El regreso de Trump resucita el debate del Brexit en el Reino Unido
Cinco a?os despu¨¦s de que el Reino Unido abandonara la UE, un nuevo informe de 40 acad¨¦micos se?ala que Bruselas sigue condicionando la vida diaria de los brit¨¢nicos
El 31 de enero se cumplir¨¢n cinco a?os desde que el Reino Unido abandon¨® la UE. Desde entonces, el debate econ¨®mico y acad¨¦mico sobre las consecuencias del Brexit se ha movido entre lo malo y lo p¨¦simo; entre los que sostienen que la econom¨ªa brit¨¢nica es un autom¨®vil que avanza con una rueda pin...
El 31 de enero se cumplir¨¢n cinco a?os desde que el Reino Unido abandon¨® la UE. Desde entonces, el debate econ¨®mico y acad¨¦mico sobre las consecuencias del Brexit se ha movido entre lo malo y lo p¨¦simo; entre los que sostienen que la econom¨ªa brit¨¢nica es un autom¨®vil que avanza con una rueda pinchada, cada vez m¨¢s plana, y los que siguen creyendo que se estrell¨® irremediablemente contra un muro. Lo que parece evidente es que, a pesar de la obstinaci¨®n de los pol¨ªticos -tanto conservadores como laboristas- de enterrar en un caj¨®n un asunto t¨®xico que dividi¨® al pa¨ªs y a los partidos, cada nueva sacudida geopol¨ªtica, como el ¡°hurac¨¢n Trump¡±, resucitar¨¢ una discusi¨®n condenada a ser perpetua.
¡°El peligro para el Reino Unido reside hoy en que las acciones de Donald Trump nos obliguen a elegir entre Estados Unidos o la UE. Por ejemplo, puede ofrecernos un acuerdo sobre aranceles que vaya en detrimento de nuestras relaciones comerciales con Bruselas. O quiz¨¢ el precio sea la compra de m¨¢s material estadounidense de defensa, algo que socavar¨ªa nuestra capacidad de cooperar con la UE¡±, se?ala Anand Menon, profesor de Pol¨ªtica Europea y Asuntos Exteriores en el King?s College de Londres.
Junto a otros 40 acad¨¦micos, Menon ha preparado el informe m¨¢s exhaustivo realizado hasta la fecha sobre los proleg¨®menos, el desarrollo y las consecuencias del divorcio pol¨ªtico m¨¢s doloroso del siglo XXI: The Brexit Files (Los Achivos del Brexit) es un intento impulsado por la organizaci¨®n UK in a Changing Europe de mantener viva la cuesti¨®n que m¨¢s ha influido en el devenir del Reino Unido, y que seguir¨¢ influyendo en un mundo en constante convulsi¨®n.
El nuevo primer ministro laborista, Keir Starmer, prometi¨® un ¡°reinicio¡± de las relaciones con la UE, despu¨¦s de a?os de pol¨¦micas agrias fomentadas por los conservadores. M¨¢s all¨¢ de las buenas palabras, sin embargo, Downing Street ha sido incapaz de concretar sus objetivos respecto a Bruselas. Su temor a dar alas a Reform UK, el partido populista liderado por Nigel Farage que hoy representa una amenaza tanto para laboristas como para conservadores, ha llevado a Starmer a rechazar cualquier acercamiento, ya sea una mayor libertad de movimiento para los j¨®venes o un alineamiento m¨¢s estrecho en materia aduanera.
La llegada de Trump, y su indisimulada hostilidad hacia la UE, ha vuelto todav¨ªa m¨¢s inciertas y dudosas las maniobras de Starmer y su equipo. ¡°La reacci¨®n inmediata del Gobierno brit¨¢nico ha sido utilizar el Brexit como un potencial escudo. Si Trump se empe?a en cargar contra la UE, Starmer puede recordarle que el Reino Unido ya no forma parte de ese club, y pedirle que no dirija la carga contra el aliado brit¨¢nico¡±, explica con iron¨ªa John Curtice, el soci¨®logo y analista pol¨ªtico m¨¢s respetado en el Reino Unido, que tambi¨¦n ha participado en el informe. ¡°Curiosamente, esto acerca al Gobierno laborista a la posici¨®n que ten¨ªa el Ejecutivo conservador anterior, que estaba m¨¢s interesado en estrechar lazos con Washington que con Bruselas¡±, se?ala.
El futuro es Europa
La mayor¨ªa de los expertos, sin embargo, advierte contra el ¡°espejismo Trump¡±. Starmer puede verse tentado a elegir lo mejor de ambos mundos ¨C¡±cherry picking, se llama en ingl¨¦s: elegir las mejores cerezas¡±-, pero la lecci¨®n de la historia ha dejado claro que el destino del Reino Unido est¨¢ en Europa.
¡°Una de las lecciones de la prolongada relaci¨®n que el Reino Unido ha cultivado con Estados Unidos es la de que, de hecho, nuestro destino nos conduce a permanecer alineados con la EU, tanto en t¨¦rminos comerciales como de seguridad y defensa. Pero a corto plazo, es comprensible que el Gobierno de Starmer intente evitar lo que podr¨ªa ser un da?o colateral innecesario¡±, justifica Curtice.
Se trata ahora, coinciden los expertos a la hora de dar consejos a Downing Street, de avanzar en un posible acercamiento a Bruselas sin despertar la serpiente del Brexit. O en realizar una diplomacia econ¨®mica y sutil con Washington para evitar el fuego amigo. Cinco a?os despu¨¦s del divorcio con la UE, dos cosas han quedado claras. Las exportaciones de productos manufacturados han sufrido las consecuencias de una mayor fricci¨®n aduanera, pero el Reino Unido sigue siendo una potencia de primer orden en el sector servicios. Y Estados Unidos, su principal mercado.
¡°El Reino Unido se sostiene fundamentalmente con la exportaci¨®n de servicios a Estados Unidos y de productos manufacturados a la UE¡±, se?ala Sara Hall, profesora de Geograf¨ªa de la Universidad de Cambridge y vicedirectora de UK in a Changing Europe. ¡°Por eso el Gobierno de Starmer ha comenzado ya a articular una estrategia para convencer a Washington de que tenga en cuenta esta particularidad, y nos mantenga fuera de una futura guerra comercial con la subida de aranceles¡±, resalta Hall.
No todos los expertos creen que el Gobierno brit¨¢nico podr¨¢ jugar mucho tiempo a doble banda. ¡°Todas las decisiones que pueden provocar cambios significativos -en materia de seguridad, sobre todo- han quedado apartadas. Son decisiones que suponen una mayor integraci¨®n de la industria de defensa, o una pol¨ªtica conjunta de adquisiciones. Todo eso tiene implicaciones financieras y de seguridad nacional¡±, indica Simon Usherwood, profesor de Pol¨ªtica y Estudios Internacionales en la Open University. ¡°Me temo que lo que tenemos por delante ser¨¢ m¨¢s embrollo y confusi¨®n, antes que la articulaci¨®n de una estrategia concreta¡±, expresa con un pesimismo resignado.
La gran paradoja con que concluye el informe de los expertos es que aquella aspiraci¨®n con que el Brexit tuvo alas, que el Reino Unido recuperara el control de su destino -take back control, era el eslogan- es un sue?o imposible: ¡°Cinco a?os despu¨¦s del Brexit, la UE contin¨²a perfilando nuestra vida diaria de modo muy importante, aunque ya no formemos parte del club¡±, afirma.