La censura en redes de la solidaridad con Palestina se dispara con la guerra en Gaza

Sabah Khodir es una escritora y activista egipcio-americana residente en El Cairo con m¨¢s de 33.000 seguidores en su perfil de Instagram, donde combina publicaciones sobre su trabajo y su vida con contenido pol¨ªtico. De media ¨Dexplica¨D unas 7.000 personas miran sus historias, una cifra que en ocasiones sube hasta las 12.000. Pero desde que Israel lanz¨® su ¨²ltima ofensiva militar en Gaza y Khodir empez¨® a publicar m¨¢s ...

Sabah Khodir es una escritora y activista egipcio-americana residente en El Cairo con m¨¢s de 33.000 seguidores en su perfil de Instagram, donde combina publicaciones sobre su trabajo y su vida con contenido pol¨ªtico. De media ¨Dexplica¨D unas 7.000 personas miran sus historias, una cifra que en ocasiones sube hasta las 12.000. Pero desde que Israel lanz¨® su ¨²ltima ofensiva militar en Gaza y Khodir empez¨® a publicar m¨¢s acerca de la situaci¨®n en Palestina y a expresar su solidaridad, las visualizaciones apenas llegan al centenar. ¡°Se trata de un problema recurrente, no es algo nuevo¡±, desliza. ¡°Y solo ocurre con Palestina¡±.

Como Khodir, muchos usuarios de Instagram y Facebook, propiedad de Meta, y decenas de organizaciones de derechos y de la sociedad civil denuncian que en las ¨²ltimas semanas estas plataformas est¨¢n censurando contenidos y cuentas en apoyo a Palestina de forma desproporcionada y sin motivos de peso. Entre las principales formas que adopta la pr¨¢ctica se cuentan limitaciones a la visibilidad de este tipo de publicaciones y usuarios, as¨ª como su restricci¨®n, suspensi¨®n y eliminaci¨®n; y restricciones en el uso de algunas funciones de estas plataformas.

Esta gesti¨®n de las redes sociales, a las que muchos en la regi¨®n acuden para informarse ante la extendida percepci¨®n de que en los grandes medios de comunicaci¨®n occidentales impera una narrativa pro-israel¨ª de los acontecimientos, ha vuelto a poner sus pol¨ªticas y pr¨¢cticas de moderaci¨®n en el punto de mira. Y tambi¨¦n genera cr¨ªticas porque limita el acceso a la informaci¨®n y la libertad de expresi¨®n y participaci¨®n pol¨ªtica de los usuarios. ¡°Si se trata de Palestina en particular, [la visibilidad de mi contenido] siempre es mucho menor. Mi perfil ha sido atacado [anteriormente] por denunciar a depredadores sexuales y, aun as¨ª, nunca me han restringido; solo cuando se trata de Palestina¡±, nota Khodir.

Desde el inicio de la ofensiva israel¨ª en Gaza hasta finales de noviembre, la organizaci¨®n Human Rights Watch identific¨® m¨¢s de 1.000 casos de censura de contenidos publicados en Facebook e Instagram por palestinos y sus simpatizantes desde m¨¢s de 60 pa¨ªses, aunque se?al¨® que el n¨²mero total es mucho mayor. El centro 7amleh para el avance de los medios sociales en el mundo ¨¢rabe tambi¨¦n ha documentado cientos de casos.

Entre los m¨¢s notorios se halla la suspensi¨®n del medio Quds News Network en Facebook, donde ten¨ªa casi 10 millones de seguidores, seg¨²n 7amleh, y la suspensi¨®n temporal en Instagram de Eye on Palestine, con 6 millones de seguidores. Ante este patr¨®n, 90 grupos de derechos humanos y de la sociedad civil de alrededor del mundo denunciaron ya el 13 de octubre la discriminaci¨®n y la censura desproporcionada de contenidos palestinos

Una investigadora egipcia en estudios cr¨ªticos de inteligencia artificial, que prefiere que no se publique su nombre debido a la sensibilidad del tema, explica que esta pr¨¢ctica a gran escala es posible porque, adem¨¢s de revisores humanos, las grandes plataformas sociales tienen un proceso muy automatizado de reconocimiento de texto, t¨¦cnicas de aprendizaje autom¨¢tico, programas de visi¨®n por ordenador y aprendizaje profundo que les permiten identificar todo tipo de contenidos que violan sus pol¨ªticas de moderaci¨®n.

¡°Lo que es problem¨¢tico es determinar lo que constituye incitaci¨®n al odio, antisemitismo, terrorismo y apolog¨ªa del terrorismo, porque es un acto inherentemente subjetivo¡±, se?ala. En el caso de Palestina, agrega, ¡°ha habido ocasiones en que ha habido confusi¨®n entre consignas pro-palestinas y de solidaridad y consignas que se consideran afinidad o condonaci¨®n de la violencia de Ham¨¢s¡±, lo que dificulta lograr ¡°un equilibrio entre la libertad de expresi¨®n y cumplir con las pol¨ªticas de moderaci¨®n de contenidos¡±.

Luchar contra el algoritmo

Saliendo al paso de las cr¨ªticas, Meta declar¨® el 13 de octubre que hab¨ªa formado un centro de operaciones, con hablantes de hebreo y ¨¢rabe, para responder a la crisis, y admiti¨® que, debido al aumento de contenidos denunciados, algunos fueron ¡°eliminados por error¡±. La empresa not¨® que hab¨ªan eliminado o se?alado casi 800.000 contenidos entre el 7 y el 10 de octubre, aunque no detall¨® cu¨¢ntos eran en hebreo y cu¨¢ntos en ¨¢rabe, y afirm¨® que durante esos d¨ªas elimin¨® siete veces m¨¢s contenido al d¨ªa por infringir su pol¨ªtica de organizaciones e individuos peligrosos, que en el pasado ha sido criticada por afectar de forma desproporcionada a los palestinos. Tambi¨¦n bloque¨® hashtags cuyo contenido infring¨ªa sus normas y redujo el umbral a partir del cual no recomienda ciertos contenidos. En otro comunicado, Meta neg¨® estar suprimiendo ¡°deliberadamente¡± una voz. EL PA?S ha contactado con Meta, pero no ha recibido respuesta en el momento de esta publicaci¨®n.

¡°Ellos alegan siempre que existen lo que llaman errores o fallos t¨¦cnicos, pero que siempre acaban resultando en discriminaci¨®n, censura y silenciamiento de no solo voces palestinas, sino tambi¨¦n de ciudadanos en todo el mundo que abogan por la protecci¨®n de los derechos humanos de Palestina y en solidaridad con Palestina¡±, se?ala Itxaso Dom¨ªnguez de Olaz¨¢bal, responsable de incidencia pol¨ªtica en la UE de 7amleh.

Un informe externo de la gesti¨®n que hizo Meta de sus plataformas en la ofensiva militar israel¨ª sobre Gaza de mayo de 2021 concluy¨® que sus acciones parec¨ªan haber tenido ¡°un impacto adverso en los derechos humanos de los usuarios palestinos¡± y su capacidad para compartir informaci¨®n. Tambi¨¦n not¨® que el contenido en ¨¢rabe era m¨¢s susceptible a ser eliminado por error, y que los ¨ªndices de detecci¨®n activa de contenidos potencialmente infractores en ¨¢rabe eran superiores que en hebreo. Identific¨® adem¨¢s sesgos involuntarios en los que su pol¨ªtica y pr¨¢ctica afectaron m¨¢s los derechos de usuarios palestinos y ¨¢rabes.

Discursos de odio

Un caso aparte es la antigua Twitter, ahora X, que est¨¢ siendo criticada por dar rienda suelta a la desinformaci¨®n tras algunos cambios recientes introducidos por su propietario, Elon Musk, entre los que destaca la mayor difusi¨®n que reciben las cuentas que pagan por el mero hecho de hacerlo e independientemente de su credibilidad y de qui¨¦n las gestione. X tambi¨¦n est¨¢ recibiendo cr¨ªticas por su poco control sobre contenido que incita al odio. Desde el inicio de la ofensiva israel¨ª en Gaza, 7amleh ha registrado m¨¢s de 2,5 millones de publicaciones violentas en hebreo en X, una prevalencia que atribuye al hecho que la empresa carece de un clasificador hebreo para moderar m¨¢s efectivamente este contenido.

El 10 de octubre, X afirm¨® en un comunicado que hab¨ªan tomado medidas contra decenas de miles de publicaciones por su contenido gr¨¢fico, violento y de odio, y not¨® que est¨¢n vigilando de forma proactiva discursos antisemitas, pero no hizo menci¨®n a los discursos contra los palestinos. La directora general de la empresa, Linda Yaccarino, public¨® al d¨ªa siguiente una carta dirigida al comisario de mercado interior de la Uni¨®n Europea, Thierry Breton, en la que explicaba que hab¨ªan eliminado cientos de cuentas afiliadas a Ham¨¢s, pero no mencion¨® ning¨²n otro caso. Tambi¨¦n record¨® que sus normas proh¨ªben, entre otros, contenido que amenace con ¡°da?ar viviendas y refugios civiles o infraestructura esenciales para las actividades cotidianas, civiles o comerciales¡±, pero su aplicaci¨®n en el caso de altos cargos israel¨ªes es poco clara.

¡°En Twitter se est¨¢n permitiendo, bajo la bandera de la libertad de expresi¨®n, cantidades incre¨ªbles de incitaci¨®n al odio y de discurso violento, que vienen adem¨¢s de autoridades [israel¨ªes] y muchas veces van acompa?adas de desinformaci¨®n¡±, apunta Dom¨ªnguez.

La investigadora egipcia y Dom¨ªnguez notan adem¨¢s que esta desproporcionalidad ocurre en un contexto de gran asimetr¨ªa de poder entre las plataformas sociales y sus usuarios, y entre los palestinos ¡ªy quienes expresan su solidaridad¡ª y los israel¨ªes. Por ejemplo, el 19 de octubre el departamento cibern¨¦tico de la Fiscal¨ªa israel¨ª inform¨® de que hab¨ªa denunciado m¨¢s de 6.200 contenidos en redes sociales, y asegur¨® que alrededor del 90% de sus solicitudes a plataformas de Meta hab¨ªan sido aceptadas.

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