Estas son las principales carencias en la dieta de los ni?os espa?oles
La vitamina D es el nutriente cuya ingesta habitual est¨¢ m¨¢s alejada de la recomendada. Tambi¨¦n los menores est¨¢n faltos de calcio, magnesio y ¨¢cidos grasos omega-3
De entre las m¨²ltiples preocupaciones que tenemos los padres, una de las que nos persiguen durante m¨¢s tiempo es la alimentaci¨®n de nuestros hijos. Nos preocupa a pesar de que (o precisamente por que) no siempre tenemos suficiente tiempo para preparar a diario el men¨² perfecto, completo y sin demasiadas grasas ni az¨²cares. La vida nos supera a menudo. Y el teletrabajo no ayuda. Por eso es importante saber cu¨¢les son las principales carencias de su dieta para poder as¨ª atajarlas con los menores quebraderos de cabeza posible.
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De entre las m¨²ltiples preocupaciones que tenemos los padres, una de las que nos persiguen durante m¨¢s tiempo es la alimentaci¨®n de nuestros hijos. Nos preocupa a pesar de que (o precisamente por que) no siempre tenemos suficiente tiempo para preparar a diario el men¨² perfecto, completo y sin demasiadas grasas ni az¨²cares. La vida nos supera a menudo. Y el teletrabajo no ayuda. Por eso es importante saber cu¨¢les son las principales carencias de su dieta para poder as¨ª atajarlas con los menores quebraderos de cabeza posible.
El Estudio Nutricional en Poblaci¨®n Infantil Espa?ola (EsNuPi), promovido por la Fundaci¨®n Iberoamericana de Nutrici¨®n (FINUT) y la Fundaci¨®n Espa?ola de la Nutrici¨®n (FEN) arroja un dato que resulta bastante llamativo: la carencia de Vitamina D en la dieta de los peque?os. Rosa Ortega Anta, profesora de Nutrici¨®n en la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid, es una de las autoras del estudio, para el que se realizaron un total de 1.514 encuestas personales y 1.449 telef¨®nicas a padres, madres y tutores de ni?os de entre uno y diez a?os: ¡°En efecto, en todos los grupos estudiados, la ingesta de vitamina D fue inferior a la adecuada¡±. Y a?ade: ¡°Considerando todos lo nutrientes, la vitamina D es la que muestra mayor alejamiento entre ingesta habitual e ingesta adecuada, de modo que la pr¨¢ctica totalidad de los ni?os tienen ingestas insuficientes.¡±.
Lo grave del asunto es que este nutriente es fundamental para la estructura ¨®sea de los peque?os porque ¡°ayuda a nuestros huesos a absorber y retener el calcio que necesitan para estar fuertes¡±. Y no solo eso: ¡°Funciona como una hormona con propiedades inmunomoduladoras y es, por tanto, fundamental tambi¨¦n para mantener una buena salud inmunitaria¡±. Es decir, esa que nos ayuda a luchar contra virus como el SARS-coV-2, causante de la covid-19. Por si esto nos parece poco, ¡°adem¨¢s ejerce otras funciones que permiten el buen funcionamiento del sistema cardiovascular, neurol¨®gico, hematopoy¨¦tico y endocrino¡±, asegura Ortega.
La buena noticia es que es sencillo aumentar la cantidad de Vitamina D en nuestro cuerpo. ¡°Las principales fuentes que tiene nuestro organismo para conseguirla son el sol y los alimentos. Teniendo en cuenta que en Espa?a disponemos de suficientes horas de sol al d¨ªa, la hipovitaminosis D de los ni?os espa?oles parece estar asociada a la dieta.¡± Una dieta en la que debe de volver a tener lugar predominante la leche y sus derivados, principalmente las leches adaptadas y reforzadas. ¡°La ingesta de Vitamina D de los ni?os que consumen leches adaptadas es entre dos y tres veces mayor que la de los que no las consumen¡±. Tambi¨¦n son una buena fuente de este nutriente los pescados, sobre todo los grasos y azules (aportan el 24%), los mariscos, los huevos y los cereales integrales. Lo malo es que precisamente son los alimentos menos habituales en la dieta de los ni?os espa?oles.
Por el contrario, ¡°consumen un exceso de energ¨ªa, de prote¨ªnas y de az¨²cares libres¡±, asegura , Jos¨¦ Manuel Moreno Villares, coordinador del Comit¨¦ de Nutrici¨®n y Lactancia Materna de la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa (AEP). Lo que provoca que alrededor de un 40% de ni?os y ni?as de 6 a 9 a?os tenga exceso de peso, seg¨²n el estudio Aladino 2019, elaborado por el Ministerio de Sanidad y la Agencia Espa?ola de Seguridad Alimentaria y Nutrici¨®n. Aunque este porcentaje se reduzca hasta un 30% en adolescentes, la realidad es que la alimentaci¨®n de los ni?os espa?oles es mejorable.
Rosa Ortega comenta que ¡°conviene que los ni?os no se salten el desayuno, distribuyan los alimentos en 4-5 comidas y realicen m¨¢s actividad, evitando el sedentarismo, pues esta falta de actividad lleva a un bajo gasto energ¨¦tico y a la necesidad de comer menos para evitar el sobrepeso/obesidad¡±. Por otro lado, consumir menos alimentos supone ingerir menos vitaminas y minerales y aumentar el riesgo de sus carencias. Porque la Vitamina D no es la ¨²nica que habr¨ªa que reforzar. ¡°El estudio EsNuPi ha puesto de manifiesto que tampoco son adecuadas las ingestas de calcio y magnesio, nutrientes que tambi¨¦n son esenciales para la salud ¨®sea y metab¨®lica de los ni?os¡±. Moreno Villares tambi¨¦n apunta a la falta de ¨¢cidos grasos omega-3 (DHA) en algunos grupos de edad.
A largo plazo, estas carencias pueden afectar ¡°a la salud ¨®sea, pero tambi¨¦n metab¨®lica, inmunol¨®gica, funcional¡±, comenta la profesora de la UCM. Y eso no es lo peor, como apunta el pediatra de la AEP: ¡°Unos malos h¨¢bitos en la infancia suelen llevan a unos malos h¨¢bitos en la edad adulta. La presencia de obesidad en la edad infantil se asocia a mayor riesgo de obesidad en la edad adulta, con consecuencias bien conocidas. Empezamos a ver en algunos adolescentes y j¨®venes con obesidad algunos de los problemas que antes solo ve¨ªamos en el adulto: hiperglucemia, hipertensi¨®n, problemas ¨®seos y articulares, apena del sue?o¡¡±
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