante el discurso de clausura de la Asamblea Popular Nacional (el legislativo chino).
En su intervenci¨®n, la primera que pronuncia tras hacer historia al asegurarse la jefatura del Estado para un tercer mandato, ha reiterado la idea de que la Rep¨²blica Popular no estar¨¢ completa hasta la reunificaci¨®n de Taiw¨¢n. Ha reclamado ¡°promover el desarrollo pac¨ªfico de las relaciones entre ambos lados del Estrecho¡±, como es costumbre, pero ha a?adido que se opondr¨¢ ¡°radicalmente a la injerencia de fuerzas externas y a las actividades secesionistas independentistas de Taiw¨¢n¡±. La referencia a esta cuesti¨®n ¡°esencial¡± para la Rep¨²blica Popular ha recibido el aplauso m¨¢s largo de los casi 3.000 diputados sentados en las tripas del Gran Sal¨®n del Pueblo, en la plaza de Tiananm¨¦n.
En lo que podr¨ªa interpretarse como una reducci¨®n intencionada en los decibelios diplom¨¢ticos, Xi no ha hecho en esta ocasi¨®n una referencia expl¨ªcita ¡°al uso de la fuerza armada¡± como ¨²ltimo recurso, aviso por el que opt¨® durante el c¨®nclave de octubre en el que fue coronado al frente del Partido Comunista.
El enclave democr¨¢tico de Taiw¨¢n, en estado de ebullici¨®n desde la visita el pasado verano de la entonces presidenta de la C¨¢mara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi, es uno de los puntos de fricci¨®n donde cobran forma tangible las relaciones diplom¨¢ticas hechas jirones entre Washington y Pek¨ªn, llevadas a un nuevo l¨ªmite hace apenas un mes tras el derribo por parte de Washington de un globo chino que surcaba territorio estadounidense sin permiso.
Xi tambi¨¦n ha hecho menci¨®n a la carrera tecnol¨®gica, otro de esos asuntos cr¨ªticos en la pugna global con Estados Unidos. El presidente ha asegurado que el pa¨ªs ha de buscar un ¡°crecimiento de alta calidad¡±, apostar por el ¡°desarrollo guiado por la innovaci¨®n¡± y perseguir la ¡°autosuficiencia cient¨ªfica y tecnol¨®gica¡±.
Sus palabras han rebajado el tono tras la l¨ªnea afilada que hab¨ªa marcado la semana pasada para denunciar la creciente presi¨®n estadounidense en ¨¢mbitos que van de las sanciones comerciales al bloqueo en el sector de los microchips avanzados. El presidente Xi ¡ªpoco dado a los se?alamientos directos¡ª denunci¨® el lunes pasado la estrategia de Washington dirigida a frenar el ascenso de China. ¡°Los pa¨ªses occidentales, encabezados por Estados Unidos, est¨¢n implementando una contenci¨®n y una supresi¨®n total de China, lo que implica desaf¨ªos sin precedentes para nuestro desarrollo¡±, dijo. El nuevo ministro de Exteriores, Qin Gang, a?adi¨® el martes que si Estados Unidos ¡°no pisa el freno¡± hay riesgo de ¡°conflicto¡±.
En su discurso de este lunes, Xi ha prometido que el desarrollo y la seguridad ir¨¢n de la mano en esta nueva era. ¡°La seguridad es la base del desarrollo, y la estabilidad es la condici¨®n previa de la prosperidad¡±, ha dicho.
El l¨ªder con m¨¢s poder desde los tiempos de Mao Zedong ha revalidado tambi¨¦n estos d¨ªas la batuta de mando de la Comisi¨®n Militar Central, el m¨¢ximo ¨®rgano castrense del pa¨ªs, en una sesi¨®n parlamentaria en la que se ha completado el cambio en los puestos clave del Consejo de Estado (el Ejecutivo) con el nombramiento de personas de absoluta confianza de Xi. De este modo, el presidente ha consolidado el control sobre los tres estamentos clave del pa¨ªs: el partido, el Gobierno y el Ej¨¦rcito.
Durante algo m¨¢s de una semana, esta C¨¢mara sin verdadero poder de fiscalizaci¨®n y controlada por el Partido Comunista, ha aprobado con mayor¨ªas m¨¢s que absolutas los nuevos cargos, el presupuesto para 2023 ¨Dque prev¨¦ un crecimiento del gasto en Defensa del 7,2%, el mayor en cuatro a?os¨D y el informe de trabajo del Gobierno, que estima el crecimiento en el entorno del 5% para este a?o. El plenario tambi¨¦n ha votado sin fisuras a favor de diversas reformas dirigidas a garantizar el control del partido sobre sectores cr¨ªticos como el tecnol¨®gico, donde la fabricaci¨®n nacional de semiconductores se ha convertido en una cuesti¨®n existencial, y el financiero, acosado por las dudas y la deuda del renqueante sector inmobiliario chino.
Comparecencia del nuevo primer ministro
La segunda potencia mundial tambi¨¦n se enfrenta a varios retos sociales, como una alta tasa de desempleo juvenil, la ca¨ªda de la natalidad y el r¨¢pido envejecimiento de la poblaci¨®n. Si bien el horizonte que se vislumbra despu¨¦s de tres a?os de f¨¦rrea lucha contra la covid-19 parece incierto, el primer ministro, Li Qiang, lo tiene claro: ¡°China avanza contra viento y marea hacia un futuro mejor¡±. El nuevo jefe del Ejecutivo, ratificado el s¨¢bado en el cargo, ha utilizado este lunes su primera comparecencia ante los medios para transmitir un mensaje positivo sobre el porvenir de la potencia asi¨¢tica y tranquilizar al sector privado.
Li, que ha labrado su carrera en los principales vectores econ¨®micos de la naci¨®n, ha hecho este lunes varias menciones a su larga trayectoria en contacto con la empresa privada y ha asegurado estar ¡°bien informado de sus aspiraciones y de las dificultades que enfrenta para su desarrollo¡±. El sector privado se ha visto sacudido en los ¨²ltimos a?os por un aumento del escrutinio del Partido Comunista y una gran presi¨®n reguladora con medidas que han golpeado especialmente a las plataformas de internet. A pesar de que Li ha prometido que el Gobierno ofrecer¨¢ un trato igualitario a todo tipo de compa?¨ªas, su conocida lealtad a Xi Jinping genera dudas sobre si realmente ejercer¨¢ de contrapeso en medio del creciente control del sector.
En los ¨²ltimos d¨ªas, el presidente ha reforzado un mensaje de cortejo hacia la empresa privada. ¡°Pertenecen a nuestra propia familia¡±, dijo la semana pasada en un encuentro con asociaciones de la industria y el comercio. Pero algunos analistas estiman que los cambios aprobados en la sesi¨®n parlamentaria derivar¨¢n en el refuerzo del partido dentro de las compa?¨ªas.
En cuanto a los objetivos y prioridades del nuevo Gobierno, Li ha destacado el ¡°desarrollo de alta calidad¡±, basado en la innovaci¨®n cient¨ªfica y tecnol¨®gica, as¨ª como ¡°garantizar que el crecimiento econ¨®mico, el empleo y los precios se mantienen estables¡±, aunque no ha especificado medidas para lograrlo. ¡°La soluci¨®n para crear trabajo es el desarrollo econ¨®mico¡±, se ha limitado a decir.
Ante la atenta mirada de los periodistas congregados en el imponente Sal¨®n Dorado del Gran Sal¨®n del Pueblo, el jefe del Ejecutivo chino ha admitido que para alcanzar el objetivo del 5% de crecimiento econ¨®mico fijado para 2023, el pa¨ªs tendr¨¢ que ¡°redoblar esfuerzos¡±, pero ha aseverado que el progreso de China ¡°est¨¢ respaldado por m¨²ltiples ventajas¡±, como ¡°un gran mercado, un sistema industrial completo, mano de obra abundante, una base s¨®lida para el desarrollo y, lo m¨¢s importante, su fortaleza institucional¡±. ¡°El pueblo chino siempre ha superado las adversidades de los tiempos dif¨ªciles y ha creado bellos milagros¡±, ha subrayado.
En la rueda de prensa del premier, que marca el punto final de la cita anual m¨¢s importante del calendario pol¨ªtico chino, se han echado en falta propuestas econ¨®micas concretas, pero ha servido para mostrar un tono m¨¢s conciliador hacia Estados Unidos, especialmente si se compara con las contundentes respuestas que el nuevo ministro de Exteriores, Qin Gang, dio el pasado martes a la prensa. Aunque tambi¨¦n ha indicado que ¡°la contenci¨®n y la supresi¨®n no beneficia a nadie¡±, Li ha optado por manifestar que Pek¨ªn y Washington ¡°pueden y deben cooperar¡±. ¡°China y Estados Unidos est¨¢n estrechamente entrelazados econ¨®micamente y ambos se han beneficiado del desarrollo del otro¡±, ha se?alado.
Li tampoco ha querido dejar pasar la ocasi¨®n para ¡°transmitir el importante consenso que alcanzaron los presidentes Xi Jinping y Joe Biden en su reuni¨®n de noviembre [celebrada en el marco de la cumbre del G-20 en Bali, Indonesia]¡±, acuerdos que, en su opini¨®n, ¡°deber¨ªan traducirse en acciones y pol¨ªticas concretas [por parte de Estados Unidos]¡±. Con respecto a Taiw¨¢n, ha optado por un tono pragm¨¢tico y basado en los negocios: ¡°Los chinos a ambos lados del Estrecho pertenecen a la misma familia y compartimos un v¨ªnculo inquebrantable. Invitamos a los compatriotas de Taiw¨¢n a que vengan a la parte continental y se integren con la comunidad local¡±.
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