L¨®pez Obrador descarta ceder en los presupuestos a cambio del aval del PRI a la reforma el¨¦ctrica

Los presupuestos no entrar¨¢n en la negociaci¨®n por la reforma el¨¦ctrica. Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador ha descartado hacer cualquier concesi¨®n en las cuentas p¨²blicas del a?o que viene a cambio de conseguir los votos que necesita del PRI para sacar adelante los cambios en el sector el¨¦ctrico, la gran apuesta de Morena para la segunda mitad del sexenio. ¡°No, eso es politiquer¨ªa. Es lo que se hac¨ªa antes, que se encerraban, negociaban en la c¨²pula a espaldas del pueblo y siempre se pon¨ªan de acuerdo porque les iba bien a los de arriba. Ning¨²n tipo de negociaci¨®n que afecte al pueblo¡±, ha dicho este lunes el presidente durante su conferencia matutina en Palacio Nacional. Morena aspira a llevar al parlamento su primera gran reforma de esta legislatura a mediados del mes que viene y necesita el apoyo de parte de la oposici¨®n para sacarla adelante.

Tras las elecciones de junio, se abri¨® un nuevo escenario que pasa obligatoriamente por lograr acuerdos entre el bloque de Morena y sus socios en el parlamento, que perdieron la mayor¨ªa cualificada que abre las puertas a las reformas constitucionales, con los grupos de oposici¨®n. Desde la presentaci¨®n a principios de este mes del borrador de la reforma el¨¦ctrica, todas las miradas se centran en el PRI, presionado desde todos los flancos para que defina su postura. La decisi¨®n final del hist¨®rico partido mexicano dibujar¨¢ en gran medida los equilibrios de poder en la c¨¢mara de cara a las otras dos grandes reformas con las que L¨®pez Obrador pretende coronar su mandato: la electoral y la Guardia Nacional.

El apoyo del PRI a la apuesta el¨¦ctrica de Morena, que supone en la pr¨¢ctica desmontar buena parte de la liberalizaci¨®n del mercado energ¨¦tico impulsada por el Gobierno de Enrique Pe?a Nieto, significar¨ªa tambi¨¦n una herida casi mortal para la alianza opositora. En un ins¨®lito movimiento, el PRI y el PAN, antagonistas hist¨®ricos, decidieron conformar, junto al PRD, un pacto electoral para hacer frente al rodillo de Morena en los ¨²ltimos comicios. El plan de todos contra Morena, que logr¨® arrebatar al partido oficialista la mayor¨ªa absoluta, aspira tambi¨¦n a convertirse en un frente con un programa com¨²n.

Cuadros del PAN y el PRD han alertado de que mantener cerradas las filas respecto a esta primera reforma ser¨¢ clave para la supervivencia de la alianza llamada Va por M¨¦xico. De hecho, el bloque opositor pretende esta semana dar un paso m¨¢s en su agenda com¨²n con la presentaci¨®n de una contrapropuesta al presupuesto de egresos. Un plan que supondr¨ªa un recorte del 20% de los recursos asignados a las grandes obras de infraestructura y elevar el precio previsto para el barril de petr¨®leo. La mayor¨ªa simple de Morena es suficiente para sacar adelante los presupuestos, pero el movimiento de la alianza pretende escenificar una posici¨®n de fuerza y unidad en la oposici¨®n.

Sectores cr¨ªticos de la actual direcci¨®n del PRI, como la senadora Claudia Ruiz Massieu, exsecretaria durante el ¨²ltimo gobierno priista, tambi¨¦n han levantado la voz ante la tibieza del partido. Massieu alert¨® hace un par de semanas que apoyar la reforma supondr¨ªa una doble contradicci¨®n porque hace apenas cinco meses las l¨ªneas maestras del cambio legislativo que propone el gobierno ya fueron impugnadas ante la Suprema Corte por un grupo de legisladores de la oposici¨®n, incluido el PRI.

La respuesta de momento por parte del partido tricolor ha sido ganar tiempo convocando foros con expertos para analizar los detalles de la reforma. Una convocatoria acompa?ada de comunicados lo suficientemente equidistantes para justificar las dos opciones: ¡°Queremos un sector el¨¦ctrico que fortalezca a nuestra Comisi¨®n Federal de Electricidad (CFE), orgullo de este pa¨ªs. Pero tambi¨¦n se debe de buscar que no se deterioren m¨¢s las finanzas p¨²blicas de nuestro M¨¦xico¡±. Dividido internamente y muy mermado en su poder territorial ¡ªtan solo cuenta con cuatro gubernaturas, su peor balance hist¨®rico¡ª, el PRI ha mantenido una posici¨®n de ambig¨¹edad tras las elecciones dej¨¢ndose querer por ambos bloques en busca de recuperar la influencia perdida y contraprestaciones de cara al futuro.

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