Desde tuber¨ªas arrancadas a miles de pesos en equipo electr¨®nico: las escuelas mexicanas son saqueadas durante la pandemia

Ni la cuarta, ni la quinta, ni la sexta. Las docentes de una escuela industrial de Veracruz tampoco creen que esta vez, la s¨¦ptima desde que empez¨® la pandemia, sea la ¨²ltima que ladrones irrumpan en el centro educativo. Entre marzo de 2020 y marzo de 2021, las escuelas de M¨¦xico han sufrido casi 7.000 robos, de acuerdo con datos de las fiscal¨ªas estatales y las secretar¨ªas de Educaci¨®n recopilados por EL PA?S. En algunos casos, como en el de esta instituci¨®n de Veracruz, los delincuentes se han llevado material escolar, pero tambi¨¦n han destrozado las instalaciones para arrancar tuber¨ªas y cables. El regreso a clases est¨¢ marcado para junio, pero estas profesoras se preguntan: ¡°?D¨®nde se van a lavar las manos los alumnos, d¨®nde van a ir a hacer sus necesidades, con qu¨¦ luz? ?C¨®mo vamos a trabajar sin instalaciones?¡±.

Cecilia Ojeda, la directora de esta instituci¨®n del sureste de M¨¦xico que capacita a personas para que puedan autoemplearse, dice que ya ¡°se han llevado casi todo¡±. Tanto, que ¡°no est¨¢n en condiciones¡± de que sus alumnos puedan volver ahora, cuando las autoridades han dado luz verde para el regreso. Los estudiantes de este centro educativo saqueado tendr¨¢n que esperar, por lo menos, a agosto. Los asaltantes de escuelas a lo largo de todo el pa¨ªs se llevan lavabos, grifos, v¨¢teres, proyectores, bocinas, ordenadores, instrumentos musicales, ventiladores, archiveros, impresoras o tuber¨ªas de cobre. Corre riesgo todo lo que encuentran a su paso. Pero no solo es lo que roban, cuenta Ojeda: ¡°Destruyen cosas, rompen ventanas, fuerzan chapas, dejan desbaratados los marcos de las puertas y de las ventanas. Han dejado orinados los salones de clases y han defecado¡±.

En noviembre, la escuela contrat¨® seguridad privada, pero a¨²n as¨ª no han conseguido frenar los hurtos. Y situaciones similares, en menor o mayor grado, se repiten en otros centros del pa¨ªs. En una primaria de Tepic, en Nayarit, cada familia ha empezado a pagar 30 pesos al mes para la vigilancia. En una escuela rural de Guanajuato, los padres y las madres se organizaron en ¡°brigadas de mantenimiento y vigilancia¡± para cuidar las instalaciones. En la escuela Felipe ?ngeles de Pachuca (Hidalgo) no contaban con recursos para veladores, as¨ª que instalaron alarmas y c¨¢maras de seguridad. El 8 de marzo, los asaltantes cortaron todas las conexiones antes de forzar los barrotes de seguridad, romper el vidrio de la sala de direcci¨®n y llevarse tres proyectores y una bocina. Un bot¨ªn valorado en 25.000 pesos (unos 1.250 d¨®lares). ¡°Estudian tanto el lugar que saben evitar las alarmas y las c¨¢maras. Llevamos ya un a?o a distancia y nos sentimos vulnerables¡±, cuenta Roc¨ªo L¨®pez, su directora.

Desde que empez¨® la pandemia de la covid-19 en marzo de 2020, se han producido al menos 6.865 robos en centros educativos p¨²blicos y privados, de acuerdo con los datos de 25 entidades federativas recopilados por EL PA?S a trav¨¦s de las fiscal¨ªas, las secretar¨ªas de Educaci¨®n o de solicitudes de acceso a la informaci¨®n. Este peri¨®dico pidi¨® datos sobre las carpetas de investigaci¨®n iniciadas por robos en escuelas de la Rep¨²blica. Sin embargo, algunas entidades federativas, como el Estado de M¨¦xico, incluyen en su total de cifras otros espacios donde se imparten clases, como escuelas de m¨²sica, adem¨¢s de las instituciones de educaci¨®n infantil, primaria, secundaria y bachillerato. Siete Estados ¡ªColima, Baja California Sur, Guerrero, Yucat¨¢n, Puebla, Zacatecas y Sonora¡ª no han ofrecido datos, en algunos casos justificando que el robo a escuelas no es un delito tipificado y que se trata de estad¨ªsticas que deben crearse. La Secretar¨ªa de Educaci¨®n P¨²blica federal tampoco cuenta con registros agrupados.

Esta cifra implica que en el pa¨ªs se han producido una media de 18 robos diarios durante el a?o que las escuelas han permanecido cerradas. M¨¦xico es uno de los pa¨ªses que m¨¢s restricciones ha puesto al regreso a clases. Mientras otros pa¨ªses latinoamericanos o europeos flexibilizaban la vuelta, el Gobierno de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador apost¨® por que los ni?os volver¨ªan a las aulas solo cuando los maestros de cada Estado estuvieran vacunados y la entidad en sem¨¢foro epidemiol¨®gico verde, que implica un riesgo bajo de contagios. Este viernes, la secretaria de Educaci¨®n, Delfina G¨®mez, ha confirmado que el fin de semana termina la vacunaci¨®n de todo el personal docente del pa¨ªs, cuando concluya la inmunizaci¨®n en Puebla y Chihuahua.

¡°Oficialmente¡±, ha dicho L¨®pez Obrador, las clases presenciales regresar¨¢n este 7 de junio de forma ¡°voluntaria¡±. ¡°Hay condiciones para el regreso. No podemos demorarnos porque nos va a significar atrasos¡±, ha defendido. Algunos Estados, como Campeche, ya hab¨ªan reabierto. All¨ª las autoridades fueron cautelosas antes de empezar a rehabilitar los centros ¡°para evitar que se volvieran a llevar las cosas¡±, seg¨²n se?al¨® en marzo el secretario de Educaci¨®n, Ricardo Koh, que a?adi¨® que, sobre todo, los cables y otras instalaciones el¨¦ctricas reci¨¦n reparadas se volv¨ªan a robar. ¡°En algunos centros ya no tienen m¨¢s que llevarse, solo entran a vandalizar¡±, agreg¨®. En esta entidad federativa, hubo casi siete robos al mes a escuelas durante la pandemia, una de las medias m¨¢s bajas del pa¨ªs, de acuerdo con las cifras recopiladas por este peri¨®dico.

Otros Estados como Jalisco o Guanajuato han registrado, de media, una mayor cantidad de robos mensuales en el ¨²ltimo a?o: 65,2 en Jalisco, es decir, m¨¢s de dos al d¨ªa, y 48,5 en Guanajuato, m¨¢s de uno diario. La capital del pa¨ªs ha sufrido m¨¢s de 23 robos al mes de media. A¨²n as¨ª, la jefa de Gobierno de la Ciudad de M¨¦xico, Claudia Sheinbaum, asegura que no es ¡°un problema generalizado¡± ni ¡°grande para la ciudad¡±: ¡°Son muy poquitas donde ha habido una vandalizaci¨®n mayor, donde entraron a robarse una taza de ba?o o una computadora. En la gran mayor¨ªa es algo menor: se pintaron graffitis dentro o se rompieron vidrios¡±.

Emmanuel Fern¨¢ndez, sin embargo, se siente inseguro. Lleva seis a?os como conserje en el colegio Carlos Darwin de Iztapalapa y nunca hab¨ªa afrontado un robo. Desde que comenz¨® la pandemia han asaltado la escuela en dos ocasiones. La primera, en septiembre, se llevaron de los salones las tabletas electr¨®nicas y material personal de los docentes. En la ¨²ltima, hace apenas dos semanas, forzaron la entrada en las dos ¨²nicas habitaciones que no hab¨ªan ingresado: la direcci¨®n y la clase del turno vespertino. Todav¨ªa est¨¢n los rastros del asalto: los armarios quebrados, los candados destrozados y, en los escritorios, los teclados de unos ordenadores ya sin pantalla ni procesador.

¡°Temo que vuelvan a venir en cualquier momento¡±, cuenta Fern¨¢ndez, que desde hace d¨ªas no sale del recinto para vigilar. Desde su cancha de f¨²tbol, ahora vac¨ªa, se ve otra escuela. Los dos centros comparten calle en el Cerro de la Estrella, la decoraci¨®n con flores de colores en los muros y ahora tambi¨¦n los asaltos. En la escuela de primaria Ram¨®n Espinosa Villanueva entraron una madrugada de noviembre. Se llevaron todo el equipo de c¨®mputo, la alcantarilla que daba entrada al centro y hasta el cloro y el jab¨®n que estaba guardado en un almac¨¦n. Iztapalapa, con 69 robos, es la alcald¨ªa de la capital que m¨¢s asaltos ha registrado.

Los robos suben en algunos Estados

Los robos a escuelas en M¨¦xico no son exclusivos de este ¨²ltimo a?o. En 2019, por ejemplo, el reci¨¦n electo presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador orden¨® el despliegue de la Guardia Nacional en el Estado de Puebla por los robos a esos centros en el Estado. En Ciudad de M¨¦xico la situaci¨®n tambi¨¦n fue m¨¢s problem¨¢tica en 2019, cuando robaron 584 escuelas, que en este primer a?o de crisis sanitaria, cuando el n¨²mero es 296. Pero el abandono obligado por la pandemia ha empeorado la situaci¨®n en algunos Estados. De acuerdo con la informaci¨®n recopilada por EL PA?S, en Jalisco, por ejemplo, este tipo de delito creci¨® m¨¢s del 100% en el ¨²ltimo a?o; en Veracruz, un 88%; en Nuevo Le¨®n, casi un 8%.

Cecilia Ojeda, que tras el ¨²ltimo robo dice notar una ¡°segunda ola¡± de delitos contra escuelas, reclama ¡°apoyos efectivos¡±. L¨®pez Obrador prometi¨® en febrero una inversi¨®n de 12.000 millones de pesos como parte del programa La Escuela es Nuestra, una iniciativa del Gobierno federal orientada a la rehabilitaci¨®n de la infraestructura escolar, para poner en condiciones los centros. Adem¨¢s, la Secretar¨ªa de Educaci¨®n P¨²blica cuenta con un seguro para atender estos hurtos que aplica para todo el pa¨ªs. En Sinaloa, donde 204 escuelas reportaron robos o da?os a sus instalaciones durante la pandemia, ¡°nunca antes¡± se hab¨ªa cobrado el seguro institucional por este delito, seg¨²n afirman fuentes estatales. La reparaci¨®n por los saqueos de solo tres centros le costar¨¢ al seguro casi 167.000 pesos (unos 8.300 d¨®lares).

Pero Ojeda es cauta: ¡°Por desgracia siempre nos dicen que vamos a recibir el apoyo, que van a checar c¨®mo est¨¢n las instalaciones¡­ A m¨ª me gustar¨ªa que sean apoyos de verdad¡±. Siete veces irrumpieron en las instalaciones en las que trabaja esta docente y siete veces hizo ¡°lo correspondiente¡±: ¡°Vamos a la Fiscal¨ªa y notificamos lo que sucedi¨®, pero no sabemos si les dan un seguimiento¡±. En un pa¨ªs en el que la impunidad ronda el 90%, es habitual que una parte de las denuncias no se resuelva. Los medios locales han reportado algunas detenciones por este motivo, como en Puebla, donde fueron arrestados 10 presuntos integrantes de una banda que se dedicaba a irrumpir en centros educativos. En Veracruz, sin embargo, los docentes no han parado de contar robos: ¡°Han dejado muchos planteles a la deriva¡±.

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