Decenas de miles de personas se agolpan en Rafah, la frontera de Gaza con Egipto
El alto comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, Volker T¨¹rk, califica la situaci¨®n de ¡°apocal¨ªptica¡± y alerta del creciente riesgo de genocidio y otros cr¨ªmenes internacionales
Este jueves se cumplen dos meses de guerra. Las tropas del ej¨¦rcito de Israel avanzan por toda la franja de Gaza y cientos de miles de habitantes deambulan de un lugar a otro en busca de refugio. Ocurre especialmente en el sur, donde la acci¨®n de los militares israel¨ªes es m¨¢s intensa desde el fin de la semana de tregua. Eso, seg¨²n ha alertado Naciones Unidas, est¨¢ empujando a decenas de miles de gazat¨ªes hacia Rafah, la localidad m¨¢s al sur de la Franja y puerta de salida hacia Egipto. Se agolpan all¨ª tras escapar de otros lugares, algunos en una huida constante que dura ya semanas desde que salieron del norte, hostigados por los bombardeos y los combates m¨¢s intensos desde que arrancara el conflicto. La ONU lo califica de ¡°castigo colectivo¡± y describe la situaci¨®n como ¡°apocal¨ªptica¡±, algo que facilita los cr¨ªmenes de guerra, seg¨²n el alto comisionado para los Derechos Humanos, Volker T¨¹rk.
La intensidad de los ataques en el centro y el sur del enclave mediterr¨¢neo palestino dificulta a la poblaci¨®n ponerse a salvo o hacer frente a la acuciante crisis humanitaria. Un vecino que prefiere no ser identificado y que vive en Rafah ha compartido con EL PA?S im¨¢genes de los desplazados improvisando refugios en la calle y aparcamientos con listones de madera, mantas y telas. Las familias se ayudan entre s¨ª para dar cobijo a los que van llegando, describe.
¡°Est¨¢n empujando a la gente hacia Egipto para que pueda comenzar pronto el proceso migratorio¡±, se?ala refiri¨¦ndose a la idea expresada en algunos ¨¢mbitos por las autoridades de Israel con respecto a expulsar a los habitantes de la Franja al pa¨ªs vecino, algo a lo que El Cairo se niega de manera tajante. ¡°Esperamos que no suceda, no queremos esto¡±, a?ade ese vecino, que, especialmente por las noches, escucha los bombardeos que tienen lugar sobre la vecina Jan Yunis en medio de ese constante goteo de personas desde esa localidad hacia Rafah. ¡°El ej¨¦rcito israel¨ª est¨¢ ya dentro de Jan Yunis y creemos que vendr¨¢n pronto a Rafah¡±, teme.
En efecto, las tropas de ocupaci¨®n aprietan el acelerador, especialmente en esa zona meridional, donde rodean desde las ¨²ltimas horas la vivienda de Yahia Sinwar, en la localidad de Jan Yunis, seg¨²n Benjam¨ªn Netanyahu, el primer ministro israel¨ª. No hay constancia, sin embargo, de que el m¨¢ximo responsable pol¨ªtico del Movimiento de Resistencia Isl¨¢mica (Ham¨¢s) se halle all¨ª, pero es una de las piezas cuya caza m¨¢s ansia Israel en la contienda.
En este periodo transcurrido desde el 7 de octubre, uno de los ej¨¦rcitos con la mejor tecnolog¨ªa del mundo, que ha perdido a 83 de sus hombres, ha matado a m¨¢s de 16.000 personas y ha destruido gran parte de las viviendas e infraestructuras del territorio de Gaza, apenas 365 kil¨®metros cuadrados, pero no ha conseguido atrapar o matar a ninguno de los m¨¢ximos responsables de Ham¨¢s, que lider¨® aquel d¨ªa el ataque que caus¨® 1.200 v¨ªctimas mortales en Israel. ¡°Ayer (por el martes) dije que nuestras fuerzas pod¨ªan llegar a cualquier parte de la franja de Gaza. Hoy est¨¢n rodeando la casa de Sinwar. Su casa puede no ser su guarida y puede escapar, pero es solo cuesti¨®n de tiempo antes de que lo atrapemos¡±, coment¨® Netanyahu en un mensaje de v¨ªdeo.
En Jan Yunis podr¨ªan encontrarse tambi¨¦n algunos de los 138 rehenes que quedan en manos de los islamistas, una quincena de ellos confirmados ya muertos. Ese sigue siendo uno de los asuntos espinosos para las autoridades de Israel. Algunos del centenar largo de liberados durante la semana de tregua junto a familiares se enfrentaron el martes con Netanyahu, durante una reuni¨®n a puerta cerrada. El encuentro acab¨® a gritos y con algunos de los asistentes abandonando el lugar antes de que concluyera el acto, seg¨²n la prensa local. El mandatario les acababa de informar de que no era posible traer de vuelta a sus familiares en estos momentos.
¡°Civiles castigados colectivamente¡±
¡°En estas circunstancias existe un riesgo muy elevado de que se produzcan cr¨ªmenes internacionales¡±, denunci¨® el alto comisionado Volker T¨¹rk. En el cat¨¢logo de cr¨ªmenes internacionales se incluyen el de genocidio, los de lesa humanidad, los de guerra y la limpieza ¨¦tnica, entre otros. ¡°Mis colegas humanitarios han descrito la situaci¨®n como apocal¨ªptica¡±, a?adi¨® T¨¹rk, pendiente desde hace casi dos meses del visto bueno por parte de Israel para visitar la zona, tanto ese pa¨ªs como Palestina. Reclam¨® ¡°urgentemente medidas¡± para impedir ¡°esos cr¨ªmenes¡± e incidi¨® en que ¡°los civiles siguen siendo bombardeados implacablemente por Israel y castigados colectivamente¡±.
A mediod¨ªa del mi¨¦rcoles, los muertos llegados en las ¨²ltimas 24 horas al hospital Al Aqsa de Deir el Balah ascend¨ªan a 73, y los heridos a 123, seg¨²n un portavoz del Ministerio de Sanidad, controlado por Ham¨¢s. Junto al mensaje, las autoridades de la Franja distribuyeron las im¨¢genes de v¨ªctimas de todas las edades, muertos y vivos juntos, acumulados en el suelo del centro hospitalario.
¡°Hay 700 ingresados en el hospital y constantemente llegan nuevos pacientes. Nos estamos quedando sin suministros esenciales para tratarlos¡±, afirm¨® Marie-Aure Perreaut Revial, coordinadora de emergencias de M¨¦dicos Sin Fronteras en Gaza, a trav¨¦s de un comunicado en la red social X (antes Twitter). Ese centro recibe desde que se puso fin a la tregua el pasado 1 de diciembre a entre 150 y 200 heridos de guerra cada d¨ªa. ¡°La escasez de medicamentos y combustible podr¨ªa provocar que el hospital no pueda realizar cirug¨ªas que salven vidas o cuidados intensivos. Sin electricidad, los ventiladores dejar¨ªan de funcionar, las donaciones de sangre tendr¨ªan que cesar y la esterilizaci¨®n de instrumentos quir¨²rgicos ser¨ªa imposible¡±, a?ade la ONG, cuyo equipo reside en ese hospital Al Aqsa. La Media Luna Roja Palestina tiene all¨ª a sus equipos trabajando con las linternas de sus tel¨¦fonos m¨®viles.
Deir el Balah, ciudad ubicada en el centro de la Franja, entre Ciudad de Gaza, en el norte, y Jan Yunis, en el sur, es en las ¨²ltimas horas uno de los principales objetivos de los ataques israel¨ªes. En la tarde del martes, reporteros locales ya hab¨ªan mostrado las dantescas im¨¢genes de un edificio poco despu¨¦s de un bombardeo en el que los habitantes recog¨ªan heridos con mantas en medio de un escenario con llamas salpicado por muchos cad¨¢veres entre los escombros.
De una poblaci¨®n de 2,3 millones de personas, hay 1,2 millones que han encontrado protecci¨®n en 156 instalaciones de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA). Se trata de lugares que est¨¢n desbordados, al igual que otros refugios improvisados en los que intenta acomodarse la poblaci¨®n. El hacinamiento se traduce en la multiplicaci¨®n de enfermedades infecciosas y respiratorias, sarna, diarrea, que se ha disparado a niveles 40 o 50 veces por encima de lo normal, y hasta un caso de ictericia, alert¨® Richard Peeperkorn, de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud.
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