Cinco alcaldes dem¨®cratas piden auxilio a Biden para lidiar con la crisis migratoria

Mike Johnston, el alcalde de Denver (Colorado) ha viajado este mi¨¦rcoles a Washington para lanzar al presidente Joe Biden un grito de auxilio. Johnston es un pol¨ªtico dem¨®crata que lidera un grupo de cinco regidores que solicitan a la Casa Blanca ayuda para sus ciudades ante el incremento en la llegada de miles de inmigrantes. Su petici¨®n es respaldada por los alcaldes de Chicago, Los ?ngeles, Nueva York y Houston, las ciudades m¨¢s pobladas del pa¨ªs. ¡°Agradecemos de los recursos federales extraordinarios que se han propuesto, pero nuestros presupuestos y ciudadanos son quienes siguen llev¨¢ndose la carga en esta crisis federal¡±, afirman los pol¨ªticos en una carta enviada a Biden.

El documento ha sido dado a conocer por la agencia Associated Press. La petici¨®n de los alcaldes es, sobre todo, una petici¨®n para que el Ejecutivo agilice los permisos de trabajo temporales. Esto podr¨ªa ayudar a los miles de inmigrantes que viven en albergues a la espera de que las autoridades de Inmigraci¨®n resuelvan sus casos. ¡°La crisis es que tenemos aqu¨ª a gente que desesperadamente quiere trabajar. Y tenemos empleadores que quieren contratarlos desesperadamente. Y tenemos a un Gobierno federal que se interpone entre los patrones que quieren contratar¡±, escribe Johnston.

Las quejas por la gesti¨®n de la frontera con M¨¦xico eran comunes entre los sectores del partido republicano. Desde hace algunos meses, el presidente Biden ha recibido mucho fuego amigo. Alguno por parte de gobernadores, pero especialmente por alcaldes de su partido. Estos han visto llegar a sus ciudades a miles de personas provenientes de los Estados fronterizos. El mandatario estadounidense, quien pretende presentarse a la reelecci¨®n en 2024, ha solicitado al Congreso 1.400 millones para poder procesar a los indocumentados. Los alcaldes, no obstante, calculan que la cifra necesaria para encarar la situaci¨®n ronda los 5.000 millones de d¨®lares.

Los ?ngeles, por ejemplo, ha recibido al menos 22 autobuses llenos de inmigrantes. Estos han sido enviados por el gobernador de Texas con el prop¨®sito de desahogar un poco las comunidades de su regi¨®n e incordiar a los bastiones progresistas. Karen Bass, la alcaldesa angelina, ha tratado de hacer lo posible por recibirlos. El influjo, sin embargo, coincide con otras de sus prioridades, como su lucha por dar refugio a los sin techo. California ha recibido a m¨¢s de 430.000 personas desde 2019, de acuerdo a la organizaci¨®n Chirla, que trabaja en favor de los derechos de los inmigrantes. El 35% de la poblaci¨®n que ha sido mandada al Oeste por el gobernador Greg Abbott son menores de edad.

En Chicago, los migrantes est¨¢n durmiendo en estaciones de polic¨ªa. En Nueva York, el gobierno del alcalde Eric Adams ha convertido la terminal de un crucero en Brooklyn en un albergue con capacidad para mil personas. Tambi¨¦n ha acondicionado un hotel de lujo, el Roosevelt, como un centro de procesamiento y espera para los inmigrantes. Se calcula que la ciudad ha recibido a unas 65.000 personas desde la primavera de 2022. Todas estas son arreglos temporales para una crisis que no parece disminuir ante el aumento de la migraci¨®n de ciudadanos venezolanos y ecuatorianos.

El alcalde Adams decret¨® desde febrero que Nueva York se ha quedado sin sitio para recibir a los inmigrantes e incluso los ha invitado a que sigan su camino a Canad¨¢. En otra maniobra, el regidor neoyorquino, un expolic¨ªa, inici¨® un viaje por M¨¦xico y hasta Sudam¨¦rica para intentar comprender las causas que llevan a miles a abandonar sus pa¨ªses.

Una portavoz de la Casa Blanca ha prometido que seguir¨¢n apoyando a las ciudades que han acogido a los inmigrantes. El Ejecutivo ofrece reducir en 30 d¨ªas el tr¨¢mite que introduce a quienes han arribado al complejo sistema burocr¨¢tico de las autoridades de Inmigraci¨®n. El Gobierno asegura tambi¨¦n que ya se llevan algunos programas piloto para auxiliar en la situaci¨®n. Uno de estos es una cl¨ªnica en Nueva York, donde 300 personas pueden acudir cada d¨ªa a tramitar permisos de trabajo.

Parte de la situaci¨®n que encaran las ciudades que han firmado la carta ha sido provocada por los Estados republicanos. Estos se han fijado como pol¨ªtica enviar a los indocumentados a las llamadas urbes santuario, que son generalmente m¨¢s progresistas y tienen una pol¨ªtica m¨¢s permisiva con los inmigrantes irregulares. Las autoridades de Denver gastan cada semana dos millones de d¨®lares en albergar a migrantes. Las cuentas del alcalde Adams ascienden a los 1.700 millones de d¨®lares y Chicago ha desembolsado 320 millones, dicen los regidores en su carta. La respuesta de la Casa Blanca a¨²n est¨¢ pendiente.

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