Biden y McCarthy alcanzan un acuerdo sobre el techo de deuda para evitar el impago en EE UU

Tras semanas de negociaciones, Estados Unidos podr¨¢ evitar el impago de la deuda si el Congreso aprueba el principio de acuerdo al que han llegado el presidente, Joe Biden, con el presidente de la C¨¢mara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy. El pacto no gusta a los sectores m¨¢s radicales de ambos partidos, pero llega a tiempo de esquivar un colapso econ¨®mico. ¡°Evita lo que podr¨ªa haber sido un impago catastr¨®fico¡±, en palabras de Biden.

El acuerdo deja en suspenso el techo de deuda de 31,38 billones de d¨®lares, lo que permite al Gobierno federal lograr financiaci¨®n y seguir cumpliendo sus obligaciones de pago. La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, ha advertido de que la semana que viene ya no tendr¨ªa dinero suficiente para afrontar los pagos previstos, as¨ª que es necesario que el Congreso apruebe el acuerdo la semana entrante.

El pacto ha sido anunciado este s¨¢bado por McCarthy con un tuit. ¡°Acabo de hablar por tel¨¦fono con el presidente hace un momento. Despu¨¦s de que perdiera el tiempo y se negara a negociar durante meses, hemos llegado a un acuerdo de principio digno del pueblo estadounidense¡±, ha tuiteado. El pacto permite aumentar la deuda hasta enero de 2025 a cambio de l¨ªmites en el gasto tambi¨¦n durante dos a?os. Para Biden es un alivio no tener que volver a pasar por este trance antes de las elecciones de noviembre de 2024, donde se juega la reelecci¨®n.

McCarthy ha tenido una breve comparecencia en el Capitolio este s¨¢bado en la que no ha admitido preguntas. ¡°A¨²n nos queda mucho trabajo por hacer. Pero creo que es un principio de acuerdo digno del pueblo estadounidense. Contiene reducciones hist¨®ricas del gasto, reformas consecuentes que sacar¨¢n a la gente de la pobreza y la incorporar¨¢n al mercado laboral. Corrige las extralimitaciones del Gobierno. No hay nuevos impuestos, ni nuevos programas gubernamentales. Hay mucho m¨¢s dentro del proyecto de ley. Todav¨ªa tenemos m¨¢s trabajo que hacer esta noche para terminar de redactarlo¡±, ha dicho.

El l¨ªder parlamentario republicano ha dado despu¨¦s las gracias a su equipo negociador. Ten¨ªa previsto informar a su grupo, terminar la redacci¨®n de la propuesta de ley, comprobarla con la Casa Blanca, volver a hablar con el presidente este domingo por la tarde y publicar a continuaci¨®n el texto, para votarlo el mi¨¦rcoles en la C¨¢mara de Representantes. El texto legal debe ser aprobado tambi¨¦n por el Senado y firmado por Biden.

McCarthy puede encontrar resistencias en el ala m¨¢s dura de su partido, la misma que puso en peligro su elecci¨®n como presidente de la C¨¢mara de Representantes. Con el apoyo dem¨®crata, no deber¨ªa haber problema en aprobar la ley si solo se descuelgan unos cuantos representantes republicanos, pero McCarthy intentar¨¢ evitar un desgarro en el seno de su grupo.

Biden no quiere hablar de pacto sobre el techo de deuda, sino de ¡°acuerdo presupuestario¡±, como ha hecho en un comunicado difundido por la Casa Blanca. En ese mismo comunicado, sin embargo, reconoce que el pacto ¡°evita lo que podr¨ªa haber sido un impago catastr¨®fico y habr¨ªa llevado a una recesi¨®n econ¨®mica, cuentas de jubilaci¨®n devastadas y millones de puestos de trabajo perdidos¡±. Este s¨¢bado, adem¨¢s de con McCarthy, Biden ha hablado por tel¨¦fono tambi¨¦n con los l¨ªderes dem¨®cratas de la C¨¢mara de Representantes, Hakeem Jeffries, y del Senado, Chuck Schumer, seg¨²n ha informado la Casa Blanca.

¡°Es un importante paso adelante que reduce el gasto al tiempo que protege programas cr¨ªticos para los trabajadores y hace crecer la econom¨ªa para todos. Adem¨¢s, el acuerdo protege mis principales prioridades y logros legislativos y los de los dem¨®cratas del Congreso. El acuerdo representa un compromiso, lo que significa que no todo el mundo consigue lo que quiere. Esa es la responsabilidad de gobernar¡±, ha a?adido en su nota Biden, que insta al Congreso a aprobar la nueva ley.

Los negociadores han acordado mantener el gasto no destinado a defensa pr¨¢cticamente estable el a?o que viene y aumentarlo solo un 1% en 2025, seg¨²n una fuente familiarizada con el acuerdo citada por Bloomberg. El pacto pone l¨ªmites a lo que se conoce como gasto discrecional, el dinero que el Congreso asigna cada a?o para financiar agencias y programas federales. Las restricciones no se aplican a programas obligatorios como Medicare (sanidad) y la seguridad social. El gasto en defensa aumentar¨ªa el a?o que viene un 3,3%, como ped¨ªa Biden en su propuesta de presupuesto.

El acuerdo significa que muchos programas federales se enfrentar¨¢n a recortes presupuestarios el pr¨®ximo a?o, ya que no habr¨¢ ning¨²n aumento para tener en cuenta la inflaci¨®n. El Congreso siempre tiene autoridad para aprobar m¨¢s gasto en caso de un acontecimiento inesperado, como una guerra o una pandemia.

Los republicanos han logrado introducir requisitos laborales (como trabajar o estar dispuesto a hacerlo) para recibir ciertos subsidios contra la pobreza, especialmente las ayudas para alimentos. En lugar de exigirse hasta los 49 a?os, se extender¨¢ a los 54 para personas sin hijos, lo que es un triunfo para los republicanos, que creen que eso se traducir¨¢ en ahorro de dinero despilfarrado. Pero los requisitos contemplan excepciones para veteranos y grupos vulnerables como las personas sin hogar, un alivio para la Casa Blanca con el que intentar¨¢ convencer a los dem¨®cratas del ala m¨¢s progresista de que acepten esas restricciones.

El pacto prev¨¦ recortar 10.000 millones de d¨®lares de un aumento presupuestario de 80.000 millones para la agencia tributaria que Biden logr¨® incluir en su Ley de Reducci¨®n de la Inflaci¨®n. Los republicanos han advertido, con frecuencia con argumentos falsos, de una oleada de inspecciones con ese dinero, mientras que los dem¨®cratas han dicho que el aumento del gasto permitir¨ªa cubrir vacantes y dar un mejor servicio y que se amortizar¨ªa con creces gracias a la lucha contra el fraude fiscal de las empresas y de las rentas m¨¢s altas, pero que no afectar¨ªa a las medias y bajas.

Un amplio plan para acelerar la aprobaci¨®n de proyectos energ¨¦ticos con cambios de calado en la Ley Nacional de Pol¨ªtica Medioambiental, de 53 a?os de antig¨¹edad, ha sido eliminado en gran medida del acuerdo, aunque los flecos de los cambios en esa materia se est¨¢n cerrando y s¨ª habr¨¢ algunas disposiciones para agilizar la tramitaci¨®n.

La Constituci¨®n de Estados Unidos exige autorizaci¨®n del Congreso para emitir deuda con la que el Gobierno federal pueda financiarse. Para no tener que someter a votaci¨®n cada emisi¨®n, el Congreso aprueba peri¨®dicamente emitir deuda hasta un cierto l¨ªmite. Normalmente, ese l¨ªmite no era objeto de disputa pol¨ªtica: simplemente se ampliaba cuando se estaba agotando. Seg¨²n el Tesoro, el Congreso ha actuado de diversas maneras 78 veces para aumentar el l¨ªmite de deuda desde 1960, 49 de ellas bajo presidentes republicanos. El gasto p¨²blico, a fin de cuentas, no depende del techo de deuda, sino de la autorizaci¨®n de partidas en los presupuestos. El l¨ªmite actual se alcanz¨® el 19 de enero y desde entonces el Congreso ha aplicado medidas extraordinarias para seguir haciendo frente a sus obligaciones, pero ya no le queda margen apenas.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) pidi¨® este viernes en Washington una soluci¨®n inmediata, pero tambi¨¦n un remedio permanente para que no se repita el problema de forma recurrente. Tras reunirse con Yellen, y con el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, insisti¨® en la necesidad de encontrar una soluci¨®n como, por ejemplo, que la aprobaci¨®n de las partidas presupuestarias conlleve la aprobaci¨®n de la deuda necesaria para acometerlas.

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