La medicina pospandemia y los cuidadores del futuro

La pandemia cambi¨® en tiempo real la forma en que se aprende, se piensa y se practica la medicina y el cuidado. Estudiantes, cient¨ªficos y trabajadores de salud de Am¨¦rica Latina cuentan c¨®mo la covid-19 transform¨® sus experiencias y qu¨¦ creen que puede o debe cambiar en los sistemas sanitarios de la regi¨®n

La medicina pospandemia
y los cuidadores del futuro

Ir al contenido

Apenas hace falta escarbar un poco en la superficie de internet para toparse con una especie de profec¨ªa: reportajes, pel¨ªculas, entrevistas, novelas, documentos y libros de no-ficci¨®n que, desde unos pocos meses hasta varios a?os antes de las primeras noticias sobre el nuevo coronavirus, anticipaban la llegada inminente de una pandemia ¡ªen algunos casos con un nivel de precisi¨®n sorprendente¡ª y advert¨ªan que el mundo no estaba preparado para enfrentarla. Ambas cosas eran ciertas. Pero no sirvi¨® de mucho.

Incluso con la pandemia encima, cuando las noticias de Asia y Europa permit¨ªan ver en directo lo que se avecinaba, la mayor¨ªa de los gobiernos de Am¨¦rica Latina solo fueron asumiendo la realidad a fuerza de golpes, pasando del optimismo injustificado (el virus no contagia tanto en climas c¨¢lidos) a la negaci¨®n (no es m¨¢s grave que la gripe) y la resignaci¨®n (ning¨²n pa¨ªs estaba estaba preparado), para terminar en el mismo lugar donde terminaron todos: llamando ¡°h¨¦roes¡± al personal de salud que, hasta hac¨ªa poco, les reclamaba por los insumos m¨¢s elementales de protecci¨®n, y que tuvo que cargar con los errores pol¨ªticos del presente y del pasado. Daba igual de qui¨¦n fuera la culpa: a la hora de la verdad, la responsabilidad de enfrentar al virus cay¨® sobre sus espaldas, al igual que la falta de recursos y la fragilidad de los sistemas sanitarios de la regi¨®n.

?C¨®mo ha transformado esta experiencia el trabajo del personal de salud? ?Ha cambiado la mirada que tienen sobre sus tareas y sus profesiones? ?Qu¨¦ cosas no ser¨¢n iguales despu¨¦s de la pandemia? ?Qui¨¦nes son las personas que hoy, despu¨¦s de haber visto c¨®mo el mundo los aplaud¨ªa por su valor en ¡°la primera l¨ªnea de combate¡± pero los trataba como carne de ca?¨®n, quieren dedicarse a cuidar de otros?

Estas son algunas de las preguntas que guiaron el trabajo de un equipo de editoras, dise?adores e ilustradoras de distintos pa¨ªses de la regi¨®n, que fueron seleccionadas por El Surtidor para formar parte de Latinogr¨¢ficas, una iniciativa de colaboraci¨®n para impulsar el periodismo visual desde Paraguay. En alianza con EL PA?S Am¨¦rica, las nueve becarias de Latinogr¨¢ficas se abocaron a buscar, producir e ilustrar las historias que forman de este especial, siguiendo la consigna de una frase c¨¦lebre que el escritor ecuatoriano Jorge Enrique Adoum se encontr¨® una vez en las calles de Quito: ¡°Cuando ten¨ªamos todas las respuestas, nos cambiaron las preguntas¡±.

¡°La forma en que vemos a los pacientes ya no ser¨¢ la misma¡±
Pedro Guevara, m¨¦dico,
26 a?os (Placetas, Cuba)

Para Piter, como lo conocen sus amigos, el peor d¨ªa de la pandemia fue tambi¨¦n el que lo hizo sentirse ¡°el m¨¦dico m¨¢s orgulloso del mundo¡±: estaba de guardia en un hospital de campa?a con cuatro pacientes gravemente enfermos que necesitaban ox¨ªgeno, pero solo hab¨ªa una bomba. Desesperado, el joven m¨¦dico rompi¨® su estetoscopio y utiliz¨® la manguera en forma de ¡°Y¡± para permitir que dos pacientes pudieran respirar al mismo tiempo. Los cuatro pacientes sobrevivieron.

    Hac¨ªa menos de un a?o que Pedro Guevara se hab¨ªa graduado de m¨¦dico cuando se convirti¨® en redes en el ¡°h¨¦roe del estetoscopio¡±, en agosto de este a?o. Cuando la pandemia se intensific¨®, fue llamado primero para una misi¨®n nacional en La Habana. Tuvo que dejar a su esposa y a su hija de un a?o solas en Placetas, una ciudad del centro de Cuba, para encontrarse con el impacto de la enfermedad. Despu¨¦s de un tiempo regres¨® a su ciudad y se puso a trabajar en la sala de alto riesgo de un hospital de campa?a las 24 horas del d¨ªa, con diez camas a cargo, e hizo todo lo posible para salvar a los pacientes a pesar de la escasez de suministros.

    La pandemia, cree P¨ªter, result¨® ser m¨¢s fuerte que la salud. M¨¢s de 7.500 cubanos han muerto como consecuencia de la covid-19, cuya gravedad se multiplic¨® por la precariedad y limitaciones de recursos que ya exist¨ªan en la isla antes de la pandemia. El virus tambi¨¦n demostr¨® ser m¨¢s fuerte que su propia salud: Piter, de 26 a?os, se infect¨®, desarroll¨® una enfermedad grave y tuvo que ser hospitalizado. ¡°La pandemia nos hizo m¨¢s sensibles¡±, dice. ¡°Ahora miro al paciente con m¨¢s cari?o, tambi¨¦n por haber estado en su lugar. La forma en que vemos a los pacientes ya no ser¨¢ la misma, creo que el v¨ªnculo se ha vuelto m¨¢s estrecho ¡±.

    Piter espera que el cambio sea rec¨ªproco. Durante la pandemia, la poblaci¨®n vio que el trabajo de los m¨¦dicos es un desaf¨ªo, que arriesgan su vida diariamente y, al mismo tiempo, ponen en riesgo la salud de sus familias. La pandemia afect¨® a todos y demostr¨® que hay personas que har¨ªan cualquier cosa por la vida de los dem¨¢s.

Leer m¨¢s

¡°No me imagino a un epidemi¨®logo que no conozca un poco de comunicaci¨®n¡±
Zulma Cucunub¨¢, epidemi¨®loga,
35 A?os (Bogot¨¢/Londres)

A comienzos de 2020, el Whatsapp de Zulma Cucunub¨¢ se empez¨® a poblar de mensajes de amigos que conoc¨ªan su trabajo: ¡°?Esto es un virus fabricado? ?Nos vamos a morir? Me preguntaban cosas muy chistosas y yo les respond¨ªa, pero en un punto ya era desgastante¡±, recuerda Zulma, que es m¨¦dica epidemi¨®loga de enfermedades infecciosas y trabaja como investigadora del Imperial College London y del Departamento de Epidemiolog¨ªa de la Universidad Javeriana, en Colombia.

    Como las noticias eran cada vez m¨¢s alarmantes y las dudas se reproduc¨ªan a la misma velocidad que la desinformaci¨®n, Zulma encontr¨® una forma de comunicar lo que sab¨ªa a todos a la vez: Twitter. En enero de 2020, dos meses antes de que la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) declarase la pandemia, ella redact¨® un hilo de tuits explicativos sobre el origen y el rumbo de la covid-19, con emojis y enlaces a art¨ªculos que describ¨ªan c¨®mo la ciencia se desarrollaba en tiempo real.

    ¡°Me toc¨® quitarle las notificaciones al celular porque eso explot¨® y creo que fue porque en Latinoam¨¦rica nadie, hasta ese punto, hab¨ªa escrito nada ni hab¨ªa hecho muchas declaraciones¡±, afirma. Estaba preocupada. Sab¨ªa que la regi¨®n no estaba preparada para una pandemia, pero ella trabajaba horas recogiendo informaci¨®n para analizar y despu¨¦s cumplir con el trabajo de divulgaci¨®n que hab¨ªa asumido. ¡°Era muy raro ese rol de comunicar sin asustar, pero sin disminuir la importancia de lo que era eso¡±, cuenta. Al encontrarse en esa misma disyuntiva, la OMS solicit¨® a la comunidad cient¨ªfica entrar a las redes sociales y comenzar a informar.

    ¡°Varios grandes del Internet, como Twitter y Google, hicieron esa alianza con la OMS, para poner los contenidos oficiales de entidades de salud primero¡±, explica, ¡°y en Twitter la opci¨®n fue certificar a los cient¨ªficos, para que pesara m¨¢s nuestra opini¨®n que la de influencers. Nos volvimos voces autorizadas, si se quiere, en las redes¡±. En el trayecto, empez¨® a reflexionar sobre la importancia de una epidemiolog¨ªa m¨¢s multidisciplinaria, pues, aunque trabaja con salud p¨²blica, matem¨¢ticas, inmunolog¨ªa, biolog¨ªa e ingenier¨ªa, hace falta, por ejemplo, involucrar a las ciencias sociales.

    ¡°No me imagino a un epidemi¨®logo que no conozca, al menos, un poco de la comunicaci¨®n¡±, enumera, ¡°de econom¨ªa para entender la sociedad en que se mueve y de antropolog¨ªa para entender c¨®mo meter esa informaci¨®n dentro de los modelos matem¨¢ticos que hacemos¡±. Se trata de buscar m¨¢s diversidad, dice, de ganar m¨¢s aportes y m¨¢s m¨¦todos, de ¡°que entren m¨¢s mujeres, m¨¢s comunidades y minor¨ªas¡±.

    Zulma cree que una de las claves para prepararse a futuro es empezar a educar en epidemiolog¨ªa desde el colegio, pues no deber¨ªan considerarse conocimientos reservados para la comunidad cient¨ªfica. Y tambi¨¦n entrenar la resiliencia. ¡°Para esta pandemia se necesitaron 15.000 Unidades de Cuidados Intensivos (UCIs) y si para la otra se necesitan 40.000, ?qu¨¦ vamos a hacer? Esa resiliencia est¨¢ dada por adaptarse y ser flexible. ?Tener un backup qu¨¦ significa? Tener m¨¢s gente entrenada de la que al final se necesita. Yo resumir¨ªa que la preparaci¨®n se basa en planear para ser resiliente¡±.

Leer m¨¢s

¡°Se perdi¨® la oportunidad de equivocarnos con un paciente¡±
Laura Catalina Londo?o, estudiante de enfermer¨ªa,
23 a?os (Manizales, Colombia)

El 7 de marzo de 2020, Laura Catalina Londo?o charlaba con sus compa?eros de pr¨¢ctica y tomaba caf¨¦ en la casa de un paciente en Villa Mar¨ªa, un pueblo cercano a la ciudad de Manizales, cuando una docente que les acompa?aba mir¨® el celular y les anunci¨® una noticia: se hab¨ªa confirmado el primer caso de coronavirus en Colombia. Nueve d¨ªas despu¨¦s, aunque en su ciudad no se hab¨ªa reportado ninguna infecci¨®n, el pa¨ªs entr¨® en cuarentena y estudiar se volvi¨® un reto.

    Laura est¨¢ en el s¨¦ptimo semestre de enfermer¨ªa y ha cursado tres de forma virtual. Tuvo que aprender sobre diabetes, hipertensi¨®n y hasta sobre cirug¨ªa a trav¨¦s de una pantalla. No ha podido hacer sus pr¨¢cticas cl¨ªnicas en el hospital. Sus profesores han hecho malabares para ense?arle: han fabricado sus propios modelos caseros de ¨®rganos en cart¨®n o plastilina, han dibujado algunos mecanismos de funcionamiento del cuerpo humano y usado maniqu¨ªes para explicar c¨®mo se hace una reanimaci¨®n cardiopulmonar.

    Pero Laura cree que el contacto humano es irremplazable: ¡°No ves realmente c¨®mo se ve una persona que tiene diabetes avanzada. Eso de cierta manera nos vuelve un poco deshumanizados, en el sentido de que ya no nos vamos a dar cuenta realmente c¨®mo se afecta a una persona no solo f¨ªsicamente, sino en el ¨¢mbito social, en el familiar, en el emocional¡±. Para ella, estos vac¨ªos en la formaci¨®n ser¨¢n el principal reto al que se enfrentar¨¢n los enfermeros y las enfermeras del futuro. Es un tema constante de conversaci¨®n con sus compa?eros. ¡°Hay estudiantes que est¨¢n en s¨¦ptimo semestre y no saben c¨®mo canalizar una vena, nunca tuvieron la oportunidad¡±, dice. ¡°Se perdi¨® la oportunidad de equivocarnos que tenemos los estudiantes: equivocarnos con un paciente, en un diagn¨®stico, de preguntar y que haya un superior que nos responda¡±.

    Durante la emergencia, Laura trabaj¨® como voluntaria en la organizaci¨®n del cerco epidemiol¨®gico en el aeropuerto de su ciudad y atendiendo llamadas desde su casa. Tambi¨¦n se involucr¨® en la representaci¨®n de los estudiantes de su facultad. As¨ª, la pandemia transform¨® su visi¨®n sobre la enfermer¨ªa: le ense?¨® que su profesi¨®n va mucho m¨¢s all¨¢ de la asistencia a los pacientes en el hospital. ¡°Me d¨ª cuenta que la enfermer¨ªa tiene el poder desde mucho antes de la enfermedad de controlar un poco los altos ¨ªndices de ocupaci¨®n en los hospitales y de represi¨®n en los servicios de salud. Entend¨ª que si ense?o a la gente a tomar decisiones positivas desde antes de que se enfermen, estoy colaborando a que en un futuro los sistemas de salud dejen de tener tan mal servicio por la excusa de que hay muchas personas para atender¡±.

Leer m¨¢s

¡°La telemedicina lleg¨® para quedarse¡±
Henry Cohen, m¨¦dico gastroenter¨®logo,
66 a?os (Montevideo, Uruguay)

¡°M¨¢s vale dedicar un minuto m¨¢s que uno menos, una sonrisa m¨¢s que una de menos y siempre estar acompa?ando al paciente. Eso lo aprend¨ª en 40 a?os de m¨¦dico, pero nunca fue m¨¢s vivido para m¨ª que este a?o y medio¡±. As¨ª lo resume Henry Cohen, un reconocido gastroenter¨®logo y coordinador de salud del Grupo Asesor Cient¨ªfico Honorario, que aconsej¨® al gobierno uruguayo en la gesti¨®n de la pandemia.

    Este grupo conformado por m¨¢s de 50 cient¨ªficos de varias ramas public¨® an¨¢lisis y recomendaciones sobre el virus casi en tiempo real en medio de la incertidumbre por la falta de evidencia cient¨ªfica y trabaj¨® para que se fortalecieran los centros de terapia intensiva en Uruguay. Varias veces usaron met¨¢foras futbol¨ªsticas para explicarle a la gente la informaci¨®n cient¨ªfica. ¡°Una de las virtudes de la pandemia o donde m¨¢s encontr¨¢s cosas positivas, es en la relaci¨®n entre los cient¨ªficos. El contrato es con la ciencia, entonces esa democratizaci¨®n del acceso a la informaci¨®n cient¨ªfica es muy importante¡±, explica.

    Desde 2014, Cohen dirige ECHO Uruguay, un proyecto en el que m¨¦dicos especialistas asesoran de forma virtual a m¨¦dicos generales y personal de salud en zonas rurales para diagnosticar y tratar enfermedades complejas. Durante la pandemia, el proyecto sirvi¨® para compartir conocimiento sobre el coronavirus con colegas de otros pa¨ªses.

    En sus palabras, ¡°uno de los aprendizajes de la pandemia es que la telemedicina lleg¨® para quedarse¡±. La necesidad de descongestionar los hospitales hizo posible pensar que no es necesario acudir por cualquier dolencia. ¡°Hay algunos que piensan que as¨ª como vamos menos al banco que antes, tambi¨¦n ser¨ªa bueno que la gente fuera menos a los hospitales, que quedaran para situaciones realmente v¨¢lidas. Esto viene unido a lo que vendr¨ªa a ser un cambio de paradigma en la salud: que deber¨ªa ser menos centrada en lo curativo y m¨¢s en lo preventivo¡±, dice.

    Para Cohen, esa medicina del futuro requiere m¨¦dicos con nuevas habilidades de otras disciplinas que, por su puesto, no olviden la importancia humana de su profesi¨®n: ¡°Tenemos que ense?ar una cantidad de cosas para que los nuevos m¨¦dicos se acompasen a esta situaci¨®n sin dejar de entender que por m¨¢s inteligencia artifical, por m¨¢s big data, agarrarle la mano a un paciente y darle un abrazo a un acompa?ante o familiar va a ser siempre muy importante, y nada lo va a sustituir. El contrato nuestro no es ni con la mutualista, ni con el administrador de salud, ni con el director del hospital: es con los pacientes¡±.

Leer m¨¢s

¡°Si no llegamos a la comunidad, estamos llegando tarde¡±
Bel¨¦n Ram¨ªrez, m¨¦dica humanitaria,
42 a?os (Paraguay)

Bel¨¦n Ram¨ªrez cree que si con la pandemia no se ha aprendido que en salud hay que trabajar desde el territorio, no se aprende m¨¢s. Desde hace once a?os trabaja para M¨¦dicos Sin Fronteras y en este tiempo tuvo la oportunidad de recorrer pa¨ªses como Yemen, Nigeria, Sud¨¢n, Guatemala y Colombia para tratar enfermedades como el c¨®lera y el sarampi¨®n. Pero fue el ¨¦bola lo que mejor le entren¨® para enfrentar a la covid-19 en Paraguay. ¡°Con la gran epidemia del ¨¦bola en 2014 entendimos que si no llegamos a la comunidad, estamos llegando tarde¡±.

    Planeaba retornar al Congo en 2020, pero decidi¨® cambiar su misi¨®n cuando supo de los primeros casos de covid-19 en la regi¨®n. ¡°Eleg¨ª trabajar en mi propio pa¨ªs por miedo. Ah¨ª est¨¢ mi mundo m¨¢s vulnerable, mi familia¡±, dice. Le toc¨® atravesar la pandemia en meses en que se sab¨ªa poco del virus. Pero se dedic¨® a hacer lo que mejor sabe en esta situaciones: llegar a un lugar, mirarlo, entenderlo, evaluar, proponer e implementar. Visit¨® hospitales y albergues en todo el pa¨ªs, espacios puestos por el Estado donde deb¨ªan hacer cuarentena obligatoria los paraguayos migrantes que hu¨ªan de la explosi¨®n de casos en pa¨ªses como Brasil, Argentina y Espa?a y que con suerte ten¨ªan agua y jab¨®n. En esos lugares se asegur¨® de establecer protocolos m¨ªnimos de bioseguridad con la gente. Pero no fue f¨¢cil.

    Bel¨¦n cuenta que varias veces sugiri¨® en sus evaluaciones que se ubiquen promotores de salud donde hac¨ªan falta. Pero repetidamente le dec¨ªan que no contaban con esas personas. ¡°?Qui¨¦n le explica a la gente c¨®mo debe cuidarse si no hay promotores de salud?¡±, dice. Pensando en el futuro, est¨¢ segura que este rol debe ser fortalecido. ¡°Necesitamos entrenar al personal de salud desde la universidad en epidemiolog¨ªa, control y prevenci¨®n de infecciones, manejo de hospitales. Necesitamos hacer mucho m¨¢s ¨¦nfasis en enfermer¨ªa. La enfermera tuvo un papel crucial en la pandemia. Y necesitamos hacer much¨ªsimo ¨¦nfasis en lo que es la atenci¨®n primaria de la salud¡±, dice.

Leer m¨¢s

¡°Si los pacientes est¨¢n bien, el personal de salud est¨¢ mejor¡±
Ivo Corbal¨¢n, chofer de ambulancia,
21 a?os (Santiago del Estero, Argentina)

La primera canci¨®n que Ivo Corbal¨¢n le cant¨® a Carlos Oviedo, un paciente que estaba en terapia intensiva, fue un cl¨¢sico de Sandro de Am¨¦rica: ¡°Tus labios de rub¨ª de rojo carmes¨ª, parecen murmurar mil cosas sin hablar. Y yo que estoy aqu¨ª, sentado frente a ti, me siento desangrar sin poder conversar¡±. Ivo no conoc¨ªa a aquel paciente, pero alentado por la directora del centro de salud en el que trabaja, que sab¨ªa de la mala situaci¨®n personal y laboral del paciente, enton¨® la canci¨®n al otro lado de la puerta de la habitaci¨®n en donde estaba aislado. Por un momento, Carlos volvi¨® a sonre¨ªr y a agitar sus manos al ritmo de la m¨²sica.

    Ivo empez¨® a ser chofer de la ambulancia del Centro de Salud Mam¨¢ Antula de una forma inesperada. Sol¨ªa trabajar como conductor para un medio de comunicaci¨®n, pero se qued¨® sin empleo meses antes del primer caso de covid en Argentina y encontr¨® un lugar en este centro de atenci¨®n en Santiago del Estero que era tan nuevo que ni siquiera ten¨ªa personal, pero que termin¨® dedic¨¢ndose exclusivamente al tratamiento de pacientes con covid.

    Cuando comenz¨® la pandemia era un principiante en el ¨¢rea de la salud, pero no dud¨® ni por un segundo en seguir en Mam¨¢ Antula. ¡°Con 21 a?os, ?qu¨¦ tengo? Tengo fuerza, ganas y voluntad para trabajar y para ponerle el pecho a esta bala. Para eso me he presentado, para manejar la ambulancia y para colaborar en todo lo que se pueda¡±, recuerda que pens¨® cuando sus jefes le preguntaron.

    Ivo es evangelista y canta canciones cristianas, le encanta hacer transmisiones en vivo en Facebook en las que anima y pasa m¨²sica para sus amigos. Y en su trabajo logr¨® integrar sus pasiones: canta cuando lava la camioneta, juega al locutor mientras transporta pacientes para animarlos y canta para hacerles compa?¨ªa en el centro de salud. Recuerda, por ejemplo, c¨®mo anim¨® a Rosario, una mujer que ten¨ªa que llevar al centro para una tomograf¨ªa, haciendo voz de locutor: ¡°Estamos escuchando la m¨²sica que sigue sonando aqu¨ª a trav¨¦s de Radio Nacional. Saludamos a nuestra paciente Rosario que est¨¢ ah¨ª escuchando la radio como siempre, como todas las tardes.Tambi¨¦n saludamos a todo el Centro de Salud Mama Antula. Much¨ªsimas gracias por estar prendidas, chicas, saludos para todos, pu?ado de besos para todos¡±, cuenta que dec¨ªa mientras conduc¨ªa la ambulancia.

    Pero mientras maneja, dice, est¨¢ concentrado, nunca nervioso, aunque tenga que ir r¨¢pido y con la sirena encendida. Es consciente de la importancia de las vidas que lleva al hospital. ¡°A los pacientes hay que tratarlos como un ser querido, como un pariente, como un hermano, como un amigo, como algo de lo mejor. Para que ellos se sientan bien acompa?ados. Si ellos est¨¢n bien, el personal de salud est¨¢ mejor¡±, dice.

Leer m¨¢s

¡°El m¨¦dico no puede vivir en un mar de l¨¢grimas todo el tiempo¡±
Sof¨ªa Rond¨®n, estudiante de medicina,
24 a?os (Caracas, Venezuela)

Sof¨ªa Rond¨®n, quien asist¨ªa voluntariamente en el ¨¢rea de maternidad del Hospital Central Dr. Miguel P¨¦rez Carre?o en Caracas, ten¨ªa, como todos, miedo de contagiarse. M¨¢s que desarrollar una enfermedad grave, lo que tem¨ªa era contagiar a su familia. A¨²n as¨ª, se sorprendi¨® al ver la reacci¨®n de algunos profesionales de la salud cuando se encontraron con un caso de covid al comienzo de la pandemia. ¡°Vieron a un paciente positivo y gritaron, corrieron, salieron del hospital y pens¨¦: 'El paciente est¨¢ ah¨ª, te est¨¢ escuchando¡¯¡±.

    Sof¨ªa cree que lo m¨ªnimo que puede hacer un m¨¦dico es empatizar, pero que es necesario encontrar la delgada l¨ªnea entre ponerse en el lugar del paciente e involucrarse con su dolor. La pandemia trajo sufrimiento, pero el m¨¦dico "no puede vivir en un mar de l¨¢grimas todo el tiempo", dice. En Venezuela, que registra oficialmente unas 5.000 muertes por covid ¡ªuna cifra que podr¨ªa ser de cinco a siete veces mayor, seg¨²n los investigadores¡ª, la situaci¨®n se ha agravado por la falta de suministros. No hay suficientes camas o equipos de alta gama, los medicamentos b¨¢sicos escaseaban y los art¨ªculos de bioseguridad estaban racionados.

    ¡°Los pacientes se atienden cuando hay espacio, pero tienen que traer las ampollas, los antibi¨®ticos, las soluciones, porque a veces hay y otras no. Y si el paciente o familiar no lo trae y el m¨¦dico no puede conseguirlo, a veces saca de su bolsillo¡±, dice. Con la pandemia, Sof¨ªa vio que la idea de que ser m¨¦dico es sin¨®nimo de salvar vidas era solo una idealizaci¨®n. Incluso cuando el paciente ten¨ªa una cama en la UCI, personal e insumos m¨¦dicos a su disposici¨®n, pod¨ªa no ser suficiente para ganarle a la covid-19. ¡°A veces no depende de usted, sino del cuerpo del paciente, si responde al tratamiento, o el destino, la voluntad de Dios, sea la que sea ¡±.

    Sin embargo, en ning¨²n momento la pandemia hizo desaparecer su deseo de continuar sus estudios y convertirse en m¨¦dica. Incluso en medio del caos, nunca pens¨® que hab¨ªa elegido la profesi¨®n equivocada ni tuvo miedo de trabajar en un hospital. En lugar de huir, quer¨ªa estudiar m¨¢s y m¨¢s. Y eso no le sucedi¨® solo a Sof¨ªa. Dice que sus compa?eros de la universidad y los residentes del hospital tuvieron la misma impresi¨®n: la pandemia reforz¨® su deseo de seguir estudiando medicina. Algunos incluso decidieron quedarse en el pa¨ªs, que sufre un ¨¦xodo de trabajadores de la salud debido a la crisis econ¨®mica y la represi¨®n pol¨ªtica. ¡°Muchos me dec¨ªan: 'No me voy, me quedo, todav¨ªa hay mucho por hacer aqu¨ª'¡±.

Leer m¨¢s

¡°El m¨¦dico ya no puede ser simplemente alguien que se sienta frente al paciente¡±
Jos¨¦ Maria Malvido, infect¨®logo,
44 a?os (Buenos Aires, Argentina)

Jos¨¦ Maria Malvido, un infect¨®logo argentino de 44 a?os que vive en Buenos Aires, acababa de separarse cuando comenz¨® la pandemia. Como el proceso apenas comenzaba, a¨²n no se hab¨ªa decidido el r¨¦gimen de visitas para sus hijos. El tribunal entendi¨® que pertenecer¨ªa a un grupo de riesgo, como si fuera un eterno caso sospechoso, y le impidi¨® verlos. Fueron siete meses de pandemia en los que Malvido sigui¨® principalmente por tel¨¦fono el crecimiento de sus hijos de 2 y 4 a?os.

    Para no pensar demasiado en su situaci¨®n, centr¨® toda su atenci¨®n en la pandemia. Trabaj¨® de lunes a lunes como jefe de operaciones en el hospital p¨²blico Alberto Balestrini de La Matanza, ubicado en una zona pobre y superpoblada en la provincia de Buenos Aires. El hospital solo llevaba seis a?os en funcionamiento cuando empez¨® la pandemia. El equipo, que no contaba con mucha experiencia ni formaci¨®n, se enfrent¨® a un escenario imprevisto. ¡°Fue muy dif¨ªcil ese per¨ªodo entre tener que enviar gente a hacer cosas, gestionar equipos Interdisciplinarios y a¨²n no tener la confianza de las mismas personas a las que le est¨¢s dando indicaciones¡±.

    Malvido tambi¨¦n trabajaba en una cl¨ªnica privada y daba clases virtuales pero, como si todo eso fuera poco, decidi¨® comenzar un diario junto con una compa?era para recopilar todo lo que estaban experimentando. El diario, publicado en Instagram (@detrasdelosbarbijos), no solo sirvi¨® como forma de distracci¨®n: cumpli¨® el papel de mejorar la comunicaci¨®n dentro del propio hospital. Los empleados leyeron las historias publicadas, vieron sus nombres incluidos y sintieron que estaban trabajando juntos contra el virus.

    No es de extra?ar, por tanto, que Malvido crea que la pandemia puso en valor la atenci¨®n interpersonal. Durante su trabajo presenci¨®, m¨¢s de una vez, una videollamada entre un familiar y un paciente, que a veces sacaba de all¨ª la fuerza necesaria para volver a combatir la enfermedad. ?l mismo se encontraba a menudo llamando a los pacientes para comprobar c¨®mo estaban, y cree que el seguimiento virtual o telef¨®nico deber¨ªa ser cada vez m¨¢s com¨²n en la atenci¨®n. ¡°El m¨¦dico ya no puede ser simplemente alguien que se sienta frente al paciente. Tienes que romper la din¨¢mica de los turnos a dos meses y ser m¨¢s consciente de lo que sucede a tu alrededor. Claramente se observ¨® que no es lo mismo acompa?ar a las personas que verlas una vez y no volver a saber de ellas nunca m¨¢s¡±.

Leer m¨¢s

¡°Por haber arriesgado nuestras vidas, ahora nos llaman ¡®doctores¡¯¡±
Omar Casanova e Isabel Garc¨ªa, promotores de salud,
28 y 29 a?os (Naci¨®n Comcaac, Sonora, M¨¦xico)

La tercera muerte por covid-19 en su comunidad sorprendi¨® a Omar saliendo de un campamento pesquero. Mientras acomodaba las redes, se enter¨® de que la falta de atenci¨®n m¨¦dica hab¨ªa llevado a otro fallecimiento en menos de diez d¨ªas. Entonces dej¨® su trabajo y se fue al centro de salud rural para tratar de hacer algo.

    ¡°No era opci¨®n ver a la gente morir¡±, dice Omar Casanova, un joven de 28 a?os que actualmente trabaja como promotor de salud en el Desemboque de los Seris, un pueblo perteneciente a la Naci¨®n Comcaac, aislado en medio del desierto y frente al mar en Sonora, al noroeste de M¨¦xico. A pesar de no tener la preparaci¨®n suficiente, los medicamentos o equipo de protecci¨®n necesarios en la peque?a cl¨ªnica, Omar e Isabel Garc¨ªa ¡ªsu compa?era de 29 a?os¡ª lograron proteger a una comunidad de menos de 400 habitantes durante la pandemia. Ninguno ten¨ªa formaci¨®n acad¨¦mica oficial: eran un pescador y una artesana que se interesaron por la salud de su pueblo.

    ¡°Ten¨ªamos un conocimiento nulo de la covid-19 y tambi¨¦n de la medicina, aunque sab¨ªamos lo m¨¢s b¨¢sico¡±, explic¨® Omar. Fueron capacitados como promotores de salud en la prevenci¨®n de enfermedades cr¨®nicas como diabetes e hipertensi¨®n por el m¨¦dico que contrat¨® la Secretar¨ªa de Salud para atender a la gente, hasta que ¨¦l mismo se contagi¨® y tuvo que irse. ¡°Ya estamos aqu¨ª, vamos a buscar la manera de parar esto¡±, dijeron entonces, y se quedaron a hacerle frente a la pandemia.

    Durante meses estuvieron solos, porque la ayuda del Estado lleg¨® tarde. Pero lo que hicieron ¡ªmal o bien, dicen¡ª les entreg¨® la confianza de la gente. ¡°Por haber arriesgado nuestras vidas, ahora nos llaman ¡®doctores¡¯¡±, cuenta Isabel, quien logr¨® combinar el uso de la medicina occidental y la medicina tradicional utilizando hierbas del desierto, infusiones con agua de mar y otros m¨¦todos que ayudaron a sanar las v¨ªas respiratorias de los enfermos cuando no hab¨ªa medicamentos.

    ¡°Queremos ser utilizados como herramienta, que nos den acceso a los hospitales y se apoyen en nosotros para acompa?ar el proceso de las comunidades, en su lengua, que nos den el cr¨¦dito que necesitamos y nos empleen como debe de ser, para crecer y trabajar¡±, dice Omar. Hasta hoy, ambos comparten un solo contrato de la Secretar¨ªa de Salud: tienen que dividir en dos el suelo para una sola persona. Al miedo ya lo perdieron hace meses. Solo les preocupa que la comunidad siga siendo ignorada, y no poder contar con el apoyo suficiente para su gente y para ellos.

Leer m¨¢s

¡°La pandemia demostr¨® que hay muchos curanderos¡±
Ot¨¢vio Mariano, estudiante de medicina
(Campo Grande, Brasil)

M¨¢s de 35.000 estudiantes brasile?os aseguraron un lugar en el competitivo examen de ingreso para estudiar medicina en 2018. Para ellos, el camino pr¨®ximo estaba claro: los dos primeros a?os ser¨ªan de estudio te¨®rico, los dos a?os siguientes ¡ª2020 y 2021¡ª iban a estar marcados por la experimentaci¨®n en diversas ¨¢reas m¨¦dicas a trav¨¦s de cl¨ªnicas y, finalmente, en los ¨²ltimos dos a?os, llegar¨ªa el momento de hacer un internado. Pero no fue as¨ª como resultaron las cosas.

    Ot¨¢vio Mariano, uno de los 80 estudiantes que ingresaron en 2018 a la carrera de medicina en la Universidad Federal de Mato Grosso do Sul, cuenta que acababa de comenzar las cl¨ªnicas de cardiolog¨ªa y neumolog¨ªa cuando estall¨® la pandemia en Brasil. Se interrumpieron las clases pr¨¢cticas y la ense?anza se volvi¨® remota. Toda la experiencia prevista para el tercer a?o de Medicina (neurolog¨ªa, ortopedia, psiquiatr¨ªa y otras ¨¢reas), se restringi¨® a libros y profesores.

    Cuando volvieron las clases pr¨¢cticas, en 2021, la universidad decidi¨® resumir todas las cl¨ªnicas afectadas: el tiempo normal, de dos meses y una semana, se convirti¨® en un mes. ¡°Perdimos la oportunidad de ocasiones en que el residente o el m¨¦dico se cansa de hacer un determinado examen y termina ense?ando a un alumno a ganar tiempo. Cosas as¨ª, si no tienes la oportunidad, nunca lo volver¨¢s a hacer porque te vas a otra ¨¢rea. Y luego, cuando te conviertas en m¨¦dico general, no tendr¨¢s el coraje de hacerlo porque nunca lo hiciste ¡±.

    Ot¨¢vio cree que, adem¨¢s de los problemas en la formaci¨®n, la pandemia ha afectado a la medicina en su conjunto, porque ha minado la idea de que el m¨¦dico tiene el control de la situaci¨®n y que siempre tiene la raz¨®n. ¡°La pandemia demostr¨® que hay muchos curanderos. Entonces creo que el m¨¦dico ha perdido un poco la credibilidad y la gente lo cuestionar¨¢ m¨¢s¡±.

    En enero de 2022, si nada m¨¢s se interpone, Ot¨¢vio comienza su quinto a?o de medicina y, con ello, su internado. Sin embargo, despu¨¦s de todo lo que ha sucedido, se siente m¨¢s inseguro de lo que le hubiera gustado: ¡°Siento que si no hubiera surgido la covid-19, ahora estar¨ªa m¨¢s seguro para servir con m¨¢s claridad y confianza. La pandemia me quit¨® la experiencia m¨¦dica. Creo que sin ella estar¨ªa m¨¢s seguro para tratar a los pacientes, saber hablar con ellos, calmarlos¡±.

Leer m¨¢s

¡°Necesitamos reflexionar nuevamente la solidaridad¡±
Vivian Camacho, directora general
de Medicina Tradicional de Bolivia

Vivian Camacho piensa que la l¨®gica de que ¡°solo el pueblo puede ayudar al pueblo¡± fue clave para salir adelante en la pandemia. Por eso los saberes ancestrales y la medicina tradicional cobraron una nueva relevancia en este tiempo. ?Y c¨®mo no, sostiene, si en las comunidades ind¨ªgenas de Bolivia no hab¨ªa siquiera una aspirina para atender a los enfermos?

    Vivian tiene una doble formaci¨®n en salud: la occidental-acad¨¦mica, como una cirujana que se especializ¨® en B¨¦lgica, y otra tradicional como mujer partera de la Naci¨®n Quechua en Cochabamba, Bolivia. Durante la emergencia sanitaria, ella se dedic¨® a organizar talleres, compartir sus conocimientos y escuchar las experiencias de otras personas: habl¨® de plantas, de sus usos y de preparados sencillos y de bajo costo que podr¨ªan ayudar con algunos s¨ªntomas del virus y de otras enfermedades. ¡°Nuestros saberes est¨¢n ah¨ª vigentes, est¨¢n ah¨ª vivos¡±, explica, pero el menosprecio del saber campesino, la estigmatizaci¨®n, ha llevado a que ¡°muchos de nuestros abuelos y abuelas no solo no comparten el saber, sino que a veces lo esconden¡±.

    ¡°La salud se construye en democracia¡±, sostiene Vivian: ¡°La salud se construye con justicia social y con dignidad para el pueblo. Necesitamos reflexionar como sociedades, nuevamente, la solidaridad. El sistema de salud tiene que ser para todo mundo, no puede ser que nos quedemos sin atenci¨®n, muriendo en la puerta de instituciones por no tener dinero¡±. Esto es una verg¨¹enza, dice, pero tiene que acabar en alg¨²n momento, a¨²n cuando quede mucho por andar.

    ¡°Universal, p¨²blico y gratuito¡±. Con esas tres palabras, la actual directora general de Medicina Tradicional del Estado Plurinacional de Bolivia deja clara su visi¨®n del sistema de salud al que, esencialmente, los pueblos ind¨ªgenas y ¡°los juzgados¡± ¡ªes decir, la gente pobre que no pod¨ªa mantenerse en aislamiento por la necesidad de trabajar y sobrevivir y que encima fue criminalizada¡ª deber¨ªan tener acceso, con un enfoque desde el territorio, desde las comunidades organizadas.

    ¡°La descolonizaci¨®n para m¨ª es volver a mirar con cari?o qui¨¦nes somos y de d¨®nde venimos¡±, concluye. ¡°Reconocer que somos pueblos que, pese a todo el dolor, hemos preservado profunda belleza, profunda sabidur¨ªa y ese amor a la vida que sigue pasando de un coraz¨®n a otro, ese amor con el que han so?ado nuestros abuelos y abuelas para que no nos maltraten como a ellos les han maltratado. En la trinchera que nos toque estar, vamos a seguir acompa?ando, vamos a seguir construyendo salud popular, vamos a seguir sec¨¢ndonos las l¨¢grimas, el sudor y a decir vamos adelante, hay que resistir, hay que ser fuertes juntos¡±.

Leer m¨¢s

Cr¨¦ditos

Edici¨®n general: Eliezer Budasoff / El Pa¨ªs
Edici¨®n visual: Juan Heilborn / Latinogr¨¢ficas
Asistencia de edici¨®n: Jazm¨ªn Acu?a / Latinogr¨¢ficas
Reportajes e ilustraci¨®n: Astrid Arellano, Lorena Barrios, Faustina Bartaburu, Emilio Crua?as, Priscila de Paula Dias, Mar¨ªa Elizagaray, Luiz Fernando Menezes, Carolina Mor¨®n, Laura Rodr¨ªguez Salamanca, Gabriela Rodr¨ªguez Soledad.
Dise?o y maquetaci¨®n: Alfredo Garc¨ªa / El Pa¨ªs
Desarrollo: Iv¨¢n Mendoza

Archivado En

seductrice.net
universo-virtual.com
buytrendz.net
thisforall.net
benchpressgains.com
qthzb.com
mindhunter9.com
dwjqp1.com
secure-signup.net
ahaayy.com
tressesindia.com
puresybian.com
krpano-chs.com
cre8workshop.com
hdkino.org
peixun021.com
qz786.com
utahperformingartscenter.org
worldqrmconference.com
shangyuwh.com
eejssdfsdfdfjsd.com
playminecraftfreeonline.com
trekvietnamtour.com
your-business-articles.com
essaywritingservice10.com
hindusamaaj.com
joggingvideo.com
wandercoups.com
wormblaster.net
tongchengchuyange0004.com
internetknowing.com
breachurch.com
peachesnginburlesque.com
dataarchitectoo.com
clientfunnelformula.com
30pps.com
cherylroll.com
ks2252.com
prowp.net
webmanicura.com
sofietsshotel.com
facetorch.com
nylawyerreview.com
apapromotions.com
shareparelli.com
goeaglepointe.com
thegreenmanpubphuket.com
karotorossian.com
publicsensor.com
taiwandefence.com
epcsur.com
southstills.com
tvtv98.com
thewellington-hotel.com
bccaipiao.com
colectoresindustrialesgs.com
shenanddcg.com
capriartfilmfestival.com
replicabreitlingsale.com
thaiamarinnewtoncorner.com
gkmcww.com
mbnkbj.com
andrewbrennandesign.com
cod54.com
luobinzhang.com
faithfirst.net
zjyc28.com
tongchengjinyeyouyue0004.com
nhuan6.com
kftz5k.com
oldgardensflowers.com
lightupthefloor.com
bahamamamas-stjohns.com
ly2818.com
905onthebay.com
fonemenu.com
notanothermovie.com
ukrainehighclassescort.com
meincmagazine.com
av-5858.com
yallerdawg.com
donkeythemovie.com
corporatehospitalitygroup.com
boboyy88.com
miteinander-lernen.com
dannayconsulting.com
officialtomsshoesoutletstore.com
forsale-amoxil-amoxicillin.net
generictadalafil-canada.net
guitarlessonseastlondon.com
lesliesrestaurants.com
mattyno9.com
nri-homeloans.com
rtgvisas-qatar.com
salbutamolventolinonline.net
sportsinjuries.info
wedsna.com
rgkntk.com
bkkmarketplace.com
zxqcwx.com
breakupprogram.com
boxcardc.com
unblockyoutubeindonesia.com
fabulousbookmark.com
beat-the.com
guatemala-sailfishing-vacations-charters.com
magie-marketing.com
kingstonliteracy.com
guitaraffinity.com
eurelookinggoodapparel.com
howtolosecheekfat.net
marioncma.org
oliviadavismusic.com
shantelcampbellrealestate.com
shopleborn13.com
topindiafree.com
v-visitors.net
djjky.com
053hh.com
originbluei.com
baucishotel.com
33kkn.com
intrinsiqresearch.com
mariaescort-kiev.com
mymaguk.com
sponsored4u.com
crimsonclass.com
bataillenavale.com
searchtile.com
ze-stribrnych-struh.com
zenithalhype.com
modalpkv.com
bouisset-lafforgue.com
useupload.com
37r.net
autoankauf-muenster.com
bantinbongda.net
bilgius.com
brabustermagazine.com
indigrow.org
miicrosofts.net
mysmiletravel.com
selinasims.com
spellcubesapp.com
usa-faction.com
hypoallergenicdogsnames.com
dailyupdatez.com
foodphotographyreviews.com
cricutcom-setup.com
chprowebdesign.com
katyrealty-kanepa.com
tasramar.com
bilgipinari.org
four-am.com
indiarepublicday.com
inquick-enbooks.com
iracmpi.com
kakaschoenen.com
lsm99flash.com
nana1255.com
ngen-niagara.com
technwzs.com
virtualonlinecasino1345.com
wallpapertop.net
casino-natali.com
iprofit-internet.com
denochemexicana.com
eventhalfkg.com
medcon-taiwan.com
life-himawari.com
myriamshomes.com
nightmarevue.com
healthandfitnesslives.com
androidnews-jp.com
allstarsru.com
bestofthebuckeyestate.com
bestofthefirststate.com
bestwireless7.com
britsmile.com
declarationintermittent.com
findhereall.com
jingyou888.com
lsm99deal.com
lsm99galaxy.com
moozatech.com
nuagh.com
patliyo.com
philomenamagikz.net
rckouba.net
saturnunipessoallda.com
tallahasseefrolics.com
thematurehardcore.net
totalenvironment-inthatquietearth.com
velislavakaymakanova.com
vermontenergetic.com
kakakpintar.com
begorgeouslady.com
1800birks4u.com
2wheelstogo.com
6strip4you.com
bigdata-world.net
emailandco.net
gacapal.com
jharpost.com
krishnaastro.com
lsm99credit.com
mascalzonicampani.com
sitemapxml.org
thecityslums.net
topagh.com
flairnetwebdesign.com
rajasthancarservices.com
bangkaeair.com
beneventocoupon.com
noternet.org
oqtive.com
smilebrightrx.com
decollage-etiquette.com
1millionbestdownloads.com
7658.info
bidbass.com
devlopworldtech.com
digitalmarketingrajkot.com
fluginfo.net
naqlafshk.com
passion-decouverte.com
playsirius.com
spacceleratorintl.com
stikyballs.com
top10way.com
yokidsyogurt.com
zszyhl.com
16firthcrescent.com
abogadolaboralistamd.com
apk2wap.com
aromacremeria.com
banparacard.com
bosmanraws.com
businessproviderblog.com
caltonosa.com
calvaryrevivalchurch.org
chastenedsoulwithabrokenheart.com
cheminotsgardcevennes.com
cooksspot.com
cqxzpt.com
deesywig.com
deltacartoonmaps.com
despixelsetdeshommes.com
duocoracaobrasileiro.com
fareshopbd.com
goodpainspills.com
hemendekor.com
kobisitecdn.com
makaigoods.com
mgs1454.com
piccadillyresidences.com
radiolaondafresca.com
rubendorf.com
searchengineimprov.com
sellmyhrvahome.com
shugahouseessentials.com
sonihullquad.com
subtractkilos.com
valeriekelmansky.com
vipasdigitalmarketing.com
voolivrerj.com
zeelonggroup.com
1015southrockhill.com
10x10b.com
111-online-casinos.com
191cb.com
3665arpentunitd.com
aitesonics.com
bag-shokunin.com
brightotech.com
communication-digitale-services.com
covoakland.org
dariaprimapack.com
freefortniteaccountss.com
gatebizglobal.com
global1entertainmentnews.com
greatytene.com
hiroshiwakita.com
iktodaypk.com
jahatsakong.com
meadowbrookgolfgroup.com
newsbharati.net
platinumstudiosdesign.com
slotxogamesplay.com
strikestaruk.com
trucosdefortnite.com
ufabetrune.com
weddedtowhitmore.com
12940brycecanyonunitb.com
1311dietrichoaks.com
2monarchtraceunit303.com
601legendhill.com
850elaine.com
adieusolasomade.com
andora-ke.com
bestslotxogames.com
cannagomcallen.com
endlesslyhot.com
iestpjva.com
ouqprint.com
pwmaplefest.com
qtylmr.com
rb88betting.com
buscadogues.com
1007macfm.com
born-wild.com
growthinvests.com
promocode-casino.com
proyectogalgoargentina.com
wbthompson-art.com
whitemountainwheels.com
7thavehvl.com
developmethis.com
funkydogbowties.com
travelodgegrandjunction.com
gao-town.com
globalmarketsuite.com
blogshippo.com
hdbka.com
proboards67.com
outletonline-michaelkors.com
kalkis-research.com
thuthuatit.net
buckcash.com
hollistercanada.com
docterror.com
asadart.com
vmayke.org
erwincomputers.com
dirimart.org
okkii.com
loteriasdecehegin.com
mountanalog.com
healingtaobritain.com
ttxmonitor.com
nwordpress.com
11bolabonanza.com