El expresidente de Kosovo Tha?i se declara no culpable de cr¨ªmenes contra la humanidad en La Haya
Arranca el juicio contra el pol¨ªtico y tres de sus aliados en el Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n de Kosovo por la muerte de un centenar de personas entre 1998 y 1999
¡°Entiendo los cargos y no soy culpable¡±, ha dicho este lunes Hashim Tha?i, de 54 a?os, expresidente de Kosovo, en la apertura del juicio en el que se le acusa de 10 cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad ante el Tribunal Especial para Kosovo, con sede en La Haya. Los cr¨ªmenes que se le imputan se cometieron entre 1998 y 1999, durante el conflicto que enfrent¨® al Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n de Kosovo (ELK) ¨Dfundado por Tha?i¨D con las tropas serbias de la extinta Rep¨²blica de Yugoslavia. A pesar del tiempo transcurrido, este proceso es uno de los m¨¢s importantes derivados de las guerras de los Balcanes (1991-2001). En Kosovo perdieron la vida unas 13.000 personas y hubo m¨¢s de un mill¨®n de refugiados. La Fiscal¨ªa acusa a Tha?i de asesinato, tortura, persecuci¨®n y desaparici¨®n forzada de un centenar de personas. Las v¨ªctimas eran albaneses de Kosovo, serbios, miembros de la comunidad roman¨ª y rivales pol¨ªticos. Tha?i comparte el banquillo con otros tres antiguos miembros del ELK.
Apodado La serpiente de Kosovo, Hashim Tha?i estuvo en el poder entre 2016 y 2020 y dimiti¨® hace tres a?os para luego entregarse al tribunal internacional. La acusaci¨®n en su contra se hizo p¨²blica cuando viajaba a Estados Unidos para reunirse con el entonces presidente Donald Trump. En aquellos momentos, gozaba de popularidad tambi¨¦n fuera de Kosovo. Los otros acusados son Kadri Veseli, Rexhep Selimi y Jakup Krasniqi, que han rechazado igualmente declararse culpables. Todos ellos ten¨ªan mando en el ELK durante el conflicto, y se les acusa de haber participado ¡°en una empresa criminal conjunta que llev¨® a cabo ataques sistem¨¢ticos¡±.
Durante la presentaci¨®n del caso, el fiscal, Alex Whiting, ha subrayado: ¡°El ELK no est¨¢ siendo juzgado hoy. La gran mayor¨ªa de sus miembros no estuvo implicada en estos hechos. Se trata solo de estos cuatro acusados, y de su responsabilidad en los cr¨ªmenes. Afirmar lo contrario es una falsedad¡±. En la descripci¨®n del funcionamiento del ELK, el fiscal ha hecho hincapi¨¦ en su secretismo y en ¡°la persecuci¨®n de los considerados colaboracionistas o bien oponentes considerados como una amenaza¡±. ¡°Estos cuatro hombres eran sin duda los m¨¢ximos dirigentes y fueron celebrados y honrados por ello¡±, ha afirmado Whiting, ¡°pero su liderazgo ten¨ªa un lado m¨¢s oscuro¡±. Y ha a?adido: ¡°?Por qu¨¦ lo hicieron? Las pruebas demostrar¨¢n que fue para ganar poder¡±.
En una intervenci¨®n muy medida, el fiscal ha destacado que el proceso gira en torno ¡°a la defensa de la ley en tiempo de guerra, que es cuando est¨¢ m¨¢s amenazada¡±. ¡°Para eso existen las leyes de la guerra, para asegurar que la humanidad no se pierda en el curso de un conflicto armado y demostrar que no hay justificaci¨®n para abusar de civiles o para su asesinato¡±, ha dicho.
Los hechos ocurrieron cuando Kosovo era a¨²n una provincia de Serbia ¨Dlo fue hasta 2008, cuando declar¨® unilateralmente la independencia¨D, presidida en ese momento por el fallecido presidente Slobodan Milosevic. La mayor¨ªa de sus habitantes son de etnia albanesa y el choque entre el ELK y las tropas serbias desemboc¨® en una guerra concluida en 1999 con los bombardeos de la OTAN. Milosevic fue juzgado entre 2002 y 2006 en un caso separado y en otra corte, el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY). Acusado de genocidio y cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad, muri¨® en 2006, a los 64 a?os, antes de que pudiera dictarse sentencia.
Como ya sucediera con el TPIY, el Tribunal Especial para Kosovo opera desde Pa¨ªses Bajos para evitar tensiones en territorio kosovar, donde los acusados tienen seguidores. La diferencia entre ambos es que el primero aplicaba leyes internacionales y el segundo sigue la legislaci¨®n nacional. En ambos casos, los jueces son internacionales para garantizar su neutralidad. Este domingo, miles de personas se manifestaron en Pr¨ªstina, capital kosovar, en apoyo de los cuatro acusados y convocados por la Asociaci¨®n de Veteranos del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n de Kosovo; la marcha llevaba el lema: ¡°Por la justicia¡±, seg¨²n el portal informativo local Koha.
El traslado de sede judicial ha sido necesario tambi¨¦n para contener en lo posible la intimidaci¨®n de los testigos. Es una pr¨¢ctica que se mantiene hasta hoy, seg¨²n ha se?alado Whiting, y que constituye un reto. ¡°Se sigue llamando traidores a los que han colaborado con este tribunal. Conlleva coraje declarar aqu¨ª, y hay testigos que tienen miedo o confunden sus lealtades hacia los acusados¡±, ha asegurado. Los jueces tendr¨¢n que evaluar el peso y veracidad de estas declaraciones, ¡°pero lo que no puede pasar es que la intimidaci¨®n, miedo o lealtad impida que se imparta justicia¡±. El fiscal no se ha olvidado de las v¨ªctimas, ¡°que llevan 20 esperando justicia y a las que se les ha dicho que todo pertenece al pasado, que se olviden, cuando el trauma les acompa?ar¨¢ siempre. Tienen derecho a ser escuchados¡±.
Este es el segundo juicio del Tribunal Especial para Kosovo. En 2022, el l¨ªder guerrillero Salih Mustaf¨¢ fue sentenciado a 26 a?os de prisi¨®n por detener y torturar a prisioneros considerados partidarios de Serbia. El proceso contra Tha?i y sus aliados puede prolongarse varios a?os.
Este juicio se ha abierto apenas dos semanas despu¨¦s de que el Tribunal Penal Internacional (TPI), con sede tambi¨¦n en La Haya, acusara al presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, de crimen de guerra por la deportaci¨®n forzosa de ni?os ucranios desde los territorios ocupados a Rusia.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.