Los ultras alemanes de AfD ganan las elecciones en Turingia, seg¨²n resultados preliminares

El partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) ha sido el vencedor en las elecciones que este domingo se han celebrado en el Estado federado de Turingia, en el este del pa¨ªs. Bj?rn H?cke, el l¨ªder m¨¢s radical de la formaci¨®n clasificada como extremista de derechas por los servicios secretos internos alemanes, se convierte as¨ª en el candidato m¨¢s votado en este land de poco m¨¢s de dos millones de habitantes. H?cke ha obtenido el 32,8% de las papeletas, seg¨²n los resultados preliminares. En Sajonia, el otro Estado de la antigua Alemania oriental que acud¨ªa a las urnas, los ultras han acabado en segunda posici¨®n, con el 30,6% de los votos, por detr¨¢s de los democristianos de la CDU, que han ganado con un solo punto porcentual m¨¢s (31,9%).

Los ultraderechistas han celebrado una victoria ¡°hist¨®rica¡± en las elecciones. ¡°Nos hemos convertido en el partido m¨¢s fuerte en las elecciones estatales por primera vez¡±, ha asegurado Alice Weidel, copresidenta de la formaci¨®n en la televisi¨®n ARD. ¡°Los resultados de hoy son tambi¨¦n un castigo para el Gobierno de Berl¨ªn¡±, a?adi¨®: ¡°Es un r¨¦quiem para esta coalici¨®n. Y la coalici¨®n deber¨ªa preguntarse si puede seguir gobernando. A m¨¢s tardar con las elecciones de Brandeburgo [otro Estado del este alem¨¢n que renueva su Parlamento el 22 de septiembre], tambi¨¦n deber¨ªa plantearse unos nuevos comicios¡±.

Sajonia y Turingia son dos de los Estados m¨¢s peque?os de Alemania. Juntos suman poco m¨¢s de cinco millones de habitantes. Pero los buenos resultados de la ultraderecha en el este pueden desencadenar un terremoto pol¨ªtico que se dejar¨ªa notar en Berl¨ªn, donde el Gobierno de coalici¨®n de Olaf Scholz, formado por socialdem¨®cratas, verdes y liberales, se encuentra en su peor momento de popularidad. El Ejecutivo est¨¢, adem¨¢s, debilitado por las constantes peleas internas y se ve muy presionado para tomar medidas dr¨¢sticas en pol¨ªtica migratoria despu¨¦s del atentado de Solingen, en el que un refugiado sirio de 26 a?os presuntamente mat¨® a cuchilladas a tres personas e hiri¨® de gravedad a otras cinco.

Que AfD sea el partido m¨¢s votado no se traduce en que pueda gobernar. De hecho, es improbable que lo consiga, debido al cord¨®n sanitario que mantienen el resto de partidos pol¨ªticos. Pese a ello, la victoria ultra supone una conmoci¨®n en un pa¨ªs que hab¨ªa conseguido mantener a la extrema derecha reducida a minor¨ªas y que hasta ahora solo hab¨ªa tocado poder en la esfera local. Por primera vez desde la II Guerra Mundial, un partido de extrema derecha tendr¨¢ el mayor n¨²mero de esca?os en uno de los 16 parlamentos estatales de Alemania. Aunque H?cke no gobierne, su fuerza le permitir¨¢ bloquear cambios constitucionales e incluso el nombramiento de jueces.

¡°No deben llamarnos extrema derecha¡±

El l¨ªder de AfD en Turingia ha reclamado su derecho a gobernar en una entrevista que ha dado en el Parlamento regional a la televisi¨®n p¨²blica. H?cke, que al entrar al plat¨® se cruz¨® con Bodo Ramelow, el hasta ahora ministro presidente de Turingia, de La Izquierda, se enfad¨® con el presentador, que le record¨® nada m¨¢s empezar que su partido est¨¢ considerado extremista de derechas. ¡°Somos el partido del pueblo n¨²mero uno en Turingia. No deben llamarnos extrema derecha¡±, le espet¨®. El l¨ªder ultra ha asegurado estar ¡°extremadamente feliz y orgulloso¡± de sus votantes. ¡°Este pa¨ªs necesita un cambio, y solo AfD puede traerlo¡±, a?adi¨®.

AfD vet¨® a toda la prensa la entrada en su fiesta postelectoral, que se celebr¨® en un restaurante italiano de la capital de Turingia. El partido trat¨® de impedir la entrada de los periodistas que considera que no le tratan bien, como los del semanario Der Spiegel, pero los medios recurrieron a la justicia y ganaron. Ante la imposibilidad de escoger a qu¨¦ redactores pod¨ªa invitar, el partido decidi¨® el s¨¢bado por la noche rechazarlos a todos y cerrar completamente el local, excepto para sus afiliados y seguidores. Los l¨ªderes de AfD, incluido H?cke, suelen referirse a los medios de comunicaci¨®n como ¡°l¨¹genpresse¡± (prensa mentirosa) y les acusan de formar parte del ¡°establishment¡± junto con los partidos tradicionales.

Populismo de izquierdas

El otro vencedor de los comicios en Turingia es el partido de la carism¨¢tica l¨ªder populista de izquierdas, Sahra Wagenknecht, que ser¨¢ clave para la formaci¨®n de gobierno. Creada hace solo nueve meses como una escisi¨®n de Die Linke, la formaci¨®n de la izquierda poscomunista ha obtenido el 15,8% de los votos. Buena parte de esos apoyos proceden de su antiguo partido, que ha perdido m¨¢s de 18 puntos porcentuales, comparado con las elecciones de 2019.

En Sajonia, el partido de Wagenknecht (BSW, por sus siglas en ingl¨¦s) ha conseguido el 11,8% de las papeletas. El porcentaje de votos se traduce en un n¨²mero mayor de diputados porque hay varias formaciones que se han quedado por debajo del umbral del 5% y no han obtenido representaci¨®n. Los 15 esca?os de BSW en Turingia y Sajonia sit¨²an a este grupo en una posici¨®n privilegiada para negociar con los conservadores de la CDU.

La fundadora de BSW ha reclamado participar en el Gobierno de Sajonia. ¡°Tenemos muchas esperanzas de acabar formando un buen Gobierno con la CDU¡±, asegur¨® en la televisi¨®n ARD. Wagenknecht destac¨® que muchos votantes les han elegido porque ¡°les conmueve profundamente la cuesti¨®n de la paz y se oponen al estacionamiento de misiles estadounidenses de medio alcance en Alemania¡±. ¡°El Gobierno de un Estado federado debe tener en cuenta este deseo de la gente y hacer campa?a por ¨¦l a nivel federal¡±, a?adi¨®.

Los tres partidos del Gobierno pierden apoyos

Seg¨²n los resultados preliminares, los tres partidos de la coalici¨®n de Olaf Scholz pierden apoyos con respecto a los anteriores comicios. Los liberales del FDP no han conseguido el m¨ªnimo del 5% para entrar en ninguno de los dos parlamentos. Los verdes tampoco lo han logrado en el de Turingia (3,2%) y en el de Sajonia lo han hecho por un escaso margen (5,1%). El partido socialdem¨®crata resiste, pero muy debilitado. En Turingia ha obtenido el 6,1% mientras en Sajonia el resultado es mejor, con el 7,3%.

El SPD de Scholz ven¨ªa de obtener su peor resultado en m¨¢s de un siglo en las elecciones europeas de junio (13,9%), un humillante tercer puesto tras la ultraderecha de Alternativa para Alemania (AfD) que dej¨® el liderazgo del canciller muy tocado. Su coalici¨®n con verdes y liberales sum¨® apenas el 31% de los votos con una participaci¨®n r¨¦cord (64,8%) y dej¨® una pregunta flotando en el ambiente: ?aguantar¨¢ el Gobierno hasta el oto?o de 2025? Es muy probable que la misma pregunta asome este lunes en la resaca electoral de estos comicios en el este alem¨¢n.

Situaci¨®n enrevesada

Con estos resultados, los partidos con representaci¨®n en los dos parlamentos empiezan la complicada labor de negociar los gobiernos de coalici¨®n. La situaci¨®n es especialmente enrevesada. La fuerza de AfD, que concentra casi un tercio del voto, hace que los n¨²meros del resto no alcancen para gobiernos en solitario en ninguno de los dos l?nder.

Andr¨¦ Brodocz, polit¨®logo de la Universidad de Erfurt, explica: ¡°Como los dem¨¢s partidos rechazan coaligarse con la AfD, la probabilidad de que forme parte directamente del Gobierno es muy baja. Solo hay una posibilidad muy, muy peque?a, de que H?cke se convierta en primer ministro si los dem¨¢s partidos no pueden acordar una coalici¨®n. Entonces podr¨ªa convertirse accidentalmente en el l¨ªder de un gobierno en minor¨ªa, como hizo Thomas Kemmerich en 2020¡å. Se refiere a lo que ocurri¨® en 2020, cuando la elecci¨®n del candidato liberal con los votos de AfD provoc¨® un terremoto que acab¨® con la carrera de la sucesora de Angela Merkel, Annegret Kramp-Karrenbauer, entonces presidenta de la CDU.

La CDU parece la mejor posicionada para liderar gobiernos de coalici¨®n en ambos Estados. El democristiano Michael Kretschmer, ministro presidente de Sajonia, ha asegurado estar ¡°dispuesto a seguir asumiendo la responsabilidad¡±.

En Turingia, el l¨ªder de la CDU, Mario Voigt, ha destacado que su formaci¨®n es ¡°la m¨¢s fuerte del centro pol¨ªtico¡± y que la l¨®gica indica que deber¨ªa encabezar la pr¨®xima coalici¨®n de Gobierno. En este caso, las combinaciones posibles son escasas. Sin los verdes, que est¨¢n fuera del parlamento regional, y teniendo en cuenta el cord¨®n sanitario a los ultras, solo suma la mayor¨ªa una alianza de CDU con socialdem¨®cratas, el BSW de Sahra Wagenknecht y Die Linke.

AfD irrumpi¨® en el Parlamento alem¨¢n tras los comicios de septiembre de 2017 con un 12,6%. Nacido en 2013 como un partido que iba contra los rescates de Bruselas y hac¨ªa bandera del euroescepticismo, vir¨® sus consignas hacia el rechazo a la inmigraci¨®n durante la crisis de los refugiados de 2015. Con la pandemia, reenfoc¨® su populismo contra las restricciones, que tildaba de antidemocr¨¢ticas, y se ali¨® con negacionistas y amantes de las teor¨ªas conspirativas para hacer oposici¨®n al Gobierno, primero al de Angela Merkel y despu¨¦s al tripartito de Olaf Scholz.

Bj?rn H?cke, considerado el l¨ªder en la sombra de la formaci¨®n, es el representante de su ala m¨¢s radical, xen¨®foba y ultranacionalista. Este antiguo profesor de historia de instituto, de 52 a?os, lleva a?os protagonizando pol¨¦micas por sus declaraciones revisionistas, como cuando calific¨® de ¡°memorial de la verg¨¹enza¡± el monumento que rinde homenaje a las v¨ªctimas del Holocausto del centro de Berl¨ªn. En los ¨²ltimos meses ha sido condenado en dos ocasiones por emplear un lema nazi (Todo por Alemania) en sus apariciones p¨²blicas.

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