Una mayor¨ªa de pa¨ªses de la UE pide al Banco Europeo de Inversiones m¨¢s financiaci¨®n para la defensa europea
Espa?a y otros 18 Estados miembros env¨ªan una carta a la presidenta de la entidad, Nadia Calvi?o, reclam¨¢ndole que aumente los pr¨¦stamos a la industria b¨¦lica
La carrera armamentista a la que se quiere sumar Europa necesita dinero. Mucho. Y para eso hay que echar mano de todos los recursos y herramientas al alcance. Una de ellas es el Banco Europeo de Inversiones (BEI), al que 19 pa¨ªses de la UE, entre ellos, Espa?a, Alemania, Italia y Francia, acaban de enviar una carta para que ¡°ajuste su pol¨ªtica crediticia para aumentar el volumen de financiaci¨®n disponible en el campo de la Seguridad y la Defensa¡±. La misiva, firmada por los primeros ministros de estos Estados, llega tres d¨ªas antes de la cumbre que se celebrar¨¢ el pr¨®ximo lunes, en la que se abordar¨¢ un solo tema: la defensa europea.
Desde que Nadia Calvi?o lleg¨® a la presidencia del BEI, hace ahora un a?o, se le ha reclamado que la entidad que dirige preste m¨¢s dinero para proyectos de seguridad y defensa. Y lo ha hecho. En un solo a?o ha duplicado las inversiones en este campo al pasar de 500 millones de euros a 1.000 millones en 2024. Tambi¨¦n modific¨® sus criterios para facilitar la concesi¨®n de pr¨¦stamos a este tipo de actividades. Y este mismo jueves, en la presentaci¨®n de los resultados del banco del a?o pasado, la espa?ola anunci¨® que duplica el objetivo de cr¨¦ditos para defensa, hasta los 2.000 millones.
Pero todo esto no es suficiente para la mayor¨ªa de l¨ªderes de la UE. En la carta enviada, los 19 Estados exigen al BEI que ¡°reeval¨²e la lista de actividades excluidas¡± en su pol¨ªtica crediticia, que destine m¨¢s l¨ªneas de cr¨¦dito a los proyectos de defensa y que estudie la ¡°posibilidad de que el BEI emita deuda espec¨ªfica y reservada para financiar proyectos de seguridad y defensa¡±.
Por ahora, el BEI se ha limitado a dar cuenta de que ha recibido el texto y recuerda que Calvi?o ya el jueves afirm¨® que la entidad estaba calibrando sus ¡°instrumentos financieros para evaluar si son necesarios nuevos cambios en nuestras normas de elegibilidad¡±, es decir, ampliar los criterios para dar m¨¢s cr¨¦ditos a estas actividades.
Es cierto que en los ¨²ltimos a?os, el mayor banco p¨²blico europeo ha cambiado su pol¨ªtica para financiar proyectos vinculados a la industria b¨¦lica. Eso se ha intensificado en el ¨²ltimo a?o, especialmente desde que el pasado abril elimin¨® obst¨¢culos para invertir en este campo y abri¨® canales que facilitaran la comunicaci¨®n con el sector. Sin embargo, los pr¨¦stamos concedidos a esta industria todav¨ªa tienen un peso muy bajo en la cartera total: esos 1.000 millones de cr¨¦dito nuevo otorgado el a?o pasado suponen apenas el 1,1% del total (en 2024 la inversi¨®n nueva ascendi¨® a 89.000 millones), y los 2.000 previstos para este ejercicio solo elevar¨ªan el porcentaje hasta el 2,1%.
Calvi?o nunca ha rehusado aumentar la apuesta del BEI por la defensa. Tampoco puede hacerlo, puesto que los accionistas de esta entidad ¨Duna suerte de ICO de la UE¡ª son los propios Estados que componen la Uni¨®n y su consejo est¨¢ integrado por los ministros de Finanzas de la Uni¨®n. Pero ella siempre ha advertido de que ¡°es importante que cada actor en este mercado se centre en los ¨¢mbitos en los que tiene un mayor valor a?adido¡±. Con estas palabras, viene a decir que al BEI le corresponde financiar actividad industrial y de investigaci¨®n, pero no la compra de armas o municiones por parte de los Estados.
No parece que sea esta sea la intenci¨®n de los mandatarios, puesto que en la propia carta indican que se trata de favorecer la inversi¨®n empresarial en este campo: ¡°La mejora del acceso a la financiaci¨®n del BEI y la aceleraci¨®n de las inversiones en seguridad y defensa en la UE impulsar¨ªan la financiaci¨®n privada y tendr¨ªan un fuerte efecto de se?alizaci¨®n frente a otros inversores y operadores del mercado¡±.
Que la carta, que tambi¨¦n cuenta con la firma del presidente del Gobierno espa?ol, Pedro S¨¢nchez, llegue en v¨ªsperas de la cumbre europea del lunes deja muy claro por d¨®nde van las intenciones de los l¨ªderes de la Uni¨®n para esa cita. La misiva no solo se dirige a Calvi?o, sino que tambi¨¦n tiene como destinatarios a Ant¨®nio Costa, presidente del Consejo Europeo, y a Donald Tusk, primer ministro de Polonia, el pa¨ªs que preside el Consejo de la UE durante la primera mitad de 2025. Esto tambi¨¦n qued¨® definido en el propio texto de la convocatoria que escribi¨® Costa el pasado 13 de enero, en el que figuraba de forma destacada la expresi¨®n: ¡°Europa necesita asumir m¨¢s responsabilidad en su propia defensa¡±.
Esta ¨²ltima frase es, sin duda, un mensaje al nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha reclamado a los socios de la OTAN que aumenten el gasto en seguridad hasta el 5% del PIB, m¨¢s del doble del m¨ªnimo que fija ahora la Alianza Atl¨¢ntica como objetivo (2%).
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