La gran victoria silenciosa de Ucrania: la reconquista del mar Negro

Dice Andrii Vadaturskii, de 51 a?os, que una de las peores cosas de la invasi¨®n de Ucrania es despertarse y ver qu¨¦ puede haber pasado mientras dorm¨ªas. La incertidumbre. En una de esas noches, la del 31 de julio de 2022, un misil ruso atraves¨® el dormitorio de sus padres, Oleksii y Raisa, acabando con sus vidas. El bombarde¨® machac¨® la ciudad sure?a de Mikolaiv, frente al mar Negro. Oleksii Vadaturskii, m¨¢ximo responsable de Nubilon, gigante del sector agrario, era uno de los hombres m¨¢s ricos del pa¨ªs. Desde el Gobierno regional y desde Kiev, en boca del presidente Volod¨ªmir Zelenski, se conden¨® la muerte de este empresario de 74 a?os. Se vertieron sospechas de que Rusia, con quien no hac¨ªa buenas migas, le puso en la diana a conciencia. Andrii, su hijo, tom¨® las riendas del emporio familiar en un tiempo en el que la flota rusa bloqueaba el comercio hacia el B¨®sforo.

¡°Tienes que tomar decisiones, pero es como si siempre estuvieras saltando al ¨²ltimo vag¨®n de un tren¡±, se?ala a la sombra de uno de sus silos, junto a la localidad de Voznesensk. Con los puertos de Odesa y Mikolaiv bloqueados, decidi¨® buscar una ruta alternativa, aunque fuera m¨¢s costosa. Y acert¨®.

Si alguien quiere da?ar la econom¨ªa de Ucrania, nada mejor que pegarle al campo. Antes de la guerra, en torno a un 70% de la tierra era cultivable; ahora, a causa de la invasi¨®n, se labra en un ¨¢rea un tercio m¨¢s peque?a que antes. Mosc¨² ha bombardeado miles de hect¨¢reas, ha matado a agricultores; ha lanzado sus misiles contra elevadores y terminales de los puertos del sur, y ha bloqueado el comercio y minado las aguas del mar Negro. Por la guerra, s¨ª, pero con efectos claros para la econom¨ªa. Rusia y Ucrania son competidores en el mercado del grano, as¨ª que el da?o de uno deja en mejor posici¨®n al otro.

¡°Quer¨ªan controlar el corredor¡±, explica Andrii Vadaturskii, de rasgos duros y tez tostada, sofocado por el fuerte calor, ¡°y as¨ª ser m¨¢s competitivos¡±. En el verano de 2022, Mosc¨² y Kiev firmaron por separado un acuerdo con Turqu¨ªa, y la mediaci¨®n de la ONU, para garantizar el tr¨¢nsito del cereal hacia el estrecho del B¨®sforo, vital para muchos importadores del Sur. Un a?o despu¨¦s, Mosc¨² abandon¨® el pacto y recuper¨® el bloqueo.

Es tiempo de recolecta en algunos cultivos. La polvareda que levantan las m¨¢quinas cosechadoras, en una cuadr¨ªcula exquisita de tierra amarilla y verde, se pierde a orillas del r¨ªo Bog, de camino al puerto de Mikolaiv. Vadaturskii monta en una de las joyas de su nuevo rumbo, un barco de desminado en el que ha invertido cuatro millones de euros. Ha compartido con empresarios y periodistas muchas cifras: perdieron 460 millones solo en 2022, junto a 25.500 hect¨¢reas que cayeron en manos rusas; el coste por mover cada tonelada (cebada, ma¨ªz y trigo) pas¨® entonces de 11 a unos 140 euros. Cuenta que 24 de sus empleados murieron y 654 marcharon a combatir. Pero revela tambi¨¦n que las cosas mejoran. En los ¨²ltimos 12 meses, han exportado 3,2 millones de toneladas y reducido el coste log¨ªstico hasta los 57-67 euros. Y eso gracias, en gran medida, a la ruta a trav¨¦s del r¨ªo Danubio y del puerto rumano de Constanza ¨Dcon una estimable colaboraci¨®n de Bucarest¨D, en la que Nibulon ha invertido m¨¢s de 20 millones.

Las exportaciones de Ucrania, con los productos agr¨ªcolas al frente ¨Dla ocupaci¨®n militar de la franja m¨¢s industrial ha torpedeado a la metalurgia¨D, siguen actualmente tres v¨ªas de salida: en camiones, hacia la frontera oeste del pa¨ªs para cruzar a territorio de la Uni¨®n Europea, generalmente v¨ªa Polonia; de nuevo por tierra, hasta puertos ucranios del r¨ªo Danubio (Reni, Izmail), donde zarpan hacia el mar Negro, y, en tercer lugar, a lo largo de este mismo mar, desde las terminales de Odesa, desbloqueadas, trazando una ruta paralela a la previa a la guerra, m¨¢s larga y costosa, pero m¨¢s segura, por aguas territoriales de dos pa¨ªses OTAN, Rumania y Bulgaria. Los puertos de Mikolaiv, situados m¨¢s al este, permanecen cerrados por seguridad.

Estas dos ¨²ltimas v¨ªas han costado tiempo y dinero, pero han permitido recuperar las exportaciones. Los datos hablan: seg¨²n informaci¨®n reciente del viceministro de Econom¨ªa, Taras Kachka, en la temporada que finaliz¨® en junio, Ucrania logr¨® exportar cereales y oleaginosas por un valor de 70 millones de euros, esto es, por encima de los cinco millones al mes, con el ma¨ªz a la cabeza en volumen, pero un crecimiento r¨¦cord del aceite de girasol ¨Del pa¨ªs fue l¨ªder en las exportaciones de este producto¨D. Antes de la agresi¨®n rusa, las ventas del agro estaban por encima de los seis millones; tras la ruptura del acuerdo del grano, en el verano de 2023, pr¨¢cticamente no superaba los dos millones. Han sido esenciales la resiliencia, creatividad, empe?o e inversi¨®n de las empresas, pero el punto de inflexi¨®n para la reconquista del comercio por el mar Negro est¨¢, sin duda, en la expulsi¨®n de la flota rusa.

TransInvestService (TIS) es otro gigante en Ucrania, esta vez, como estibador y operador de las terminales desde donde parten y llegan los cargueros, en los puertos de Odesa. Su localizaci¨®n, en la franja m¨¢s occidental de la costa del mar Negro, hace que sea el punto de partida elegido para mantener la ruta comercial hacia el B¨®sforo. Philipp Grushko, de 40 a?os, empresario e inversor, es miembro de la junta directiva de TIS. ¡°La situaci¨®n de seguridad ha mejorado¡±, dice Grushko en una videollamada. ¡°Durante los controles del acuerdo del grano, que pod¨ªan durar hasta 40 d¨ªas por carguero¡±, contin¨²a, ¡°Rusia trat¨® de retrasar mucho la salida de los barcos ucranios¡±. Era la ruina para el sector y para el pa¨ªs. Aunque Mosc¨² hubiera mantenido el pacto, a ese ritmo, la sangr¨ªa para las exportaciones habr¨ªa continuado.

La Marina ucrania, pese a no contar con una flota formidable, pis¨® el acelerador tras el verano de 2023. A trav¨¦s de una estrategia combinada de ataques convencionales (misiles), sabotajes y uso de drones marinos, Kiev ha logrado expulsar, pr¨¢cticamente por completo, a la flota rusa del mar Negro. ¡°Ahora domina las aguas¡±, se?ala Grushko, ¡°Rusia ha entendido que el precio de atacar a los barcos es muy alto¡±. Como tambi¨¦n hiciera Vadaturskii durante la charla, este empresario insiste en la importancia de que Ucrania invierta m¨¢s en su fuerza naval para garantizar la seguridad del transporte por el mar Negro.

El pasado 15 de julio, el portavoz de la Marina ucrania inform¨® de que el ¨²ltimo barco de patrulla de la flota rusa, estacionada en Crimea, con base en Sebastopol, hab¨ªa abandonado la zona. Seg¨²n Kiev, su ofensiva ha logrado destruir o da?ar un tercio de los efectivos de Mosc¨² en el mar Negro. El Ministerio de Defensa brit¨¢nico lo ha rebajado a un quinto de las embarcaciones de guerra desplegadas en estas aguas. Desde el otro lado de la trinchera, no obstante, la artiller¨ªa rusa sigue apuntando y acertando en la regi¨®n sur, de Mikolaiv hasta Odesa y los puertos del Danubio. Mientras Vadaturskii muestra los elevadores donde almacena el grano, suenan las alertas antia¨¦reas. Un instante despu¨¦s del cierre de la ¨²ltima puerta de los refugios con el personal dentro, un estruendo sacude a un golpe de vista, en Voznesensk. Un misil ruso ha ca¨ªdo en una zona civil de la localidad y matado a una persona.

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