Las v¨ªctimas de la matanza de Nueva Orleans: una madre soltera, un deportista universitario, un estudiante palestino-estadounidense...

Las 14 rosas amarillas que las autoridades de Nueva Orleans colocaron como homenaje a las v¨ªctimas mortales de la matanza de la madrugada de A?o Nuevo en la c¨¦lebre Bourbon Street se han convertido este viernes en un lugar de peregrinaci¨®n, un peque?o santuario donde residentes y turistas van depositando homenajes simb¨®licos ¡ªcollares con los colores de carnaval; velas; ramos de flores; cruces improvisadas¡ª a los fallecidos y los m¨¢s de 30 heridos en el atropello masivo que perpetr¨® el exmilitar Shamsud-Din Jabbar, con una camioneta alquilada en la que llevaba una bandera del Estado Isl¨¢mico (ISIS), en un atentado de inspiraci¨®n yihadista, seg¨²n las investigaciones del FBI. La Casa Blanca ha anunciado que el presidente Joe Biden viajar¨¢ a la ciudad el pr¨®ximo lunes para reunirse con supervivientes y familiares de las v¨ªctimas y rendir homenaje a los fallecidos.

Cada una de las 14 rosas representa una vida perdida. Hasta ahora, las autoridades no han hecho p¨²blica una lista oficial con los nombres de los fallecidos, pero algunos familiares s¨ª han confirmado en redes sociales o a los medios la muerte de sus seres queridos. Entre todos, componen una peque?a muestra de la sociedad estadounidense: una madre soltera que acababa de terminar su mudanza a un apartamento mejor, un inform¨¢tico bromista, una estrella del deporte universitario, un padre de familia que solo hab¨ªa ido all¨ª por insistencia de otro familiar¡­

Esto es lo que se sabe de algunos de ellos.

Nicole Perez, 27 a?os. Esta madre soltera de un ni?o de cuatro a?os acababa de recibir un ascenso en su trabajo. Tras comenzar como camarera en una tienda de comestibles y bocadillos, hab¨ªa quedado al cargo del establecimiento en las afueras de Nueva Orleans. La mejora profesional le hab¨ªa permitido alquilar un apartamento m¨¢s amplio, al que acababa de mudarse con su hijo Melo. No era infrecuente que se llevara al peque?o al trabajo, y aprovechaba all¨ª los ratos libres para leerle cuentos y ense?arle el alfabeto y los n¨²meros.

So?aba, seg¨²n ha declarado su jefa y amiga, Kimberly Usher-Fall al peri¨®dico de la ciudad Times-Picayune, con llegar a ser due?a de su propia empresa. La noche de A?o Nuevo hab¨ªa salido con unos amigos a celebrar la llegada de 2025 en Bourbon Street; la camioneta de Jabbar la embisti¨® de lleno. ¡°Era una madre excelente. Aprend¨ªa r¨¢pido. Solo quer¨ªa tener ¨¦xito¡±, cuenta Usher-Fall.

Ni¡¯kyra Cheyenne Dedeaux, 18 a?os. Originaria del Estado de Misisipi, Dedeaux estaba a punto de empezar sus estudios universitarios de Enfermer¨ªa. En su campus, Blue Ridge, la esperaban el d¨ªa 13 de enero para comenzar su carrera, en la que iba a seguir los pasos de su madre y de su abuela. ¡°Era muy popular y muy inteligente, ten¨ªa much¨ªsimos amigos¡±, ha explicado su madre, Melissa, a USA Today.

La noche de A?o Nuevo hab¨ªa salido en coche sin permiso de sus padres, con una prima y un amigo para celebrar en Nueva Orleans. ¡°Cuando vuestros padres os digan que no vay¨¢is a alg¨²n sitio, escuchadles¡±, escrib¨ªa Melissa Dedeaux en su cuenta en Facebook apenas horas despu¨¦s del suceso en Bourbon Street. ¡°Esto fue un acto de terrorismo y mi beb¨¦ ya no est¨¢¡­ he perdido a mi beb¨¦, por favor recen por m¨ª y por familia¡±.

Reggie Hunter, 37 a?os. Este director de un almac¨¦n, residente de Baton Rouge ¡ªla segunda gran ciudad de Luisiana¡ª, y padre de dos hijos, amante de la moda, al que le parec¨ªa impensable salir si no iba hecho un pincel, decidi¨® ir a Nueva Orleans a ¨²ltima hora, para acompa?ar a uno de sus primos.

Su primo, Kevin Ball, fue golpeado por la camioneta y se recupera de sus lesiones en un hospital. ?l fue arrollado y falleci¨® por heridas internas. ¡°Era el alma de las fiestas¡±, cuenta su prima al digital NewsNation. ¡°Ten¨ªa un sentido del humor fabuloso, hac¨ªa re¨ªr a todo el mundo¡±.

Martin ¡°Tiger¡± Beech, 27 a?os. Brillaba en todo lo que hac¨ªa. Se hab¨ªa graduado con ¨¦xito en su escuela secundaria cat¨®lica y la Universidad de Princeton le reclut¨® para su equipo de f¨²tbol americano. Licenciado en Princeton, hab¨ªa fichado por una empresa financiera en Nueva York, donde se hab¨ªa instalado. Originario del sur de Luisiana, pasaba estas vacaciones en Nueva Orleans para visitar a su familia.

¡°Vivimos en una comunidad relativamente peque?a, donde no mucha gente se marcha, aunque bastantes lo hacen¡±, ha declarado su entrenador juvenil, Marty Cannon, a la agencia AP. ¡°No me sorprende que Tiger se fuera del sur de Luisiana y recibiera una educaci¨®n fabulosa en un sitio como Princeton, y se hiciera all¨ª con una comunidad y acumulase ¨¦xitos. Era ese tipo de persona¡±.

Matthew Tenedorio, 25 a?os. ¡°Estaba comenzando su vida. Ten¨ªa el trabajo de sus sue?os¡±, ha relatado su madre, Cathy Tenedorio, a NBC News. Tenedorio trabajaba como t¨¦cnico audiovisual en el Superdome, el estadio de f¨²tbol americano de Nueva Orleans que los residentes de la ciudad consideran una de las joyas de la corona de su ¡°Big Easy¡±. ¡°Era un chico estupendo¡±, ha contado su padre. ¡°Le encantaba la gente. Le encantaban los animales. Siempre ten¨ªa una sonrisa en la cara. ?Ten¨ªa tantos amigos!¡±.

La familia hab¨ªa pasado junta la v¨ªspera de A?o Nuevo. ¡°Cenamos y tiramos fuegos artificiales, y nos re¨ªmos y abrazamos, cont¨¢ndonos que nos quer¨ªamos mucho todos¡±, recordaba su madre. Ella trat¨® de disuadirle de que se fuera al centro de la ciudad, le parec¨ªa peligroso. Pero ¡°ellos no piensan en el riesgo¡±, se lamentaba.

Kareem Badawi, 18 a?os. Este estudiante palestino-estadounidense de primer curso en la Universidad de Alabama hab¨ªa regresado a Baton Rouge, su ciudad, para pasar las vacaciones con su familia. ¡°Con gran tristeza, pero con el coraz¨®n conforme con la decisi¨®n de Al¨¢, anuncio la muerte de mi hijo Kareem en un accidente en Nueva Orleans¡±, escrib¨ªa su padre en su cuenta en Facebook el 1 de enero.