El general Salvador Cienfuegos pide tiempo al juez para negociar con la Fiscal¨ªa de Estados Unidos

La oficina de la Fiscal¨ªa de Estados Unidos en el distrito este de Nueva York y la defensa del general Salvador Cienfuegos han pedido al juez que ampl¨ªe el plazo previo a la apertura del juicio. Las partes han alegado que es posible que ¡°las negociaciones resulten en que el caso se resuelva sin juicio¡±. La fiscal¨ªa acusa al general, exsecretario de la Defensa durante el Gobierno de Enrique Pe?a Nieto (2012-2018), de narcotr¨¢fico y lavado de dinero.

La F¨ªscal¨ªa y la defensa de Cienfuegos argumentan adem¨¢s que el caso es muy complejo y necesitan tiempo adicional para prepararse. El antiguo jefe del Ej¨¦rcito vive recluido en una prisi¨®n de la costa este estadounidense, a la espera de la pr¨®xima audiencia, que se celebrar¨¢ el 18 de noviembre. La ¨²ltima vez que estuvo ante el juez, de manera virtual, fue el 6 de noviembre, cuando se declar¨® inocente de los cargos que le imputan.

Cienfuegos fue detenido el 15 de octubre en el aeropuerto de Los ?ngeles. La justicia de EE UU lo buscaba desde agosto del a?o anterior, cuando el juez hab¨ªa ordenado su captura. La noticia cay¨® como una bomba en M¨¦xico. Cienfuegos era el segundo funcionario de primer nivel detenido en pocos meses en el pa¨ªs vecino, despu¨¦s de la captura, en diciembre de 2019, del jefe de la polic¨ªa del Gobierno de Felipe Calder¨®n (2006-2012). El caso Cienfuegos explotaba adem¨¢s en medio de uno de los procesos por corrupci¨®n m¨¢s relevantes de los ¨²ltimos a?os en M¨¦xico, el caso contra el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, acusado de recibir sobornos de la empresa Odebrecht.

Si el caso Lozoya pone la lupa sobre los manejos de la rama tecn¨®crata del Gobierno de Pe?a Nieto, el asunto sobre Cienfuegos apunta al aparato de seguridad. Con la violencia sacudiendo M¨¦xico de norte a sur, el m¨¢ximo responsable del Ej¨¦rcito, punta de lanza de la estrategia del Gobierno contra el crimen, se habr¨ªa dedicado a organizar env¨ªos de droga a Estados Unidos.

Esa es al menos la tesis de la Fiscal¨ªa, que dice contar con miles de mensajes de tel¨¦fono, entre otras pruebas, que evidencian las corruptelas de Cienfuegos, a quien apodan El Padrino. Seg¨²n la Fiscal¨ªa, el general colabor¨® con un grupo criminal para mandar marihuana, coca¨ªna y metanfetaminas a Estados Unidos, al menos de diciembre de 2015 a febrero de 2017. Los investigadores llaman a ese grupo el cartel del H-2, una escisi¨®n de la red criminal de los hermanos Beltr¨¢n Leyva.

Seg¨²n la Fiscal¨ªa, ¡°el acusado se asegur¨®, a cambio de sobornos, de que no se realizaran operaciones militares en contra de este cartel, inici¨® operativos contra organizaciones de narcotraficantes rivales, localiz¨® embarcaciones para env¨ªos de droga, ayud¨® al cartel a expandirse a Mazatl¨¢n y el resto de Sinaloa, present¨® a integrantes de la red criminal con funcionarios del Gobierno mexicano dispuestos a colaborar y alert¨® de las investigaciones que manten¨ªan las agencias de Estados Unidos sobre la red del H-2¡±.

La petici¨®n de la Fiscal¨ªa y la defensa del general es relativamente habitual. En el caso de Garc¨ªa Luna, ambas partes acudieron al juez por el mismo motivo. Entonces se especul¨® con que Garc¨ªa Luna valorara declararse culpable, cosa que de momento no ha ocurrido.