Donald Trump comparece ante un tribunal en Nueva York en un juicio civil por fraude en sus negocios
El candidato republicano a la reelecci¨®n en 2024 ha tildado de farsa el proceso, que puede costarle una multa de 250 millones de d¨®lares y la p¨¦rdida del control de importantes activos de su emporio
El expresidente Donald Trump ha comparecido este lunes ante un tribunal de Manhattan (Nueva York) por un juicio civil por fraude. La primera vista del caso ¡ªiniciado en septiembre de 2022 por la fiscal general de Nueva York, Letitia James, contra el magnate, dos de sus hijos mayores, Donald Jr. y Eric, y varios ejecutivos de la organizaci¨®n¡ª ha arrancado puntualmente a las diez de la ma?ana, hora local (seis horas m¨¢s en la Espa?a peninsular), tras la llegada media hora antes del expresidente en medio de un gran despliegue de seguridad y el habitual enjambre de c¨¢maras. Trump lleg¨® al tribunal acompa?ado por sus dos hijos y varios socios en los negocios. ¡°Esta es una continuaci¨®n de la mayor caza de brujas de todos los tiempos¡±, ha declarado el pol¨ªtico antes de entrar en la sala. ¡°Tenemos una gran compa?¨ªa. Yo constru¨ª una gran compa?¨ªa, es tremenda... Tiene algunos de los mayores activos inmobiliarios del mundo. Y ahora tengo que presentarme ante un juez sin escr¨²pulos¡±, a?adi¨®.
La semana pasada, ese juez que instruye el caso, Arthur Engoron, dictamin¨® de forma provisional que el expresidente es responsable de fraude por inflar el valor de sus propiedades en sus declaraciones durante una d¨¦cada para enga?ar a bancos, aseguradoras y otras entidades y conseguir beneficios. La fiscal James, una dem¨®crata a la que el exmandatario acusa de caza de brujas pol¨ªtica, reclamar¨¢ 250 millones de d¨®lares [unos 238 millones de euros] por da?os y perjuicios, y propondr¨¢ prohibir a los Trump ejercer como directivos en Nueva York, as¨ª como que la compa?¨ªa, la denominada Organizaci¨®n Trump, opere durante cinco a?os. No est¨¢ previsto que Trump testifique hasta dentro de varias semanas, y el juicio se prolongar¨¢ como m¨ªnimo hasta las pr¨®ximas navidades. Su comparecencia voluntaria de este lunes, no obstante, constituye un cambio radical con respecto a citaciones anteriores, a las que se neg¨® a asistir.
Aunque se trata de un proceso civil (sin riesgo de penas de c¨¢rcel si fuera declarado culpable) y la sanci¨®n que pide la Fiscal¨ªa sea asumible para su bolsillo, el alcance de las medidas que imponga el juez Engoron socava gravemente la reputaci¨®n como empresario de Trump, que alarde¨® de su figura de hombre hecho a s¨ª mismo como base de su carrera pol¨ªtica.
Engoron podr¨ªa retirarle el control de importantes activos de la organizaci¨®n, empezando por la simb¨®lica Torre Trump, en el coraz¨®n de Manhattan, desde la que el republicano arranc¨® su carrera pol¨ªtica con la imagen cinematogr¨¢fica del ¨¦xito: bajando junto con su esposa Melania las escaleras mec¨¢nicas a la entrada del edificio, un derroche de cromados, dorados y m¨¢rmol en cuyos tres pisos superiores radica la vivienda familiar (el tr¨ªplex tambi¨¦n se incluir¨ªa en la sanci¨®n). Adem¨¢s, Trump podr¨ªa quedarse sin un edificio de oficinas de Wall Street, campos de golf y una finca en el campo. La causa solo afecta a un pu?ado de las aproximadamente 500 entidades de la cartera de Trump, pero son algunas de las m¨¢s relevantes.
El juicio, por tanto, escrutar¨¢ sus pr¨¢cticas empresariales, y algo mucho m¨¢s esencial en un pa¨ªs que castiga especialmente la deshonestidad: si la fortuna que Trump se precia de haber adquirido a golpe de tes¨®n y ambici¨®n no se levanta en realidad sobre el pecado original de la mentira. Aunque de cara a su hipot¨¦tica reelecci¨®n como presidente en 2024 ¨Des el candidato republicano favorito¨D, este caso civil no tiene la relevancia pol¨ªtica de algunas de las cuatro imputaciones que pesan sobre ¨¦l (como las de la injerencia electoral en Georgia o los papeles de Mar-a-Lago), la posibilidad de perder el control de la Torre Trump y las otras propiedades ha enfurecido al candidato republicano. Trump rechaza malas pr¨¢cticas y sostiene que James y Engoron est¨¢n infravalorando activos como la residencia de Mar-a-Lago, en Florida, adem¨¢s de tildar la causa de ¡°farsa¡±. Sus abogados aseguran tambi¨¦n que lo que figura en sus declaraciones no importa, porque estas incluyen una cl¨¢usula de exenci¨®n de responsabilidad que dice que no son fiables al 100%. Uno de ellos, Christopher Kise, ha insistido este lunes en que las declaraciones financieras son ¡°totalmente legales¡±. ¡°[La Organizaci¨®n Trump] es una de las marcas de mayor ¨¦xito en el mundo, y ha hecho una fortuna acertando literalmente en inversiones inmobiliarias. No hubo intenci¨®n de defraudar, no hubo ilegalidad, no hubo impago, no hubo incumplimiento, no hubo beneficios injustos y no hubo v¨ªctimas¡±, ha subrayado Kise ante el juez.
En mensajes publicados durante la noche en su red Truth Social, Trump recalcaba que acude a los tribunales ¡°para luchar¡± por su ¡°nombre y reputaci¨®n¡±, y ped¨ªa a James y Engoron que dimitan.
El expresidente construy¨® su carrera pol¨ªtica sobre su cr¨¦dito como multimillonario y maestro en la negociaci¨®n, una baza que explot¨® en su libro El arte del trato, de 1987: la obra que, en parte memorias y en parte manual de consejos empresariales, impuls¨® su marca personal ¨Dsu nombre¨D y que posteriormente aquilataron otras iniciativas de marketing y visibilidad como el programa de telerrealidad El aprendiz, su definitivo trampol¨ªn a la pol¨ªtica en 2016.
Entre los llamados a declarar durante el proceso, adem¨¢s de sus dos hijos varones mayores, varios ejecutivos de la firma y Michael Cohen, su antiguo hombre de confianza reconvertido en enemigo, figura tambi¨¦n Allen Weisselberg, que fuera director financiero de la Organizaci¨®n Trump durante d¨¦cadas, y que se declar¨® culpable de fraude fiscal para evitar que el delito salpicara a su jefe. Fue condenado a cinco meses de c¨¢rcel en enero pasado. La Organizaci¨®n Trump fue declarada culpable del mismo cargo en diciembre, y condenada un mes despu¨¦s a pagar una sanci¨®n de 1,6 millones de d¨®lares.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.